V. No te conozco.

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(Sofía)

Volvimos al instituto media hora antes de que terminara, por lo visto creo que todas se llevaron bien, o la mayoría.

Barbara se volvió a su cuarto y yo al mío. No dejaba de pensar en qué pasará ahora, ¿y si gusta de mí? ¿Y si me intenta besar? ¡¿Y si me quiere violar?!, agh. Borre todos aquellos pensamientos y me adentré en mi cama. Necesitaba paz, relajación, algo que me hiciera olvidar que Barbara era... Lesbiana. Oh, hasta me costaba pensarlo.

Tomé mi celular, mis audífonos, puse la canción "Prayer in c" y me fui quedando poco a poco dormida.

A la mañana siguiente no quería ni salir de mi cama, Kezzy creo que estaba durmiendo en la habitación de alguna de sus nuevas amigas, puesto a que esta no estaba. Vi la hora en mi celular, 8:50am. No tenía hambre, así que me salté el desayuno, me dispuse a meterme a la ducha, no sé cuánto tiempo estuve ahí, sólo sé que no le tomé importancia. Me vestí, lave mis dientes, tomé mi celular, hora; 9:40am.

Me puse un tipo de "capucha" ya que hacía un toque de frío, me fui a la salida de atrás del intituto, no había nadie ahí, agradecí a Dios en el camino no encontrarme con Barbara.

Me senté en unos de los escalones de la entrada, tomé mi celular, mis audífonos, y puse aquella canción que me producía sentir paz. Sí, Savior.

Dentrada en mis pensamientos mirando a la nada, alguien toco mi hombro. Rogué en mi interior que no sea Barbara. Pero la suerte no estaba de mi lado.

-¡Hey! ¿Cómo estás? ¿Te pasó algo?- me dijo algo preocupada.

-Ho...hola, sí..bien, no, no, nada.- ya comencé a tatarear.

-Que bueno. No hablamos de hoy en la madrugada. ¿Estás evitándome?- dio justo en el blanco.

-¡Claro que no!- claro que sí - es sólo que quería pasar un tiempo sola.

-Oh, entiendo, entonces.. Nos vemos luego- dijo con una sonrisa forzada.

Agradecí que se hubiera ido, en este momento lo menos que quiero es pasar tiempo con ella.

No sabía qué hacer en un día Domingo. En casa hacía lo mismo que hacía todos los días. Estar sola leyendo un libro. Mi mamá trabaja, por eso paso la mayor parte del tiempo sola. ¡Eso es! Pediré permiso para salir, y llevaré un libro conmigo.

Ya estaba en las calles de Londres, no sabía qué hacer, busqué una biblioteca, necesito otros libros, los que traía ya me han aburrido.

Le pregunté a una anciana que estaba en un parque, me dijo que estaba en unas calles más allá.

Al llegar, la biblioteca era enorme, es como esas que se ven en las películas, con mucha luz, sillones, montoneras de libros, etc.

Entré. Había un silencio de paz pura. Comencé a recorrer los pasillos, viendo libros, tomé uno, y comencé a leerlo en un sillón de una esquina.

La hora pasó volando. Cuando noté que estaba atardeciéndo, me encaminé hacia la salida. Eran aproximadamente las 6 de la tarde.

Al llegar, traté de entrar sigilosamente. Pero como ya verán, la suerte no estaba de mi lado. El portero me tomó por sorpresa y pensó que era una persona cualquiera tratando de entrar al instituto. Le di mis datos y notó que era una alumna, me dejó pasar no sin antes regañarme.

Afuera había comido unas patatas fritas conjunto a un refresco. Pero ya habían pasado unas horas de que comí eso, entonces el señor hambre comenzó a rugir.

Entré a la cafetera para comer algo, saqué un sandwich de pavo y me dirigí a mi habitación.

