➛ Índice.
¹·
↳ Introduction - 26 de Julio
²·
↳ Cold
The Way Home - 31 de Julio
³·
↳ Glass Flakes - 1 de Agosto
⁴·
↳ Colorful Orb - 2 de Agosto
⁵·
↳ Spring Proposals - 3 de Agosto
⁶·
↳ Bubbles - 4 de Agosto
⁷·
...
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Una de las cosas que siempre le habían enseñado a Akaashi era sobre el dicho: la vida da muchas vueltas. Con el paso del tiempo comenzó a buscar el sentido entre las palabras, analizar el significado y crear su propia frase.
La vida era un constante cambio. Cómo mirar el cielo y observar sus colores con el paso del día, rosado, violeta, otras veces azul y finalmente el negro. También alrededor las cosas cambiaban, el renacimiento de la vida, las épocas secas, el declive y finalmente, la muerte para que seguidamente todo volviera a empezar. Los cambios podían ser diferentes unos de otros, algunos pequeños, otros más grandes y todas las maneras de reaccionar a ellos eran viables.
Cuando su madre acabo en el hospital, se sintió frustrado, porque fue muy repentino. Sabía que su madre ya no era joven y todas esas horas gastadas en familia mientras hablaban de cualquier cosa son las que no olvidará nunca. Bokuto estuvo ahí diciéndole que todo saldría bien y Akaashi no pensó las cosas de sobremanera para lograr creerle, los cambios llegaban a ser pequeños pero siempre escalaban a algo más grande.
El cielo despejado de Akaashi pronto comenzó a llenarse de nubes cuando lo volvieron editor en jefe del proyecto, acepto sin reparos, era una gran oportunidad como para desecharla y pensó que sería mejor mantenerse ocupado con el trabajo, cosa que funcionó, siguió con las visitas diarias a su madre pero se entretenía más atendiendo llamadas. Cuando los Black jackals empezaron a participar en competencias internacionales los momentos con Bokuto eran como encontrar diamantes en medio del lodo, con su poco tiempo en casa y los entrenamientos exhaustivos del equipo solo tenían algunos momentos para hablar sobre el día con el esfuerzo sobrehumano de no caer dormidos antes pero, hubo otro cambio. El padre de Bokuto sufrió una caída por las escaleras y lo habían llevado al hospital, el bicolor por estar lejos le dijo que tardaría mucho en llegar pero que pensó sería bueno que por lo menos Akaashi lo supiera y de inmediato él se ofreció a ir, en respuesta a ello Bokuto le dijo que avisaría a su madre para que así no tuviera problemas a la hora de entrar.
A pesar de que al principio la noticia de que su hijo era bisexual y que al instante Akaashi fuera presentado a la familia como —ahora— su pareja había tomado desprevenidos a los padres de Bokuto, aún así lo trataron como siempre, como la primera vez que Bokuto lo llevo a su casa para que los conociera y los adultos no lucieran para nada sorprendidos de que su hijo tuviera otro amigo. Cuando la madre lo llevo con el otro adulto no tardaron en tener una pequeña conversación, ahora estaba estable y era posible tener una charla con él, por lo menos se alegraba que solo fueran golpes menores y a no sufrir el estrés que ya sentía por simplemente estar en un hospital. Bokuto llegó a eso de las tres de la madrugada su padre estaba dormido y él se había quedado afuera y apenas lo vio entrar por el pasillo con sudor perlar su frente y aquella expresión de pánico que odiaba ver en su sonriente rostro fue de inmediato a abrazarlo diciéndole que ahora todo estaba bien, los cambios también eran espontáneos.
