➛ Índice.
¹·
↳ Introduction - 26 de Julio
²·
↳ Cold
The Way Home - 31 de Julio
³·
↳ Glass Flakes - 1 de Agosto
⁴·
↳ Colorful Orb - 2 de Agosto
⁵·
↳ Spring Proposals - 3 de Agosto
⁶·
↳ Bubbles - 4 de Agosto
⁷·
...
Música de referencia : Moonlight - Grace vanderwaal.
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Era difícil, muy difícil.
Acercó el lápiz a la hoja y se detuvo en el momento en la punta tocó el papel, luego comenzó a temblar y golpeo su frente contra la mesa soltando un resoplido lleno de frustración.
No definitivamente no podía.
- Bokuto-san, no puede dormir.
- No podría aunque quisiera.
De tanto leer y resolver ejercicios estaba sofocado, sus ojos escocían y sentía una nube dentro de su cabeza que no lo ayudaban a razonar literalmente en nada.
- Duele mucho...
- Traeré algo.
Akaashi se levantó del suelo y salió de la habitación dejando a Bokuto totalmente solo, este se quejaba de vez en cuando por el mismo dolor de cabeza y alzó la mirada sin hacer movimientos bruscos, refrego sus ojos hasta que sintió humedad sobre ellos nuevamente y miro alrededor. Era sábado, día que se suponía era de descanso fue tomado por Kōtarō para estudiar junto a Keiji, porque era muy necesario, la época de exámenes estaba en pleno movimiento y todos se esforzaban por no fallar en el proceso por eso él y Akaashi se pusieron de acuerdo para reunirse, el azabache le ayudaría con las operaciones matemáticas y el bicolor le enseñaría sobre inglés avanzado -al principio le pareció extraño que le pidiera aquello pero acepto con gusto-.
Escucho la puerta y un par de pisadas que se detuvieron a su lado, Akaashi le entrego un vaso de agua y una pastilla -seguramente para el dolor- que Bokuto tomo rápidamente, cerró los ojos un momento y aquella presión se fue desvaneciendo lentamente así que respiro hondo fijándose en el cuaderno que tenía varios borrones y marcas de lápiz. Se enfocaron de nuevo en estudiar y está vez no hubo quejas, no, Akaashi estaba siendo muy amable en invitarlo a su casa para sus sesiones y a pesar de la familiaridad con la que lo trataban ahí no podía ablandarse y rechazar la idea de estudiar, tenía que aprobar ¡Por Akaashi!
- Gracias -le dijo con una sonrisa.
El chico asintió y volvió a sentarse en su lugar, la mesa estaba repleta de papeles y libros algunos con ideas escritas y otros hechos unas bolitas arrugadas, era casi como un espectáculo deprimente de estrés adolescente. Suspiró nuevamente y se resigno a escribir un poco más hasta que algo vibró dentro de su chaqueta que estaba puesta en una silla alejada de la mesa, miro a su amigo como una forma de pedir permiso para contestar pero este estaba muy sumido en su libro así que un poco antes de que la llamada se cayera, contesto.
