Mornings Thoughts

Gritando en silencio

Pensé muchas veces en esta situación, sin embargo, nunca pensé que llegaría a mí.

¿Qué hacer cuando todo se está derrumbando a tu alrededor? ¿cómo puede una casa permanecer de pie cuando una de sus columnas está al borde del colapso?

Es difícil vivir con miedo, vivir pensando en las cosas que creías durarían toda la vida; es complicado seguir avanzando sin palabras de aliento, preguntándote una y otra vez qué salió mal como para dejar de luchar por lo que amas.

Nunca expreso mi tristeza frente a los demás, así mi corazón se esté rompiendo en mil pedazos, nunca dejo que las lágrimas fluyan, pero esta vez no las pude detener. Mi mente revive los momentos de rechazo, el orgullo amenazador de la felicidad, las palabras hirientes que se quedaron grabadas como si hubiesen sido cinceladas; los sollozos ahogados por las madrugadas, las lágrimas mezcladas en la ducha, el sentimiento de estarte hundiendo en la ansiedad y saber que nada puede llenar el vacío.

Estoy gritando, pero nadie me escucha. Estoy gritando en silencio pidiendo auxilio y nadie se da cuenta.

¿Cómo es que no pueden oír mi voz en el incómodo silencio de una conversación?

Mi alma está cansada por la impotencia, mi corazón quebrantado por la situación. Ya no quiero sentir, quiero ser indiferente a aquello que me lastima sin misericordia, quiero dejar ir el dolor que se clava más profundo en mi ser, que no me permite abrir mis alas y crecer.