Marzo

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Te enteraste de alguna forma, que era mi cumpleaños.

Llevábamos dos meses siendo algo más que amigos, eso implica que tu sabias donde vivía y trabajaba...

Tocaste a la puerta de mi departamento, y a decir verdad, no esperaba que fueras tu.

Me llevaste a desayunar, te veías muy feliz y estabas muy cariñoso...

Me llevaste al trabajo, y me recogiste horas después.

Me llevaste a cenar, y de ahí fuimos a mi departamento... seguías igual de cariñoso.

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No estabas a mi lado como prometiste, pensé que te habías ido cuando me quede dormida, o simplemente te levantaste temprano para escabullirte más fácil...

Pero te juzgue mal muy rápido, estabas en la cocina, preparando el desayuno...

Era como un sueño, eras tan perfecto. Eras.

Pero, como sea, estamos concentrados en los tiempos de cuando yo era feliz, porque la verdad no creo que tu lo llegaste a ser.

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