Aphrodite's Club [Kookgi]

Primeros problemas

[9]

YoonGi gemía sin parar.

Las caderas de hombre de cabello azabache se movían lentamente, besaba y chupaba su piel con devoción, degustando la textura de su cremosa extención.

El rubio estaba echado sobre su espalda mientras su amante entre sus piernas le hacía el amor lentamente, sin mucha prisa, pues era aún de noche y faltaba para la salida del sol.

A pesar de toda la condición de YoonGi este se negaba a dejar a su amante; no creía durar mucho si no lo veía y cada día lo necesitaba más; se había vuelto lentamente algo indispensable para su existencia y su razón de seguir aguantando la monotonía de su aburrida vida.

Dos meses y medio después de la primera vez juntos su relación se había vuelto una montaña rusa de emociones, deseo y lujuria.

El hombre besó sus labios cuando YoonGi llego al orgasmo y mordió sus labios con hambre mientras esté mismo se corría nuevamente en su interior.

Lo habían echo en todas las partes de la habitación, en cada pared y frente a cada ventana, esa habitación conocía cada uno de los recuerdos de sus pieles desnudas.

Hoy lo habían echo sobre una mesa que estaba frente a uno de los ventanales, el hombre había preparado está vez una hermosa demostración de lámparas de aceite en el aire.

YoonGi no sabía cómo el hombre hacia cosas tan románticas para él, pero las disfrutaba tanto, era un detalle demasiado seductor.

Ya habían probado varias cosas interesantes que hacían todo emocionante, mucho más de la cuenta.

Después de tres sesiones de hacer el amor ambos estaban ya recostados en la cama.

- Ángel, ¿en qué piensas tanto? - El azabache se detuvo luego de besar sus labios y no haber sentido que YoonGi le seguía.

Y es que el rubio no podía sacar las dudas de su cabeza y seguir adelante.

- ¿Cuál es tu nombre? - Preguntó de una vez por todas haciendo que su amante se sorprendiera y se detuviera.

YoonGi miró sus ojos color ámbar, esos ojos que veía en en sus sueños incluso, que imaginaba después de haberlos visto toda la noche.

- Ya lo sabes ángel, soy tu amado - Sonrió e intentó besarlo pero YoonGi sujeto delicadamente su rostro con las manos parandolo.

- Sabes a lo que me refiero - Respondió el rubio - Quiero saber tu nombre, estoy cansado de verte con este antifaz y no poder susurrar tu nombre cuando siento placer.

El hombre miró con duda, pero en su desesperación YoonGi susurró.

- Quiero que nos conozcamos, sin nada de por medio.

El hombre sonrió y besando la piel de YoonGi respondió.

- Ángel tu ya me conoces sin nada de por medio - Su tono juguetón casi hicieron caer a YoonGi pero este se levantó de la cama separándose del hombre.

- Sabes que no estoy hablando de eso - Dijo en tono molesto - Quiero conocerte pero parece que tú no a mí - Sus ojos picaban y quería quitarse el antifaz, comenzaba a molestarle aquél único accesorio - Es como si solo fuera una cogida de una noche para tí.

Trató de ir al baño pero el hombre lo sujetó y lo arrastró a la cama, se puso entre sus piernas y tomó sus brazos, elevándolos por encima de su cabeza.

- No eres eso para mí ángel - Su voz ronca causo estragos en su respiración y los latidos - Eres mucho más que eso...

- No parece, si fuera así me habrías dicho quien eres desde el primer momento - Recrimino YoonGi tratando de retener las lágrimas que querían brotar de sus azules ojos.