➛ Índice.
¹·
↳ Introduction - 26 de Julio
²·
↳ Cold
The Way Home - 31 de Julio
³·
↳ Glass Flakes - 1 de Agosto
⁴·
↳ Colorful Orb - 2 de Agosto
⁵·
↳ Spring Proposals - 3 de Agosto
⁶·
↳ Bubbles - 4 de Agosto
⁷·
...
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Verano. Si no tenías las precauciones necesarias para aquella temporada habían dos opciones, o sufrías un golpe de calor o tenías que abanicarte todo el día y despojarte de la mayoría de tus ropas.
Por suerte, Akaashi tenía un auto con aire acondicionado y Bokuto había pagado un viaje a la playa como celebración por su tercer año viviendo juntos. Sería un viaje de cuatro días pues habían obtenido permiso del entrenador de Bokuto, y el bicolor estuvo tan emocionado al principio que se durmió rápidamente pues estuvo planeando el hospedaje y los sitios que visitarían en el hotel con mucho esmero, Akaashi no podía negarlo estaba muy intrigado por saber adónde irían, el bicolor literalmente solo marco la ruta en el GPS y se cruzó de brazos en el asiento con una sonrisa a pesar de las preguntas que Keiji le dirigía.
Akaashi observo de reojo a su novio, con las manos cruzadas sobre el estómago y una sonrisa serena impregnada en el rostro, el pecho de Bokuto subía y bajaba en intervalos señalando su profundo sueño, a veces cuando a Keiji le costaba conciliar el sueño podía oír a Kōtarō murmurar cosas, nunca sabía de que se trataban pero se notaba que eran de mucho diálogo, su parte favorita era cuando lo usaba de peluche y lo abrazaba.
La voz robótica de el GPS señaló que estaban a dos minutos de llegar y la ventana derecha le brindo la vista de una tranquila playa cristalina visitado por algunas personas que charlaban o gastaban el tiempo en el mar, se detuvo frente a lo que sería y el hotel y divisó algunas personas acercándose, tocó el hombro de su pareja.
- Kōtarō. -hablo bajo- Kōtarō ya llegamos.
Y los ojos dorados se abrieron casi de inmediato.
- Ya llegamos?! -salto del asiento y salió del auto a una velocidad que Akaashi no creía fuera posible- ya llegamos!
Akaashi se apresuró de salir del auto y le dió las llaves al joven que apenas menciono el "lo voy a estacionar" y tomo al saltarin bicolor.
- Cálmate. -Bokuto se detuvo pero la sonrisa no desaparecía- vamos confirmar nuestra reservación.
Kōtarō asintió con frenetismo y dando una última mirada hacia atrás entraron seguidos de dos hombres que cargaban sus maletas, la recepción era un espacio decorado especialmente para la época de verano, el amueblado lucía colores brillantes pero que a la vez le daban a los alrededores más interés por las flores tropicales puestas estratégicamente en los jarrones y algunas de las lámparas. Mientras Akaashi miraba la fuente le ofrecieron una bebida fría de Toronja que acepto con algo de duda, por lo menos sabía que el servicio al cliente no sería malo pero comenzaba a preocuparse por cuánto fue que pago Bokuto.
