La Hermana De Samford

Conversación en la Rivera

Estaba paseando con mis auriculares y comiendo  una manzana cuando veo que estoy en la Rivera y Mark y los demás están entrenando, veo que hay espías en el puente y los otros se piensan que son hinchas.
Suelto una carcajada pero veo que una limusina me va a atropellar así que con mis reflejos la esquivo por poco.
Estoy tan enfadada que cuando veo que una chica pelirroja sale, decido ir a cantarle las cuarenta
Pongo mi cara más seria y veo que los que empiezan a verme se asustan.
Le doy dos toquecitos en el hombro y me mira extrañada.
-¿Como te llamas?- le pregunto suavemente.
-Me..me llamo N...Nelly- la chica está asustada
-Muy bien NELLY, la próxima vez que quieras atropellar a alguien, espera que yo no esté delante, descerebrada hueca- digo enfadada.
-¿Y tú quien te crees que eres?- ahora ella está enfadada.
-Vaya, que mala memoria tienes, Nellyta-me burló
-¿Como me has llamado?-
-Veras Nelly me creo la delantera estrella de la Royal Academy, crei  que como presidenta del consejo estudiantil tenías buena memoria-esta se pone roja.
Ahora me dirijo al equipo.
-Y vosotros palurdos, no os dejéis engañar, esos que veis no son hinchas si no espias- les digo
-¡ESPIAS!-
-Eso he dicho, cuando alguien consigue "ganarnos" y luego gana otros partidos envían a gente a espiar-
-¡Oh no y que hacemos!- dice Rose preocupada
La miro fijamente antes de suspirar y cerrar los ojos.
-Dame el balón Blaze, hoy me siento generosa- le pido
El me lo da y lo pongo bajo mi pie.
-Si quieren espiar supertecnicas aquí tienen- echó a correr rapidísimo como nos enseñan en la  Royal salto y chuto el balón en el aire mientras giro.
-¡Mordida de serpiente!- dirigiendo el balón al puente todos los papeles salen volando y los espías se quitan asustados.
Caigo al suelo sincronizada mente  y les devuelvo el balón.
-Muchas gracias, oye como te llamas, es la segunda vez que te veo- Mark corre a mi sonriendo.
-Eres muy pesadito sabías, me llamo Shana- digo para que se calle.
-Pues muchas gracias Shana, oye te gustaría entrenar con nosotros?- el equipo y yo le miramos raro.
-Soy tu rival, no sería adecuado- digo extrañada.
-Que más da, en el campo somos rivales pero después podemos ser amigos-dice saltando alegre
-Aja, lo siento pero paso- doy media vuelta para irme.
-Shana-oigo a Rose y me giro  levemente para mirarla
-¿Porque nos has ayudado realmente? ¿Acaso te atrae el futbol del Raimon?- me pregunta.
-Ni de cerca me atrae, solo lo he hecho porque no merecen tanta atencion-me encojo de hombros.
-Eres insoportable-me suelta Kevin
-No sé si llorar o reir- digo con frialdad.
-De que hablas-
-Veras, creo que el título de insoportable es todo tuyo, dime quién era el que se jacto de que era buenísimo en el partido contra nosotros y el que tuvo celos de Blaze en el partido contra el instituto Occult, puede que tengas una supertecnica pero en realidad no eres nadie, de hecho hasta Jack es mejor que tú en humildad- digo dándole en mordisco a la manzana.
Kevin estaba que echaba humo.
-Retira lo dicho- me dice
-Va a ser que no, lo retirare cuando realmente vea que has cambiado, aunque sinceramente lo dudo-
Ahora sí estoy dispuesta a irme
-No tuvisteis piedad con ellos, como te atreves a hablar de compañerismo si ni siquiera sabes el significado de la amistad- me dice Rose.
Echando chispas me dirijo a ella, ya estoy harta de su hipocresía.
-Rose Fiquette-me dirijo a ella.
-Si, Shana Thalise Samford-me dice ella enfadada.
-Estoy harta Rose, y las demás también lo están, y creo que no eres la indicada para hablar de compañerismo y menos de amistad siendo tú la que nos abandonaste para irte con el Raimon solo por una discusión sobre el partido-
-¿Que quiere decir con eso Rose?- pregunta Celia
-Abandonaste a las chicas de la Royal, para largarte al Raimon como si nada, Flama y Sky intentaron hablar contigo dos veces pero pasaste de ellas-dije lentamente remarcando algunas palabras
-¡Eso no es verdad!- chilla a punto de llorar.
-¡Lo escuché todo Rose, estaba detrás del banquillo y lo escuché todo!- le dije perdiendo los estribos.
-¡No!- cae al suelo llorando.
-Lo peor es que aún te echan de menos y a ti ni siquiera te importamos!- digo retirandome finalmente de allí  y volviendo a la mansión Sharp.