Ricardo era un chico como cualquier otro, que asistía a la escuela por la mañana y en la tarde se dedicaba a trabajar en Pocket, una empresa de desarrollo tecnológico, pero con el tiempo Ricardo fue haciéndose una mala reputación por como trataba a...
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Ricardo abría cada puerta que veía pero solo entraba a un nuevo cuarto donde tomaban fotos o hacían tatuajes, su desesperación aumento al no saber dónde estaba la salida y aparte porque sabía que la chica que era tenía drogas o alcohol en su sistema, al estar entrando en diferentes cuartos llegó a uno donde había ropa, se puso unos jeans junto con una blusa negra y abrió la ventana para salir por ella -A dónde vas Bárbara- le grito un hombre desde la ventana, pero Ricardo corrió sin ninguna dirección específica hasta ver una estación del metrobús, entro como pudo ya que no tenía la tarjeta y al llegar el camión entro para sentarse navegando sin un rumbo especifico, viendo su reflejo no tenía ni idea de quién era en ese momento, tras estar reencarnando en las personas que daño antes de su accidente y en especial por ser el último cuerpo debería tener súper claro quién era pero no era así. Al buscar en su teléfono donde vivía se dió cuenta que estaba avanzando en la dirección contraria, se bajó para tomar el metrobus de la dirección correcta durante el transcurso del viaje varias personas le pedían que si se podían tomar una foto con ella, Ricardo no tuvo de otra más que aceptarlo y al llegar a su departamento comenzó a buscar en la computadora quien era porque su teléfono tenía un 30% de batería y no quería gastarla en eso aún sin haber visto el vídeo, en su búsqueda vio fotografías de la chica que era, así supo que era modelo y que se presentaba en diferentes convenciones de ropa y cosas por el estilo -Mierda, juro que no te conozco- Seguía investigando y noto que también actuaba en algunas obras de teatro y se presentaba en estaciones de radio -Demonios, tienes una vida perfecta no entiendo que te pude haber hecho para que aparecieras en mi lista- Ricardo se puso a ver vídeos de las obras en que aparecía Barbara hasta que decidió ver el vídeo
BÁRBARA AVENDAÑO, MODELO Y ACTRIZ, UN DIA COMO CUALQUIER OTRO PARA BÁRBARA SALIO DE SU DEPARTAMENTO PARA REUNIRSE CON SUS AMIGOS Y GRABAR UN VIDEO PARA SUS REDES SOCIALES, CUANDO TERMINARON DE GRABAR POR LA MAÑANA TOMO PRESTADO UN AUTO PARA IR POR COMIDA Y OTRA CHICA DECIDIÓ ACOMPAÑARLA, TODO ESTABA BIEN HASTA QUE SE DETUVIERON EN UNA LUZ ROJA Y AL PONERSE EN VERDE COMENZARON A AVANZAR Y MAS ADELANTE DE LA NADA APARECISTE RÁPIDAMENTE IGNORANDO LA LUZ ROJA QUE TENIAS POR LA PRISA Y SIN QUE TE DIERAS CUENTA, BARBARA TUVO QUE ESQUIVARTE DANDO UN VOLANTAZO IMPACTANDOSE CONTRA LA PARED, BÁRBARA PUDO SALIR BIEN POR DESGRACIA LA AMIGA NO, MURIÓ POR UN GOLPE EN LA CABEZA, LA FAMILIA DE LA CHICA CULPO A BÁRBARA DEMANDANDOLA POR LO QUE TU MISIÓN ES PROBAR LA INOCENCIA DE BÁRBARA
-Mierda, Mierda, Mierda- repetía Ricardo una y otra vez aumentando su ansiedad, ni sabía el asunto de la gravedad de este problema y su ansiedad aumento al ver el citatorio a la corte dentro de dos días, no sabía cómo podría escapar de ese problema solo que si había una opción pero no lo beneficiaria a el, seguramente a Barbara si pero para el sería la perdición.