(Barbara)

No había visto a Sofi en todo el día. ¿Dónde se había metido? ¿Le habrá pasado algo? Pregunté por ella a unas alumnas, me dijeron que había salido. ¿Estaría evitándome? Sabía que no debía decirle lo de Steffi, soy una estúpida. Lo arruiné todo. Traté de buscarla en el instituto, pero ni rastros de ella, busqué en el baño, la cancha, la cafetera. Nada.

En la habitación.

Claro, cómo tan tonta. Me dirigí hacía su habitación, estuve como 5 minutos afuera de la habitación, no sabía qué decirle. Rogaba en mi interior pudiera comprenderme.

Tomé el valor, y toqué la puerta. Abrió.

-¿Sí?- dijo igual de fría que mi madre.

-¿Podemos hablar?

-Y tenemos que hablar sobre...- me miró esperando una respuesta.

-Ya verás.- dije haciéndole señas para que saliera.

Fuímos a la cancha.

Todo el camino fue un silencio incómodo.

-Ya... Ahora, ¿me puedes decir qué quieres hablar?- dijo igual de fría que hace un rato.

-Es que.. Sé por qué estás así.- soné un tanto insegura. Mucho diría yo.

-¿Así cómo según tú?- tenía una actitud que no conocía.

-Es por lo que te dije de Steffi, ¿no es así?- guardo silencio - ¿no soportas pensar que soy lesbiana? - de nuevo ese silencio - Está bien. Si así lo quieres, me da igual, quiero que sepas una cosa. - la atormentaré más con esto -  Me gustas, ¿y qué? ¿El amor tiene que ser hombre con mujer? No me importa lo que piense el resto. Pero al parecer a ti sí. Ni quieres tenerme de amiga, te da miedo. Ya no quiero seguir aquí hablando sola. Adiós. - me fui.

Sofía, - sí, ya nada más de Sofí - se quedó allí parada. Me sentí mal, pero a la vez bien por haber sacado todo eso de mi interior. Dios le dije que gustaba de ella. Ahora sí que no querrá ni verme.

(Sofía)

Barbara me dejó atónita. No supe que decir, ¿gustaba de mí? Lo sabía. Me sentí mal al ver cuando se iba. No pude articular palabra alguna. Todo lo que dijo era cierto. Me dispuse a ir a mi habitación.

Al llegar, Kezzy ya estaba dormida, cosa que agradecí, y como siempre, tomé mi celular, los audífonos, y música al máximo, así fue que me dormí.

A la mañana siguiente tenía clases a las 8am, desperté a las 7:30am.

Joder, estaba atrasada. Me di una rápida ducha, me vestí, lave mis dientes, y salí. No alcancé a tomar desayuno, mi estómago deberá esperar hasta el almuerzo. Hoy me tocaba matemáticas, la suerte maldita me tenía odio. Hoy Barbara estaba en mi clase.

Llegué unos minutos tarde, pero rápidamente tomé asiento.

Traté de no mirarla pero me era imposible después de lo ocurrido anoche.

(Barbara)

No tenía ni idea que Sofía estaría hoy en matemáticas. Ni la miré, no quería.

Al terminar la clase, salí lo más rápido que pude así dejándo a Sofía atrás.

Me dirigí a mi casillero, saque unos libros, y mi cuaderno de literatura. Me dirigí hacia la siguiente clase.

Así pasó el día sin hablar con Sofía.

El día fue totalmente aburrido, en el almuerzo comí junto a Darla, pero no es como estar con Sofía. El día llegó a su fin.

Así fueron pasando los días, todos los días, TODOS LOS DÍAS, eran igual.

Así fue un tiempo en el cuál fingíamos que Sofía y yo, no nos conocíamos.

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Holaa, disculpen si el cap es muy corto, o no sé, pero bueno. Uhh Sofía es una homofóbica :O
¿Barbara hizo bien?
Ay:( pobres. Son las 4:50 am jajja.
Subiré capítulos todas las madrugadas :3, espero gusten, ¡no olviden votar y comentar!

Barbara y SofíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora