Elisabeth y yo andamos por toda la multitud que se ha amontonado en esta casa.

Justo entonces es cuando Elisabeth parece saludar a alguien y dice:
-vamos, quiero presentarte a alguien.

Yo la sigo hasta la otra parte del salón y nos encontramos con un chico alto y moreno.
Parece ser un modelo, es muy alto y sus brazos se marcan en una camiseta de manga corta que lleva.

-Este es Joshua. Vive justo al lado mío, solíamos quedar mucho, pero con el tema de los exámenes el ha estado muy dispersado del grupo.

Joshua me saluda haciendo un guiño y me dice:
-Es un placer, Alice.
-Igualmente Joshua- respondo yo, y creo que ya me he puesto colorada.

El hace un par de preguntas sobre de donde vengo y que voy a estudiar y es entonces cuando Elisabeth se emociona y dando saltos de alegría dice:
-¡Iremos juntos a la universidad!

Yo intento sonreír pero la información sobrepasa mis límites. Este lugar es demasiado extraño y siento un agobio tremendo.
Es cuando Joshua parece leerme la mente y se acerca a mi oído para susurrarme:
-¿No te apetece dar un paseo conmigo?
La idea parece ser una locura pero yo asiento y sonrío.

Recorremos toda la casa en busca de una salida, pero esto parece un laberinto.
Es justo entonces cuando nos apoyamos en una pared riéndonos por lo tonto que parece el problema y veo que el se acerca a lo que parece ser darme un beso.

Siento sus labios en los míos y en mi interior siento una sensación extraña.

Separo mis labios de los suyos, y el muerde mi labio inferior antes de que consiga separarme para volver a atraer mi boca a la suya.
Vuelvo a intentar separar sus labios de los míos, y esta vez jala con más fuerza mis labios.
Creo que siento sangre en mi boca, noto un sabor metalizado en mi saliva.

Y es entonces cuando lo noto, un empujón que parece ser que consigue separar mi cuerpo del de aquel chico por el cual estaba sintiendo ¿asco?

Miro al frente y veo a Jack darle un puñetazo.
Él me mira y me grita:
-Ves al coche, está aparcado en la puerta.

Yo solo consigo articular la palabra:
-¿Que?
-que vayas al puto coche- Escucho gritar a Jack, y entonces corro buscando la salida, pero esta vez la encuentro.

Salgo corriendo de la casa, y busco el coche de mi hermano, que es con el que ha venido Jack.

Saco mi copia de llaves y abro la puerta.

Casi llorando me meto en el coche y pongo el seguro.
Siento miedo de lo que pueda estar pasando ahí dentro.
Y es cuando veo salir a Jack, su mano parece estar amoratada, y su cara no tiene un aspecto distinto al de su mano.
Abro el seguro y dejo que el entre, pero esta vez conduzco yo hasta la casa.

Voy todo lo rápido que puedo, y al aparcar el coche rompo en llanto.
Veo como Jack baja del coche y cierra con un portazo. Camina deprisa hasta que llega a la puerta de la casa y provoca casi el mismo sonido que al cerrar la puerta del coche.

Lo que acaba de pasar ha sido horrible, me siento horrible y cansada.

Bajo del coche y llego hasta la casa.
Subo las escaleras hasta llegar a mi habitación y cierro la puerta. No puedo dejar de llorar. Mi llanto es tan fuerte que temo que alguien fuera de la casa pueda escucharlo.


Siento que alguien ha entrado en la habitación,
Abro mis ojos y miro la hora en el reloj de la pantalla de mi teléfono, son las 02:30am.
Toco a mi alrededor hasta que siento que hay algo justo a mi lado y escucho decir:

-Tranquila pequeña soy Jack, ahora vamos a dormir.
Vuelvo a cerrar mis ojos y caigo en un profundo sueño.

Donde las estrellas nos puedan verDonde viven las historias. Descúbrelo ahora