-Paz a cambio de verdad-

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Una vez inicias en este camino, te vuelves tanto un defensor de la ley como un violador de la misma.
Lo cierto es qué vives en un punto medio.
No eres bueno por actuar sobre la ley pero tampoco eres malo por que tus acciones llevan a un resultado común y positivo.

Sin embargo, es cuestión de conciencia el hecho de qué tal vez y solo tal vez, tu no salgas ileso, o probablemente no los qué te importan.

Dinah Lance, aquella noche cuidaba de la pequeña Mia, aquella noche en qué sus vidas cambiarían de nuevo, la noche en que Slade Wilson quedó en coma y Oliver Queen perdió un brazo.
Recibió la llamada de Bruce y corrió rápido al hospital más cercano.
Casi le da un infarto a Dinah, hacía apenas unas horas su marido le decía qué era una misión rápida, que entraban y salían. Pero Oliver olvidó por un momento qué tenía que volver a casa, pero las ganas de detener a Slade lo nublaron. ¿Era mas importante detener a Slade qué volver a casa?
Hasta día de hoy, ni Oliver ni Dinah lo saben con certeza, sólo saben qué desde ese punto, la vida de golpear chicos malos terminaría.

_¡Bruce!_Gritó Dinah llegando al piso del hospital, dónde Bruce estaba con su disfraz dañando de Batman, observando desde un cristal a Oliver siendo atendido por cirujanos.

_Dinah_ Dijo Batman con tono compasivo.

_Batman, ¿Que carajo pasó haya?_ Recriminaba Dinah a Batman.

_Deathstroke nos tendió una trampa, hicimos lo qué pudimos contra el pero, iba dispuesto a matarnos...

_Con un demonio Bruce, les dije qué Oliver ya no estaba en condiciones de pelear y sin embargo tu y la Liga pidieron que se quedara orgía de cabrones_Respondió Dinah entre lágrimas.

_Dinah yo, lo lamento, estará bien pero su brazo...

_Maldita sea Bruce, me importa una mierda llamarte Bruce o Batman ahora pero te prometo que sí te vuelves a acercar a mi familia, tu o tus hijos, ¡te juro qué no responderé!

_Calmate, estas alterada, Oliver va a estar bien, sólo necesita reposo.

_¿Reposo? Ese hijo de puta mutilo al padre de mí hija, no me pidas que me calme por qué esto es tu culpa.

Batman bajó la cabeza, dejó a Dinah llorando y se dirigió por el pasillo, ella observó a su marido siendo operado, aun con la máscara puesta, con su brazo sano, el mostró el pulgar a su esposa y ella soltó una risa aun entre lágrimas mientras los médicos dejaban pasar a Dinah con Oliver.

Batman esperó en el elevador y al abrirse, los tres se cruzaron.
Selina, qué llevaba de la mano a una niña pequeña miraron al hombre murciélago.
La niña con un poco de miedo y Selina con sorpresa y con ambos ojos llorosos.
Pronto Selina sin dirigirle la palabra a Bruce siguió de largo rumbo con Dinah y Oliver.
Batman la vio irse y Helena, con curiosidad, volteó a ver a ese misterioso hombre, y cruzaron miradas.
Padre e hija se conocieron esa noche para verse nunca más.

Helena despertó después de que la camioneta pasara por un tope qué hizo saltar a las chicas.
Mia tenía una cara de maniaca, conduciendo por la carretera de noche rumbo a Star City.

_¿Como puedes dormir en esta situación?_Preguntó intranquila Mia.

_No e dormido en dos días y no soporto despierta los viajes en carretera.

_Tus excusas son una mierda.

_Tu pánico es una mierda, dices que tú madre es una metahumana que tiene un grito sonico como el de un canario y tu padre podría lanzar una flecha con viento en contra y dar en el blanco.

_Ok primero que nada, tú mamá se enfrentó al mismísimo Red Hood y le daba pelea a tú padre, el cuál venció a Slade miles de veces.
Mi padre tiene sesenta putos años y mi madre va rumbo a los cincuenta, no creo que tengan la agilidad y fuerza ¡De hace veinte malditos años!

HUNTRESSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora