Capítulo 24

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Terminé de doblar dos playeras y las guardé en la maleta para luego cerrarla.
Dejé la maleta en el suelo y caminé hasta la habitación de Victoria.

-Princesa ¿Ya elegiste tu ropa?- pregunté al entrar.

-Si y también la guardé- dijo sonriendo mientras se sentaba sobre la maleta para intentar cerrarla lo cual iba a ser imposible debido a toda la ropa y juguetes que estaban dentro.

Reí ante eso y me acerqué para ayudarla. Vacíe la maleta y comencé a guardar la ropa  dentro de esta de manera más ordenada mientras ella guardaba los juguetes en su mochila y unos minutos después ya ambos estábamos listos para irnos.

Bajamos a la sala junto a las maletas y me senté en el sofá a esperar a que Cristian llegará mientras Victoria daba vueltas por todo el lugar muy emocionada con su mochila colgada y su muñeca favorita entre sus brazos.

Luego de unos minutos oí como un auto estacionaba y al mirar por la ventana vi a Cristian bajando de su camioneta.

-Mira quien llego princesa- dije sonriendo y Victoria al verlo sonrío y se quito la mochila y abría la puerta para salir corriendo.

-Papi- dijo al salir hacía los brazos del pelirrojo.

-Hola pequeña- dijo tomándola en sus brazos y dejándole un beso en la mejilla -¿Lista para irnos de vacaciones?

-¡Si!- dijo ella emocionada levantando sus brazos.

-Entonces vamos a guardar las maletas en el auto.

-Papi trae las maletas- dijo ella mirándome a lo yo sonreí, tomé las 3 maletas más su mochila y caminé, como pude,  hasta la camioneta sin olvidarme de cerrar la puerta de mi casa.

-Me vendría bien algo de ayuda-dije mirando a Cristian quien río y luego de dejar a Victoria en el suelo se acercó a mi.

-Hola cariño- dijo para luego darme un corto beso en los labios.

-¿No vas a abrir el baúl y quitarme estas maletas de encima?- dije serio.

-¡Oye! Yo te demuestro todo mi amor y tu solo te preocupas por guardar las maletas- dijo cruzándose de brazos a lo que yo reí.

-Si me ayudas a guardar las maletas también podré demostrarte todo mi amor- dije arqueando una ceja.

En ese momento Cristian sonrió y se acercó al la camioneta para abrir el baúl y guardar las maletas.

-Listo, ahora- abrió sus brazos- Dame amor- dijo haciendo puchero con sus labios.

Sonreí y me acerque para pasar mis manos sobre sus hombros y besarlo mientras que una de mis manos acariciaba su nuca y él acariciaba mi cintura.

-¿Feliz?- pregunté con una sonrisa mirándolo a los ojos.-

-Muy feliz- rió leve y volvió a besarle.

-¡Oigan!- dijo Victoria quien estaba parada al lado de la puerta de la camioneta- ¿Qué están esperando? Ya me quiero ir- dijo cruzando sus brazos.

-Bueno, tranquila- dijo Cristian riendo- sube que ya nos vamos- dijo y le beso la mejilla para ayudarla a subir y ponerle el cinturón. Yo dejé su mochila con juguetes a su lado y subí al asiento del copiloto y luego de ponerme el cinturón miré hacia le asiento trasero.

-¿Estas emocionada por estas vacaciones cariño?- dije mirándola y ella asintió muy feliz.

Cristian comenzó a conducir mientras yo me encargaba en elegir a música y, bueno,  digamos que primera parte del viaje la pasamos escuchando y cantando canciones de Disney hasta que ella comenzó a jugar con sus muñecas y eventualmente se quedó dormida.
El resto fue tranquilo, charlas entre Cristian y yo con música tranquila de fondo hasta que por la noche llegamos al lugar.
Cristian estacionó la camioneta y yo bajé para cargar a Victoria en mis brazos mientra el se encargaba de las maletas.

Estábamos en un complejo vacacional donde habría entre unas 15 y 20 cabañas pequeñas y en centro habia una piscina basarte grande. A pesar de noche, estaba bastante iluminado y parecía un lugar muy tranquilo.

Cristian abrió la puerta de nuestra cabaña, entró junto las maletas y yo entré tras él. La cabaña era pequeña pero suficiente para nosotros tres. Era de un color marrón claro pero, a pesar de la falta de decoraciones, se veía muy acogedora.

 Era de un color marrón claro pero, a pesar de la falta de decoraciones, se veía muy acogedora

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-¿Te gusta?- dijo acercandose a mi luego de haber cerrado la puerta.

-Es muy bonita- lo mire sonriendo para luego soltar un bostezo- ¿Dónde dormiremos?

-Hay una habitación para que duerma Victoria y nosotros dormiremos en el altillo- dijo señalando hacia arriba.

-Me gusta- dije sonriendo.

-Ven, vamos a dejar a esta pequeña en la cama- dijo Cristian acariciando el cabello de Victoria para luego comenzar a caminar por un pequeño pasillo y abrir la puerta de una pequeña habitación. 
Me acerque a la cama que había allí para acostar a mi princesa y arroparla. Bese su frente y prendí la lámpara que estaba en la mesa de noche para luego irme y cerrar la puerta.

-Ahora nos toca ir a dormir a nosotros- dije para ir a mi maleta y sacar una ropa más cómoda con la cuál dormir- Oye, me gusta este lugar pero seguro debió haberte costado bastante dinero...no tenías que hacerlo- dije mientras me cambiaba- Además no me dijiste nada, yo podría haberte ayudado a pagar.

-Alec- dijo acercandose a mi ya con su pijama puesto- Hago esto porque te quiero y para darte un regalo tanto a ti como a Victoria y lo que menos importa es cuanto dinero gasté- dijo acariciando mi mejilla.

-Lo sé y te agradezco pero yo...- no pude terminar de hablar porque me besó.

-Promete algo- dijo sonriendo.

-¿Qué?- dije yo con una leve sonrisa.

-Tienes que prometer que vas a disfrutar estas vacaciones sin preocuparte por cuanto gasté ni nada de eso.

-Pero...- suspiré. No tenía sentido discutir con él- Está bien- dije al final sonriendo.

-Así me gusta, ahora vamos a nuestro altillo a dormir que estoy muy cansado despues de tanto conducir- dijo para luego acercarse a una escalera que estaba apoyada en la pared y subir.

Arriba no había más que un colchón y a cada lado de este unas pequeñas lamparás que no sería necesario encenderlas ya que por la gran ventana que había en el techo entraba suficiente luz de luna como para iluminar todo.

Cris y yo nos acostamos, él me rodeó mi cintura con sus brazos a lo que yo respondí acurrucándome en su pecho para de a poco irme quedando dormido.

Estaba dispuesto a cumplir mi promesa y disfrutar estas vacaciones familiares sin preocuparme por nada. 

Milagro No Deseado (MPreg) (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora