Cap. 6

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Había estado tan distraído todo aquel tiempo, repentinamente el profesor dejaba trabajos extras, exámenes sorpresas y nos ponía a hacer obras espontáneas sobre un caso "x", calificando la forma en que utilizamos los artículos, como defendemos a un trabajador y qué tan bien vamos memorizando los artículos y los apartados, era una locura, aún así no me iba mal, siempre había sido partícipe de ser de los que fingía no saber para no ser el primero de la clase pero tenía el potencial, odiaba la idea de ser un favorito para el profesor, lo mío era ser neutro, no destacar ni tampoco ser de los que se burlan, sólo era yo, el problema es que mientras las clases pasaban a mi mente llegaban momentos en específico donde estuve feliz, disfrutando mi tiempo y entre los miles, quizás millones, de recuerdos a mi mente llegaban las noches cuando regresaba con Kenta y nos recostabamos en el pasto a contar cosas que pasaban con los clientes, lo mucho que odiabamos regresar tarde a casa los fines de semana pero que agradeciamos que fueran los días con más paga, veíamos las estrellas y yo le hablaba sobre los astros y los horóscopos mientras él escuchaba y contaba cosas que parecían ser graciosas pero a la vez tan extrañas, cosas que no había escuchado en otra persona pero que saliendo de él parecía ser lo más normal de la vida, recordaba como cuando tenía frío Kenta me abrazaba después de que me acercaba y como cuando había una linda luna sobre nosotros nos quedabamos callados, en un silencio tranquilo, nada de incomodidad, simplemente disfrutando; no lo odiaba, no odiaba recordarlo pero no era correcto, pensar en una persona tanto tiempo no estaba bien, eso no era de una persona cuerda, quizás estaba comenzando a obsesionarme, negué instintivamente en medio de una clase, nadie me puso atención, después de todo eran bastante más interesantes los derecho que tiene una mujer embarazada, digo es un tema delicado que en algunas empresas aún implementan, despedir mujeres embarazadas o disminuir a las mujeres propensas a embarazarse, era polémico y yo pensando en la estúpida sonrisa que Kenta tenía mientras le contaba cosas que mi madre hacía, bufé para mis adentros, había estado evitandolo, soy serio en mi vida y Kenta estaba distrayendome, demasiado, quién demonios es?, un dios?, estaba molesto pero aún no estoy seguro si lo estoy con él, conmigo, con la vida, con el aire por no ser tóxico, era estúpido todo lo que está sucediendo en mi cabeza y la forma en que me pongo nervioso con verlo, supongo era simplemente que su amistad estaba asutandome, nuestra cercanía y lo cómodo que me siento a su lado, mi pecho se sentía pesado, ya no hablabamos como antes y de alguna forma quería volver atrás y decidir no ir a aquella fiesta, no haberle hablado y quizás así no tendría estos extraños sentimientos, no podía, eso era seguro así que simplemente tenía la opción de alejarlo, que se aburriera y se fuera pero él parece no molestarse por mi extraña indiferencia, quizás no le importa, no demuestra sentirse triste o golpeado por mi distancia, nuestra distancia, tal vez sólo era yo quien no lonotaba pero incluso así podía notar como sus ojos obscurecian, el problema es que en general entiendo que los ojos son la ventana al alma y te lo dicen todo tan sinceramente pero esa persona es tan distinta de su mirar a su actuar que no logro entenderlo, me refiero a que podría estar triste y sonreír abiertamente tan enorme que sus ojos trsites no se notan.

Poco tiempo a pasado y me siento cada día más pesado, empecé a tener problemas para dormir y no he dejado de pensar en Kenta, no puedo culparlo, él está dejando las cosas, él sólo deja que pasen, es raro porque también siento que se aferra y no quiere soltarme, como colgar en una horca mal amarrada que cuando te dejas caer se desamarra al punto que puedes sostenerte con la punta de los pies pero no lo suficiente para que puedas soltarte y seguir viviendo libre.

Puedo notar cada que lo llevo al trabajo sus abrazos parecen más fuertes y cercanos, puedo notar  su cuerpo contra mi espalda, como si el tiempo que no nos hemos visto lo trate de recompensar para si mismo con eso, él en realidad no es muy expresivo todavía, quiero pensar que tal vez con el tiempo él lo hubiera sido pero estoy siendo tan egoísta de tratar de obligarlo a tirar la toalla pero jamás me había resultado tan difícil y problemático el despegarme de una persona, es un sentimiento abrumador.

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