Por la puerta entro la muerte también al borde de un ataque de nervios -Tenemos muy grandes problemas- -No me digas, apenas te das cuenta de eso- -Por lo de Daira tenemos fuerzas más allá de mi poder detrás de los dos- -Sabias lo de Barbara- -Yo sabía todo sobre tu lista y lo que le habías hecho a todos los que la conformaban- -Entonces sabes que si ayudo a Barbara será mi fin- -Eso es un problema para mañana, ahora tenemos que planear como escapar de él- -No podemos esperas, aguarda un momento dijiste de él- En ese instante entro una corriente helada de aire y posterior a eso una risa siniestra -Tenemos que irnos- grito la muerte demasiada paniqueada, abrieron la ventana para salir por ella y bajar por la escalera de incendios hasta llegar al piso donde se echaron a correr sin voltear atrás. Cuando el viento se calmo entro un hombre con un traje y pañuelo rojo al departamento de Barbara, miro para ambos lados analizando la zona para sonreír -Se que me escuchan y aprovecho para decirles que no pueden escapar de mí- Después salió del departamento tranquilamente Ricardo seguía corriendo con la muerte sin saber a dónde ir, Ricardo quería parar para que le diera una explicación pero la muerte no se detuvo hasta que llegaron a un bodega Aurrerá -Que mierda está pasando a ahora y quién es ese que escuche en el aire- -Es alguien superior a mi que se enteró de Daira y quizás nos coloque en algún anillo del infierno sino lo resolvemos- -Muy bien, sin presiones- -Tenemos que encontrar a Daira- -Eso es fácil, mañana su equipo tiene partido y tiene que animarlos- -Como lo sabés- -Yo fui ella por una semana- -Tenemos que buscar un refugio para pasar la noche- La muerte sugirió que no se quedarán en un lugar muy solitario así que buscaron la manera de colarse en una discoteca para pasar la noche ahí Al otro día partieron para el campo donde entrenaba Daira -Tengo una duda- dijo Ricardo al ver a Daira con las demás chicas -Ahora que se te ocurrió- -Ella va a poder verte- -Me vera como una mujer aunque no verá mi verdadera forma- Pronto Ricardo noto que se les quedó viendo cómo si supiera que hablaban de ella, soltó los listones que tenía en la mano y empezó a caminar hacia ellos lentamente, la muerte también comenzó a caminar hacia la entrada del campo, Ricardo se quedó parado porque no sabía que hacer o si debía acercarse, vio a Daira hablando con la muerte y después lo volteo a ver, Ricardo se giró rápidamente disimulando que también intentaba poner atención -Hola Ricardo- dijo Daira detrás de él -Creo que me confundes, en primera soy mujer y si no me crees mira mis pechos y en segunda me llamo Barbara- -Si eres el mismo Ricardo que trata siempre de decir algo irónico para esquivar situaciones- -Sigo sin saber a qué te refieres- -Ya déjate de estupideces Ricardo que el tiempo es oro- Se fueron los tres caminando hasta entrar a un pasillo donde se encontraba un auto el cual la muerte rompió el cristal para abrir la puerta, entrar y encenderlo, se alejaron en el mientras le explicaban a Daira el problema que había -Supongo que no bastará si solo me borran la memoria- -Me temo que no, porque violando una regla primordial y tú eres daño colateral- Seguían avanzando en el carro dando vueltas únicamente sin detenerse hasta que la temperatura comenzó a bajar, la muerte siguió conduciendo algo más nerviosa se comenzó a alejar de la zona donde daban vueltas y la temperatura volvió a aumentar, fue entonces en qué Ricardo recordó lo que vio en Pocket y que debía advertirle a Pamela de los planes de Carlos -Tengo que ir a Pocket- -Para que demonios quieres ir ahí- se molestó la muerte -Pamela está en peligro- -Si tu cerebro de modelo aún no lo capta nosotros también estamos en peligro y lo que nos persigue es mucho peor- -Lo sé, pero tengo que ayudarla- -Si el te atrapa será tu fin- -Correre el riesgo- La muerte detuvo el auto para que Ricardo saliera y se fuera a Pocket al cabo que ella volvía a conducir, sin mirar atrás Ricardo corría por las calles, el rostro de Barbara expresaba lo angustiado que estaba y al igual que la anterior vez, varias personas querían una foto pero el siguió corriendo, sentía como sus pechos rebotaban lo cual era una nueva sensación para él, porque era el primer cuerpo con el que corría con una gran desesperación, al llegar al metro se brinco los torniquetes y entro al vagón, tras varios transbordes llegó a Pocket, su cuerpo sudaba y estaba despeinada. Por como vestía no la dejarían pasar pero por suerte vio una puerta abierta por dónde llegan los cargamentos, se metió por ahí y sin que la vieran fue avanzando hasta el almacén que es donde van las cosas perdidas o las no reclamadas, busco por todos lados la caja con su nombre pero al parecer ya la habían movido -Donde mierda la pusieron- dijo al revisar otra vez, pero el sonido de las bocinas de Pocket hicieron que se detuviera
Pamela Medina, favor de presentarse en la sala de oficinas número 4
Repitieron ese anuncio tres veces, Ricardo supo que esa oficina era la de Carlos, lo cual explicaba lo de la caja, entro en pánico porque podría ser una manera de lidiar con Pamela, Ricardo quería salir corriendo para ayudarla pero si veían a una chica que no tiene nada que ver la sacarían inmediatamente, siguió avanzando por el almacén y encontró un uniforme de los guardias de seguridad, se quitó la ropa para ponérselo, los pantalones le quedaban grandes pero improviso un cinturón, la camisa le quedó bien aunque de la parte de los pechos quedó muy justa, se puso el chaleco y una gorra, abrió la puerta y comenzó a ir a la sala de oficina, al llegar al elevador entro y al estarse cerrando las puertas otro guardia metió la mano para abrirlo y entrar junto con otros dos guardias, Ricardo bajo la mirada pero fue inútil -Usted es nueva verdad- -Si- -Lo sabía, yo sé cuándo hay nuevas caras en el equipo- -Si tratas de impresionar a la nueva mejor hazlo en otro momento- dijo otro guardia al sonreír Al abrirse las puertas Ricardo salió del elevador para continuar su camino, al cerrarse las puertas los guardias se quedaron pensando -Tiene un gran trasero- -Demonios-
Ricardo vio a lo lejos a Pamela pero antes de alcanzarla, la jefa de seguridad andaba cerca y sabía que si pasaba a su lado sabría que no es de seguridad y todo se vendría abajo, con un movimiento rápido se metió al baño, se encerró en uno y se bajó los pantalones, para su mala suerte también entro la jefa y se metió en el baño que estaba justo a su lado.
En la sala de oficina estaba Carlos con Rebeca y Edwin, y ellos a la vez con otros tres guardias -Hola Pamela- hablo carlos -Hola- -Seguramente ya sabes a qué viniste- -Por las cosas de mi novio- -Exacto, las reglas dicen que solo el responsable que haya designado el afectado podrá abrir y tocar sus cosas así que es toda tuya- -Eso me alegra mucho pero prefiero esperar a que Ricardo despierte para que el mismo las tomé- -Me temo que debo insistir en que abra la caja y se lleve las cosas- -Ricardo preferiría a qué lo acompañará por sus cosas- -Ya tomo su desicion- dijo uno de los encargados del almacén y cuando se acercaba a tomarla Edwin le disparo a la cabeza con su arma que tenía un silenciador.
Ricardo seguía esperando el momento para salir del baño, pero no quería que la jefa lo viera pero cuando escucho que en verdad había entrado al baño, se subió los pantalones y partió.
En la sala de oficina la situación se ponía cada vez más tensa -No te iba porque morir nadie el día de hoy así que solo abre la maldita caja y podrás irte y jamás saber de nosotros nunca más- grito Carlos al tomar a Pamela del cabello y aventarla contra la caja -Abrela ahora mismo- dijo nuevamente pero ahora le apunto con su arma. En ese momento entro Ricardo aventando la puerta haciendo caer a dos guardias al ver como estaba tomo corrió y empujó a Rebeca pero Edwin le dió un golpe con el que retrocedió y después le apunto con su arma -No te reconozco pero si hablamos podemos llegar a un trato- trataba Carlos de evitar que Ricardo hiciera algún movimiento -Que tipo de trató- -Ayudame por favor- suplicaba Pamela. Ricardo se acercó lentamente a Carlos para que le explicará y cuando comenzó a hacerlo tomo su arma para forcejear por ella y al hacerlo Ricardo aprovecho para dispararle a Edwin en el pecho y después le dispara a Rebeca en la pierna, Carlos se logró quitar a Ricardo al tirarlo al piso -Date por muerta, maldita perra- le grito pero Pamela le dió un golpe en la cabeza para que quedara aturdido, soltó el arma y Ricardo la tomo para dispararle a otro guardia que entraba por la puerta -Tenemos que irnos- Salieron corriendo pero por la entrada estaba repleta de guardias de Carlos, así que entraron a la bodega -Ahora que hacemos- dijo Pamela al borde del llanto -Sube al camión- Los guardias entraron por todas las entradas posibles mientras que Carlos estaba en los estacionamientos, pronto otros dos guardias llevaban arrastrando a la jefa de seguridad quien estaba inconsciente, toda la empresa Pocket estaba en caos, los hombres de Carlos se movían a todas direcciones. De la nada un camión blanco atravesó la puerta de los estacionamientos para salir a la calle y alejarse lo más posible -Quiero que los sigan- Ricardo manejaba lo mejor que podía porque jamás se había subido a un camión -Quiero respuestas- -Te dije que mi contacto te ayudaría en su momento- -Hace unos meses la novia de un amigo me dijo sobre eso pero le pregunté y lo negó todo- -Pues esa soy yo, Carlos quiere algo que está dentro y fue la razón por la que saboteó el auto de Ricardo- -Espera que- -El provocó el accidente, porque el proyecto Dumplex es solo una fachada para sus verdaderos planes y durante la exposición se podía haber revelado eso por eso lo impidió y cuando Edwin le dijo que la información no la pudo recuperar porque la chica encontró el auto y la policía llegó y como en la norma b-16 de los accidentes dice que solo la persona autorizada puede recoger las propiedades por eso estuvieron planeando esto de obligarla a abrir la caja y como la contraseña es 120520 jamás la podrían saber- -Espera como es posible que sepas eso, porque la contraseña es el día que conocí a Ricardo- -Supongo que ya rompí muchas reglas así que porque una más para la colección- -De que estás hablando- -Se que quizás no lo entiendas a la primera pero- -Pero- -No te asustes- -Ya dilo de una vez- -Yo soy Ricardo-.
