Capítulo II

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Capítulo II:

La noche impenetrable, callada, mística, se alzaba sobre el "Fantasy World", la Luna estaba en su mejor posición, las Estrellas brillaban como perlas de una Corona, relucientes, bellas, el aire era agradable, una típica noche de Primavera, una que los habitantes de aquel Mundo no iban a poder olvidar. En tiempos remotos, el "Rey Demonio" había sido un verdadero calvario, ya que éste y sus Ejércitos comandados por los mejores Generales que tenía a su disposición, habían causado el caos, la muerte y la destrucción por donde pasaban, sin embargo, un grupo de valientes héroes habían podido detener su locura, derrotando a aquel vil personaje y a sus tropas, acabando para siempre con aquel peligro y sus deseos de dominar aquellas tierras, sin embargo, en esos momentos, la paz por la que tanto tiempo se había estado trabajando, estaba por ser quebrada.

El sonido de un "Relámpago" que rasgaba el aire se hizo sentir, una serie de chispas azul oscuras y unos misteriosos símbolos aparecieron en medio de las zonas rurales cercanas al "Pueblo de Axel", de ahí, esas runas se fueron extendiendo hasta tocar el suelo y conformar una "Puerta", de la cual emergió un Guerrero de piel verde, no portaba una gran Armadura, salvo unas placas de acero sobre sus hombres y un peto en su pecho, además de llevar una afilada hacha y un casco. Éste puso los pies sobre la tierra, olfateó el aire, puro, limpio y sus ojos fueron testigos de aquel Mundo tan misterioso, tan verde, tan lleno de vida, las riquezas que podrían tener en su poder y mucho más, por lo que llevó a que ese personaje se volteara y diera una orden con su mano derecha, anunciando que el camino estaba despejado. Acto seguido, más de esos seres emergieron del Portal.

Primero salió la Infantería con su líder, Killrog Deadeyes del "Clan Bleeding Hollow" y de ahí aparecieron las máquinas de guerra y asedio, así como unos poderosos jinetes montados en lobos. El Jefe de aquel grupo tanteó el terreno, su garrote-guadaña estaba reluciente, limpio y "ansiaba" tener sangre sobre sus puntas, así que se dirigió hacia sus fuerzas y de ahí ordenó marchar sobre las zonas rurales, mientras que en la lejanía, podía verse la Ciudad Capital de aquel Reino.

- Jefe.- Le dijo un Soldado que portaba uno sables.- Hemos localizado una ciudad, se encuentra allí.- Apuntó el Guerrero y de ahí podía verse como manaba una extraña magia, la cual fue presentida por los Chamanes que acompañaban a los Orcos.

- Excelente trabajo, Brux.- Le felicitó Killrog y de ahí alzaba su arma, ordenando el avance hacia esa ciudad.

Pronto, los Orcos del "Clan Bleeding Hollow" fueron asolando las tierras que rodeaban a aquella urbe, cuyo nombre era Alcaretia.

Mientras tanto, en la Ciudad Capital, la noche era tranquila hasta que otro misterioso Portal se abrió frente a las puertas de aquel lugar. Un par de Caballeros armados con lanzas y montados a caballo fueron a inspeccionar qué era lo que estaba pasando, viendo que, al principio, aquello podría tratarse de algún viajero que se había perdido y era inexperto en la Magia. Estaban equivocados cuando vieron como una misteriosa energía violeta oscuro se lanzaba contra ellos, provocando que los corceles entraran en pánico, llevando a que sus jinetes los trataran de dominar y de ahí, los Soldados de la Infantería desenfundaban a las armas.

- ¡Rápido, alerten a todas las fuerzas y pongan a salvo a los civiles!.- Pidió el Comandante de las tropas a sus efectivos.- ¡Desenvainen, chicos!.- Ordenó y fueron sacando sus espadas.

Poco pudieron hacer cuando una nueva bola de energía oscura estalló, al igual que una bomba, contra ellos, provocando que cayeran al piso y lo que el Comandante vio con sus propios, le costó describirlo con sus propias palabras, ya que fue testigo de como una inmensa criatura de color marrón claro como la tierra, con una enorme "X" en rojo sobre su abdomen, vestida con un taparrabos enorme de violeta oscuro, poderosas manos y pies con dedos negros, pero lo más llamativo eras sus dos cabezas. La de la izquierda tenía un fino y largo bigote negro, mientras que la de la derecha una hirsuta barba marrón. Los ojos de aquel monstruo se clavaron en el Comandante, quien se puso de pie e intentó tomar su espada, pero recibió el impacto de la mano derecha de aquella bestia, arrojándolo contra sus Camaradas.

World of Konosuba: WarLords of DraenorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora