Capítulo 3

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Pasaron un par de días, hasta que Yoongi y Jimin hicieron presencia en su departamento un fin de semana, Yoongi parecía molesto y Jimin un perro regañado.

— ¿Que quieren? —. Jin no se dignó en ocultar su molestia —. Si vienen por el bebé, aún no está listo, será hasta dentro de 8 meses, regresen después. 

—Espera Jin—. Habló Yoongi antes de que cerrara la puerta en sus caras. 

—Sé que estas molesto y tienes derecho a estarlo, no fue la manera de hacer las cosas y Jimin también lo lamenta—. Jin volvió a abrir la puerta conforme Yoongi hablaba. 

—Yo no escucho que lo diga—. Contesto Jin. recargándose en la puerta. 

—Yo... Lo lamento fue un momento de impulso, se supone que íbamos a hablar del tema, pero se me fue de las manos—. Jimin parecía arrepentido y avergonzado. 

—Bien, además ya los firme y no hay nada que hacer—. Cedió Jin por la paz—. ¿Eso es todo? porque mi cama me está llamando para una siesta.

—También queríamos pedirte que fueras a la casa en unas semanas, vamos a anunciar el futuro bebé y necesitamos que el bebé este ahí—. Habló Jimin tomándose la libertad de tocar su plano vientre, acomodando un poco a Jin.

— ¿No creen que es muy pronto? —. Pregunto un poco nervioso.

—Por eso esperaremos a que tengas dos meses y tal vez un poco más—. Yoongi al notar la incomodidad de Jin quito disimuladamente la mano de Jimin y la tomo entre las suyas. 

—Supongo que ahí estaré, sólo díganme el día y la hora exacta, ahí estaré—. Aseguro, para que después se hiciera un incómodo silencio.

—Jin, de ahora en adelante tendrás que hacer algunos cambios a tu vida diaria—. Anunció Jimin—. Por el bien de mi bebé—.

—Sera mejor que pasen—. Dijo Jin, soltando un suspiro de cansancio—. Es mejor tener esta conversación adentro—. 

—La primera, tu alimentación, no puedes comer comidas picantes o muy condimentadas, tampoco puedes tomar café o té de canela, son abortivos—. Enumeró Jimin, pero Jin dejó de escuchar después de Canela—. También tendrás que trotar una hora, esto después de que pase el primer trimestre—.

— ¿Trotar?, ¿Para qué? —. Jin odiaba hacer ejercicio. 

—Necesitas tener condición física—. Jimin continuó—. También sincronizare nuestros calendarios, para saber que te estas tomando tus vitaminas—.

—Lo que tú digas Hitler—. Comento Jin, haciendo reír a Yoongi. 

—No es divertido, quiero que mi bebé este muy sano—. 

—Como sea—. Jin solo volteo los ojos—. ¿Yoongi tú tienes alguna demanda que agregar a la lista? —. 

—Sólo no te estreses demasiado—.

—Eso me recuerda—. Jimin lo interrumpió—. Tienes que mantenerte feliz, tienes que darle puras emociones buenas a mi bebé—. 

Jin sólo quería darse de cabezazos contra la pared, Jimin continúo hablando tonterías sobre actividades físicas que debería hacer en el futuro, también le dijo que el seria quien le haría la despensa todas las semanas, de ahora en adelante, hasta que naciera el bebé, comería todo orgánico. Después de eso se fueron y Jin pudo dormir.

Cuando cumplió los dos meses y fue a la cita, fue lo mismo que la primera, el doctor sólo hablando con Jimin y dándole ánimos a Jin, pero hubo un comentario que desagrado por completo a Jin. 

—Jin te voy a pedir algo—. Dijo Jimin con la vista en la calle, pues estaba manejando. 

— ¿Qué? —. Jin se sentía fastidiado, las hormonas lo tenían mal y el paño ya empezaba a salir, el obstetra había dicho que sería inevitable. 

—Por favor no generes ningún lazo con mi bebé—. dijo de la nada con total naturalidad. 

— ¿Qué? —. Ahora su tono demostraba lo ofendió y molesto que estaba, nunca se juega con las hormonas de un embarazado.

—Es que los bebés saben quién es su mamá, por su voz y cosas así—. Dijo Jimin un poco apenado. 

—Es demasiado pronto para eso Jimin, no seas ridículo—. Trato de dar por cerrado el tema. 

—Pero cuando llegue el momento, no lo hagas—. Volvió a pedir. 

—Ósea que quieres que no le hable ni nada—. Espeto, Jin no podía creerlo, pero Jimin asintió—. Si así lo quieres—. 

Cuando Jin tuvo dos meses y medio se llevó acabo la reunión donde se revelaría la espera del futuro integrante de la familia, Jin se sintió muy raro al ser tocado por tanta gente extraña y solo tener que sonreírles. Ya casi era de noche y Jin quería irse, no había nada interesante aquí, sólo charlas familiares en las que no encajaba, además sus amigos no pudieron venir, Hoseok estaba de viaje por trabajo y Jungkook no quería sacar a su bebé de casa, era muy pronto. 

—Nunca pensé ver tanto aburrimiento en alguien—.  Dijo una voz a su lado, Jin volteo a ver a un tipo muy guapo y de lindos hoyuelos, sintiendo enseguida un clic instantáneo. 

—Bueno si esta fiesta fuera más interesante no tendría esta cara—. Bromeó un poco, haciendo una seña para que el guapo hombre se sentara a su lado. 

—En mi opinión, es más una reunión familiar—. Dijo el desconocido con media sonrisa—. Soy Kim Namjoon. 

—Kim Seokjin un gusto—. Dijo ofreciendo su mano para estrecharla con una sonrisa coqueta.

Un pedazo de mi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora