Bueno me tarde un poco pero aquí esta, no me gusto tanto
pero no quería tardarme tanto. A y por cierto, este capítulo ya tiene hard.
Axel se metió a su habitación junto con Fred, el cual iba caminando y abrazándolo al mismo tiempo. Elizabeth se metió al baño de su habitación que era compartido con el de Leo, Omar y yo nos metimos a mi habitación. El se sentó en mi cama mientras yo abrí la mi mochila para sacar mi chamarra, mi hermosa chamarra color vino que me regalo Félix, en cuanto la saque me ruborice.
- ¿te gusta mucho esa chamarra? – me pregunto Omar
-Ee... este...es linda...- dije muy nervioso
-no te pregunte si era linda, pero bueno, me sorprende que sea de ese color- me dijo
-es que Elizabeth me dijo que no encontró otra que prestarme y al final Félix me la regale- dije muy sonrojado
-que raro- dijo -sabes, nunca a faltado una chamarra ahí, de ningún color- dijo pensativo -ja, estoy seguro de que Liz te la dio apropósito y que luego Félix te la regalo porque le gusto como se te veía- dijo riéndose, me puse rojo como tomate, a Félix le gusto como me quedaba. Lo que mas me sorprendió es que Omar me lo digiera, el es una persona muy inteligente y es muy bueno deduciendo cosas, pero me sorprendió que me lo digiera, él es realmente tímido.
En fin, colgué mi chamarra y se me vino algo a la mente -espera, ¿Omar también eres un fénix? – pregunté
-si, lo soy- dijo algo nervioso -bueno no exactamente, soy sobrino de una de los primeros miembros- repuso -pero lo que me hace mas importante es que soy novio de Víctor- dejo jugando con sus manos
- ¡¿Qué!? – exclamé - ¡¿Que acaso todos aquí son novios¡?- dije muy sorprendido
-de hecho, si, pero no le digas a Félix que Leo y Liz son novios- dijo -y tampoco le digas a Liz que te dije, por favor- dijo muy nervioso
-esta bien- dije en un susurro
- ¿de qué están hablando? - pregunto Liz entrando a la habitación sin tocar, con una ceja arriba
-le estaba explicando las reglas de los fénix de fuego- respondió rápido Omar
-qué raro, yo ya se las había explicado-
-es que no las había entendido bien-
-haber, no me quieran ver la cara de estúpida- dijo Liz ya molesta -Omar te conozco, se que cuando estas nervioso te tiembla la mano- dijo mientras veía la mano temblorosa de Omar y cruzando los brazos
-está bien, está bien- dijo Omar rindiéndose -estábamos hablando sobre que tu y Leo son novios- le dijo omar
-NO LO PUEDO CREER- grito -NO ENTIENDO QUE DIABLOS TENGO QUE HACER PARA QUE DEJEN DE CONTERSELO A TODOS-
-tranqui...- dije cuando Liz me interrumpió
-SI FELIX SE ENTERA ME MATA-
-LIZ, ESCUCHAME, NO LE DIRE A NADIE- dije levantando la voz para que se calmara. Hubo un momento de silencio hasta que escuchamos un gemido proveniente del cuarto de Axel, todos nos quedamos callados al escucharlo y nos fuimos a dormir
Narrador: Axel
Fred me llevo a mi habitación abrazándome, en cuento entre me fui directo a la cama recostándome bocabajo. Fred cerro la puerta, se puso encima de mi para masajearme, estaba tan relajado que casi me quedo dormido. De repente Fred comenzó a tocarme el trasero, me bajo los pantalones del pijama y comenzó a prepararme.
-ahh F-Fred- dije gimiendo -es-espera un ahh- gemí
-lo siento, no entiendo lo que dices- dijo sonriendo -espera ¿Qué estas...... - dijo Fred al verme voltearme e hincarme enfrente de él, comencé a tocar su miembro ya erecto y lo saqué de su pantalón para así comenzar a chupárselo
-¿crees que eres el único que se puede divertir? -dije chupándoselo
-ahh, ya no puedo más- dijo tirándome a la cama, comencé a hacer expresiones sexis para desperarlo -con que así vamos- dijo muy excitado -está bien pero mañana no me eches la culpa si no puedes caminar- me dijo
-no esper...ahh- dije gimiendo – Fred n-nos va a es-escu-escuchar- dije nervioso -ahh-
-no me importa- dijo dándome más duro – me estas apretando- dijo con una expresión exageradamente sexy -esto se siente demasiado bien- dijo levantando mis piernas y poniéndolas en sus hombros para entrar más profundo -esto se siente tan jodidamente bien-
-ahh, ahí F-Fred- gemí -a-ahí me gu-gusta- gemí, él se éxito más y comenzó a darme donde le dije -ahhhhh- gemí de nuevo -m-me ven-goo-
-yo también- dijo con dificultad
Nos vinimos al mismo tiempo y el se desplomo encima de mi exhausto, el me abrazo y me quede dormido en sus brazos. Al tenerlo a mi lado casi nada me preocupaba, lo único que me preocupaba era que llegara el 15 de septiembre, solo faltaban dos semanas, el miedo me consumía por dentro.
Espero que les allá gustado y gracias por leer
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Mi razón de vivir
RandomSimon, un adolescente de 17 años se muda a otro país por el trabajo de su madre. Cuando llega a el internado en el que iba a estudiar una de sus sorpresas fueron que el director es su padre, el cual los abandono cuando cumplio un mes de vida. En el...