Sonó la alarma de mi móvil lo que indicaba que tenía que levantarme pues tenía que ir a clases, al despertar vi a Kirito que estaba profundamente dormido, a veces me daba envidia la manera tan fácil que tenía para dormirse y no enterarse de nada, me acerqué para despertarlo con un beso. Cuando junté nuestros labios noté como se empezaba a mover lo cual significaba que se estaba despertando.
-"Buenos días días marmota" dije dándole otro beso "Es hora de ir a clases y tú tienes que ir a tu casa a cambiarte".
-"Te equivocas" me dijo con una sonrisa mientras sacaba de su mochila el uniforme del instituto.
-"Sí que tenías preparado lo de esta noche Kirito". Al cabo de unos momentos tocaron a la puerta de mi habitación.
-"Asuna, tu padre y yo nos vamos ya, ¿vienes con nosotros?" Me levanté de un salto de la cama para esconder a Kirito pero no me acordaba que estaba desnuda y me ruboricé no podía tardar mucho en responder o mis padres intentarían entrar en mi habitación. "Tranquila mamá iré en el tren". Una vez se fueron mis padres nos apresuramos a vestirnos para irnos al instituto, pensé que ya no había nadie en casa y cuando estábamos a punto de salir por la puerta.....
-"Buenos días tortolitos". Era mi hermano Kou que aún seguía en casa.
-"Bu....bu.....Buenos dias" dijimos Kirito y yo al unísono mientras nos giramos algo sonrojados.
-"Tranquilos sabía que Kazuto estaba aquí, pues se escuchaban ruidos extraños salir de tu habitación, menos mal que mamá y papá estaban ya dormidos" dijo Kou riéndose. "De todas formas, debéis de tener más cuidado, ya sabes lo que piensan nuestros padres sobre el tema de relaciones fuera del matrimonio, supongo que habréis tomado precauciones".
-"Tranquilo Onii Chan, tomo las pastillas y tranquilo la próxima vez iremos con más cuidado aunque no quiero que se repita lo de anoche" dije un poco avergonzada pues un poco más y casi nos pillaban anoche. "Buenos nos tenemos que ir a clase, nos vemos luego". Agarré a Kirito y salimos de casa, él estaba un poco en shock pues no se imaginaba que nos escucharan anoche y encima encontrarnos con mi hermano esta mañana por lo cual Kirito estaba super sonrojado de la vergüenza que sentía.
Kirito agarró la moto y pusimos rumbo al instituto, una vez llegamos nos bajamos de la moto y cuando nos bajamos alguien me llamaba.
-"¡Eyyy Asuna!" Era Liz que se acercaba corriendo a nosotros. "Que raro que hayáis venido juntos a la escuela, por lo general soléis venir cada uno por separado y os juntáis aquí" dijo Liz con una expresión pensativa. "Bueno vamos o se nos hará tarde" dijo agarrándome de la mano y llevándome dentro del edificio.
-"Nos vemos luego en el almuerzo en el sitio de siempre Kirito". Él solo asintió con la cabeza por lo cual me dejaba algo preocupada pues no había dicho palabra alguna desde esta mañana y no sabía que le podía pasar.
-"Asuna, sabes que puedes contar conmigo para lo que sea así que si alguna vez quieres hablar de algo o contarme lo que sea siempre voy a estar para escucharte porque eres mi mejor amiga..." dijo Liz un poco seria mientras nos acercábamos al aula. "Nosé que te has echo hoy pero te sienta muy bien, se te ve más feliz y más relajada" Al escuchar eso me dí cuenta de que Liz se había dado cuenta de que algo había pasado y era raro que no hiciera una de sus típicas bromas.
Durante las clases no paraba de pensar en qué le podía pasar a Kirito lo cual hacía que tuviera mi mente en las nubes que hasta el profesor me llamó la atención un par de veces. Una vez sonó el timbre de la hora del almuerzo salí corriendo del aula y empecé a subir hacia la azotea, donde me vería con Kirito pero al llegar no había nadie allí, supuse que aún no habría llegado por lo que decidí esperarlo, pasaban los minutos y seguía sin aparecer, al poco tiempo llegó Liz junto con Sílica y me dijeron que Kirito se tuvo que ausentar de clases pues no se encontraba bien lo que hizo preocuparme más pues ni me había mandado ningún mensaje para avisarme, era raro que actuara de esa manera.
Al acabar las clases me dirijí hacia mi casillero y al abrirlo calló una carta, abrí y en ella decia:
Discúlpeme mi subcomandante, sé que te debo una explicación del porqué me ausenté a nuestra cita del almuerzo pero juro que se lo compensaré. Necesito que me haga un favor y vaya hacía el lugar donde quedamos por primera vez, una vez allí dirígete ve hacia una caseta de premios que han puesto nueva, su siguiente pista la aguarda alli.
Atentamente:
El espadachín negro.
Hice caso y fuí corriendo hacia el parque donde tuvimos nuestra primera cita, me acerque al lugar y probé suerte, de premio me tocó un conejo parecido a los que había en Aincrad y venía con otra nota:
Su siguiente destino es nuestro lugar de reuniones habitual, allí te esperará Klein con el siguiente destino.
Salí corriendo hacia el Dicey Café y efectivamente, allí estaba Klein esperándome.
-"Asuna, no pienses mal, pero debo de vendarte los ojos, son órdenes de Kirito" dijo Klein mientras sacaba un pañuelo y me lo ponía en los ojos, una vez que no veía nada Klein me llevó hacia su coche y nos pusimos en marcha hacia un lugar donde yo no sabía cual sería.
Al cabo de una hora llegamos y Klein me llevó hacia un lugar y me dijo que me quedara allí de pie y que enseguida me darían nuevas instrucciones, al cabo de unos 10 minutos una voz que llevaba toda la mañana anhelando escuchar sonó enfrente de mi.
-"Puedes quitarte el pañuelo"
Una vez acaté la orden me encontré a Kirito arrodillado delante de mí.
-"Se que no ha pasado mucho tiempo desde que te pedí que te casaras conmigo pero ya no puedo esperar más y por eso te e traido aquí, donde me has regalado una de las mejores noches de mi vida" Estábamos en el monte Dodaira, donde me trajo a ver las estrellas y donde tuvimos nuestra primera vez, estaba la puesta de sol de fondo lo que hacia que el paisaje fuera hermoso. "He decidido hacerlo aquí y ahora pues este atardecer me recuerda a cuando nos pasamos SAO y por eso quiero hacerte un regalo más" Kirito hizo un gesto y de repente apareció Liz y Sílica con un paquete que tenía pinta de que aparte de ser grande era pesado.
Al abrirlo ví que era una réplica de mi estoque, la Lambert Light que usaba en Sao en el cual estaba grabado nuestros nombres y una fecha la cuál era: 7 Diciembre de 2028
Empecé a llorar de la emoción pues esa fecha era en la cual Kirito y yo empezamos a salir en el mundo real, lo único que no me cuadraba era la fecha pues fue en 2025, es decir, hace un año.
-"Sé lo que estas pensando y la fecha que está escrita será la de nuestra boda y esa espada será la que corte la tarta" No paraba de llorar y fuí corriendo a besar a Kirito pues comprendía el porqué actuaba tan raro esta mañana. Y así quedaba reflejado que nuestra boda será dentro de 2 años y en una fecha especial para los dos.
ESTÁS LEYENDO
Eres Mío (Asuna y Kirito Lemon)
RomanceUna historia contada desde el punto de vista de Asuna, con mucho contenido Lemon