UN LABORATORIO QUE REALIZA EXPERIMENTOS ILEGALES SE QUEDA CON UN CANÍBAL ABORIGEN MIENTRAS LES SIRVA PARA SUS ESTUDIOS GENÉTICOS ESTARÁ A CARGO DEL DOCTOR ROGEL CONTROLARLO Y DOMESTICARLO SERA SU PEQUEÑO GRAN PROBLEMA O ESO ES LO QUE CREÍA.
#1 Mange...
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Esa mirada carmín no era una mirada común, no solo por el color rosado casi rojo, si no por su intensidad, era capaz de penetrar la mente, especialmente debajo de sus ojos tenía muchas pequeñas pecas que le daban una tonalidad naranja a su piel tan blanca, y sus mechones cobrizos caían por su frente, lo miraba insistente sin pestañar, lo tenía tan cerca que su corazón latía fuertemente al no poder escapar de su mirada, tenía ¿miedo? No se sentía como miedo, su boca goteaba sangre y comenzó a hablar en su dialecto con una voz suave como cuando se dirigió a él en el área de hospital, Mangel le respondió igual de suave pues estaban tan cerca que con hablar despacio se escuchaban.
- Empo yaitowy maukaa, Sai kokuro-
- ¿Qué?-
- Kokuro otaka-
- ¿Qué significa?-
El aborigen se acercó a Mangel y le planto un beso en los labios introduciendo su lengua, el sabor a sangre lo paralizo, pero sus labios besaban muy bien, tenía mucho miedo y estaba excitado.
- ¡Mangel despierta!-
El Doctor Rogel se sentó de golpe en la cama sudando, Raúl encendió la luz de la lámpara y vio que estaba sangrando de la boca y su entrepierna estaba endurecida.
- Estas sangrando (agarró pañuelos del mueble y lo limpió) abre la boca-
Mangel obedeció y Raúl con la linterna del celular lo revisó.
- Es solo superficial, te mordiste el labio ¿Qué estabas soñando?-
Lo dijo señalando su erección.
- No me acuerdo-
- Enjuágate la boca para que te deje de sangrar, ya me voy a dormir, mañana hay que ir muy temprano al trabajo, buenas noches cariño-
Al día siguiente las actividades en CICA.ECH iniciaban antes de las siete con los primeros trabajadores, los cuales eran de cambio de turno, los guardias de seguridad y el área de limpieza, para cuando llegaran los doctores todo debía estar impecable y cada cosa en su lugar. Luzurriaga era muy estricto en todo, hasta estaba pendiente del orden de las cosas en cuanto a acomodo y limpieza se refería.
