¡que se atreva el valiente!

cap 14

Luego de varios intentos de asesinatos por parte de ace, que fue frenado por marco y Sabo, katakuri se tuvo que ir por su madre, que no paraba de amenazar con que iba a matar a uno de sus hermanos, otra vez. Luffy simplemente hizo un puchero disconforme, pero dejó que se vaya algo molesto por que iba a enseñarle una de las cosas divertidas que hacia con sus amigos, como estuvieron hablando de sus vidas, se dio cuenta de que katakuri solo hacia misiones, mataba, comía y dormía, cosa demasiado monótona, sobre todo para alguien tan hiperactivo e impredecible como lo es luffy. Los rubios soltaron un suspiro, ya no iba a comenzar una guerra entre mafias que podrían controlar un país entero— ¡hubiera parecido suicidio! —exclamó ace, tratando de convencer a su hermano

— ¡que no!, y aunque parezca suicidio, ¿no crees que sospecharian al estar en el territorio de barba blanca? —Sabo y marco se miraron entre sí, se Apiadaban el uno con el otro al aguantar al pirómano, que por fin comprendia, luego de diez explicaciones más, Dios se apiade de ellos por más ateos que fueran

Luffy bostezo, le estaba agarrando sueño al estar la mayor parte del día con katakuri. Sin darse cuenta, ya se hizo de noche, se dirigió a la mansion, con algo de pesadez, junto con una cara más relajada de lo normal, entró a la habitación de ace, como todavía no arreglaban la suya por todo el trabajo que tenían se tuvo que quedar ahí por un tiempo más, de todas maneras no es como si le molestara a su hermano ace, que con gusto volvería a incendiar la habitación del su hermanito con tal de poder abrazarlo mientras duerme

Buscó entre las cosas de ace su pijama celeste claro, se la pudo poner a medias, el sueño siempre lo cambiaba, estiró sus brazos soltando un fuerte bostezo. Haciendo una pose de ‘T’ con su cuerpo, se lanzó al comodo colchón de su hermano, sintiendo las suaves telas de las frazadas, buscó con los ojos cerrados a su peluche marry, cuando lo sintió entre sus manos, lo agarro atrayendo la cabra hacia el, abrazandola para poder dormir tranquilo. Ace, que por puro instinto de hermanomayorincestuoso supo que luffy fue a dormir, por lo que, de inmediato, corrió directo a su habitación

Se quedó mirando como su hermanito abrazaba tiernamente a marry por unos minutos, luego se metió a su cama, rodeó la cintura de luffy con su brazo, y así, con un repentino ataque de narcolepsia, durmio. Una o dos horas más pasaron, en las que luffy despertó por los fuertes ronquidos de ace en su oreja, adormilado, fruncio un poco el ceño, saliendo de la cama, y dirigiéndose a otro lugar donde no se escuche al pecoso ahogandose estúpidamente con su propia saliva mientras duerme

Luffy no se digno a tocar la puerta e irrumpió descaradamente la habitación de marco, que estaba despierto debido a las grandes cantidades de papeleo que tenía pendientes, guió su atención al azabache, se giro con su silla y espero a que se sentará en sus piernas, cosa que ya había ocurrido varias veces por que luffy odia la soledad y constantemente busca contactó fisico. El menor entendió, se acercó al Rubio, y puso sus brazos en los hombros del mayor, dejando caer a sus piernas por los costados de la silla, mientras ponía su cara en el hueco del hombro y cuello— ¿ace no te esta dejando dormir? —pregunto con el bolígrafo en la mano sin dejar de trabajar

— ronca mucho... —contestó el menor restregando su cara como si fuera un gato

Marco sonrió cariñosamente, y paso su mano por la espalda del menor para que durmiera más cómodo, pensando con algo de gracia que no había mucha diferencia entre el luffy de seis años y el de ahora de diecinueve. Se colocó bien sus lentes y siguió con la exuberante cantidad de papeleo, que la mayoría, o al menos la mitad, era de su oyaji que no se quiso dignar a terminar su trabajo, suspiro con algo de pesadez sin saber si reír o llorar, no iba a poder dormir en unas cuantas largas horas mas

...

Ace abrió lentamente sus ojos, complacido al sentir el suave cuerpo de su hermano entre sus brazos, apretó con algo más de fuerza, sintiendo una leve opresión en su barbilla, ¿cuernos?, ¿desde cuando su luffy tenía cuernos?, ¿se transformó en Satán?, no, ese ya era su puesto, era improbable que el azabache menor fuera alguna clase de demonio, por que en primer lugar creía firmemente que el cielo recordaria que se les fue un Ángel y tomaría a su luffy para darle las alas que le faltaban. Prestó más atención a lo que estaba abrazando, cuando se dio cuenta que a lo que le daba tanto cariño era la cabra del menor, su expresión se volvió la de el grito