Eres Mío (Asuna y Kirito Lemon)

Reencuentro

Había pasado un par de días desde que empezó la guerra entre el territorio humano y el territorio oscuro y para mi mayor asombro el grupo de los pugilistas guiados por su lider Iskahn se habían unido a nosotros para luchar contra el Emperador Vector, cuando derrotamos a los caballeros carmesí que  había en nuestra zona aproveché para volver a unir mi brazo que uno de ellos me cortó a mi cuerpo, mientras acababa de sanarme llegó un soldado diciendo de que el Emperador Vector había atrapado a Alice y que el capitán Bercouli iba tras ellos en su dragón, no podía permitir que se llevaran a Alice pero tampoco quería dejar tirada a la gente de Underworld en medio de la batalla por lo que Iskahn y Scheta decidieron quedarse allí junto a un grupo de soldados para evitar el avance de los enemigos mientras nosotros íbamos tras Vector.

Me subí a un caballo y junto a otro grupo de soldados y los carruajes fuimos dirección hacia el sur, cuando estábamos en la zona baja de una zona que parecía un crater circular empezaron a aparecer muchos soldados carmesí rodeándonos, pensé que estábamos perdidos hasta que de repente apareció una luz en la cual se podía ver la silueta de una mujer la cual sacó un arco y lanzó un disparo del cual derrotó a todos los soldados que aparecieron.

-"¿No hay fuego rápido? Perfecto, prefiero las armas de un solo disparo" esa voz se me hizo familiar, me quedé sorprendida cuando vi de quien se trataba. "Siento la tardanza, Asuna".

-"Shinonon" dije mientras corrí hacia ella para abrazarla.

Shinon me contó que había entrado con la super cuenta de la diosa del sol Solus desde la sede de RATH en Roppongi y que Sugu lo hizo con la super cuenta de la diosa de la tierra Terraria pero que no sabía donde estaba. También me dijo que había visto unas ruinas en las que podríamos ir a refugiarnos y en las que no nos podrían rodear.

-"¿Kirito esta en este escuadrón?" preguntó.

-"No hace falta que preguntes" dije tocando el carruaje que tenía al lado. "Está aquí dentro, ¿quieres verle?" guié a Shinon dentro y como pasó conmigo Ronie y Tieze creyeron que era la diosa Solus y Shinon les explicó que no era, que era como yo, del mundo real.

Cuando Shinon vió a Kirito empezó a llorar pues al igual que a mi le dolía ver a Kirito así, Kirito al verla reaccionó pero no tanto como conmigo, vi a Shinon que le murmuró algo a Kirito pero no llegué a escuchar que era, por un momento volví a sentirme celosa y no pude evitar mirar hacia otro lado mientras mis lágrimas empezaban a salir.  Al levantarse dijo que iba a volar sobre las ruinas para ver la zona, al escuchar eso le pregunte sorprendida que si es que ella podía volar y al decirme que si, le pedí que en vez de ir a las ruinas fuera a ayudar a Bercouli para rescatar a Alice a lo que ella aceptó.

Horas después vimos que los enemigos estadounidenses, estaban llegando a las ruinas por lo que mandé a las tropas que estuvieran preparados para atacar, les pedí a Ronie, Tieze y Sortiliena que cuidaran de Kirito mientras que yo iba al frente a luchar. Poco rato después empezó la lucha a lo cual no tuve piedad y empecé a derrotar a los jugadores extranjeros pues no podía permitir que le pasara nada a Kirito. 

Eran demasiados enemigos, yo conseguía derrotarlos pero acabé muy mal herida pues tenía mi cuerpo atravesado con espadas y lanzas mientras que no dejaba de sangrar, vi que llegaban más soldados pero mis fuerzas no querían responder intenté levantarme apoyándome en mi espada.

-"Solo caeré cuando mi corazón se rinda. ¡Así que me mantendré de pie eternamente!" grité mientras volvía a ponerme en posición de atacar pues no podía darme por vencida, pues tenía que proteger todo lo que Kirito ama de este mundo.

Justo cuando los enemigos estaban a punto de llegar hacia a mi apareció un nuevo jugador que utilizó una habilidad de espada, cuando acabó me dí cuenta que era Klein, después aparecieron Liz y Sílica que se acercaron a mi para abrazarme mientras me decían que había luchado muy duro, que descansara pues estaba muy mal, les pregunté como llegaron hasta Underworld y me contaron que fue cosa de Yui, empecé a llorar y a agradecerle a Yui aunque no me escuchara pues hizo que vinieran todos nuestros aliados en ALO, entonces di órdenes a la gente de Underworld que les enseñaran las artes de sanación pues la gente del mundo real no las conoce mientras que yo volvía al frente, esta vez con más fuerzas y feliz pensando de que estaba cerca la victoria.