¡que se atreva el valiente!

cap 15

— por enésima vez —volvió a decir cansado el ojeroso frente a luffy, ni siquiera sabía con exactitud las veces que le tenía que decir su nombre, respiro profundo y repitió lo mismo que estaba decíendo hace como media hora— es Trafalgar —sabía de antemano que el pequeño azabache en frente que sonreía juguetón no lo diría bien, por lo tanto recibiría como respuesta el mismo apodo estúpido de "torao" que ya lo tenía harto y con unas inmensas ganas de darle un puñetazo, pero desistia de aquella acción cuando miraba la brillante y enorme sonrísa del menor, sin dejarse ver afectado por el Ángel tenía en frente, volvió a repetir cruzado de brazos— Trafalgar —si, ¿por que seguía intentando siquiera?

— torao queda mejor —afirmó, con las manos apoyadas en su cadera, y moviendo ligeramente la cabeza hacia delante, seguro de sus palabras

— mejor llamame law —suspiro, plenamente agotado

— ¡no!, me gusto torao, por lo tanto torao va quedar —law no iba a gastar sus pocas energias restantes en otra pelea absurda, y dejó que el azabache haga lo que quisiera

Unas fuertes risas, y lo que parecía ser unos lamentos acompañados acercándose a ellos, fue el motivo por el cual prestaron atención a lo que sucedía, eran nami, Robin, y vivi, quienes por alguna razón parecían secuestrar a shanks llevándolo a un habitación, antes de entrar, vio caer unas cartas al suelo, por lo que supuso que el muy idiota perdió una apuesta con nami. Se escucharon unos fuertes gritos dentro de aquella habitación, pero el que más llamó la atención fue uno en el que parecía quedarse sin aire, ¿debian sentir lastima?, no, el se atrevió a apostar con la gata ladrona— tus amigas están locas —comento law, recordando como la peli celeste, si recordaba bien, vivi, le había dado directo a la yugular

— lo se, ¿en que momento pensaste que estaban cuerdas? —dichas palabras quedaron al aire cuando ya no escucharon gritos suplicando piedad

Expectantes a lo que podía suceder, por que siendo sinceros, podría pasar cualquier cosa si se trataba de unas mujeres como ellas, hasta podría salir shanks vestido con un tutú, cosa que definitivamente se esperaría se aquéllas locas. La puerta se abrió, y como si akagami fuera basura, sus amigas lo patearon fuera, revelando su expresión traumada, bueno apenas, ya que las chicas lo maquillaron peor que payaso de circo, eso si era de esperarse, lo que no se esperaban era la mini falda que llevaba, que a causa del cuerpo masculino se rompio en algunos lados, de paso con unos tacones que no soportaron su peso y terminaron rotos... No pegaba para nada, sobre todo para un hombre que bien cabía en la palabra Guapo

Como pudo el peli rojo se levantó, doblandose de vez en cuando el pie de manera dolorosa. En el momento, alguien apareció en el pasillo— ¿donde estará el idi-...? —paro en seco al ver a su jefe vestido de tal manera, dejó caer su cigarro de la boca por tanto que la abría, al igual que sus ojos, proceso un poco lo que estaba viendo para posteriormente soltar lo primero que se le vino a la mente— ¡shanks!, ¡¿te estas prostituyendo!? —no pudo evitar gritar eso

— ¡¿que clase de pregunta es esa!? —cuestióno adolorido por los tacones

— ¡¿que clase de vestimenta es esa!? —devolvió la pregunta pisando el cigarro que callo para que no se incendiara nada

— ¡me obligaron esos tres demonios disfrazados de mujeres! —apuntó con su único brazo a las ya antes mencionadas locas, que levantaban los brazos en falsa inocencia

— ¿¡que mierda con ese maquillaje de taibolera barata!?, ¡ni siquiera cara! —

— ¡oye, respeta soy tu jefe! —

— ¡no puedo respetarte en ese vergonzoso atuendo! —

— ¡yo no quiero estar así! —

— ¡pues quitatelo! —