ꗃ ᥫ᭡ Fresita ➜ KookMin

• ⌜🍓 08 ⋆ฺ ♡ིུ ⌟

2 Meses después

Jimin sostenía en sus pequeñas manitos, la prueba de embarazo, mientras lagrimas caían por sus mejillas sonrojadas.
Habían dos rayitas ahí, que lo confirmaban todo.
Jungkook había salido a comprar algunas cosas para la cena de hoy, donde ahí le daría la sorpresa, el solo pensar que dentro de su vientre crecía su pequeño bebé, lo ponía demasíado feliz, tendría que detener sus estudios cuando cumpliera los 6 meses, para disfrutar bien de él los últimos tres.
Salió del baño, tomó la cajita de regalo para guardar la prueba y la escondió en el cajón para que Kook no la viera. Escuchó la puerta principal abrirse y rápido se acomodo bien la vestimenta, limpiándose las lágrimas para que Jeon no sospechara nada.

Tomando aire, salió de la habitación y sonrió al ver a Kook ahí.

En estos últimos dos meses, habían pasado muchas cosas, desde el día en que habían pasado todo el día en la casa del mar, donde comieron, bebieron e hicieron el amor dos veces hasta quedar exhaustos, también habían confirmado su relación recibiendo felicitaciones de sus amigos, hasta el pequeño accidente que Kook había tenido.
Sí, Jungkook tuvo un accidente en moto, aunque no fue tan grave, pero si le dió un gran susto a Jimin, cuando llegó todo ensangrentado al departamento, hizo llorar a Jimin, le pidió disculpas por ser un tonto, pero no había sido su culpa, pues un tipo borracho se le atravesó y para no arroyarlo lo esquivó perdiendo el equilibrio hasta caerse.
Jimin curó sus heridas y lo llevó al doctor para que le hicieran un chequeo, y ver que todo estuviera bien por dentro.

Devolvió su vista a Kook quien sacaba todo los ingredientes y los acomodaba .
Oh, está claro de que Jungkook aprendió a cocinar durante éste tiempo, pues el gran chef Mimi le enseñó hasta lo más mínimo.
Se acercó a él, y poniéndose de puntillas beso la mejilla de su chico, el cual se volteó hacia él para tomarlo de la cintura y besarlo con ternura.

- Que bien sabes amor.-

-Yo siempre tengo buen sabor.-

- Cariño, te traje un mini pastelito de fresas. Lo puse dentro del refrigerador.-

-Gracias amor, pero lo comeré más tarde.-

-Como gustes cariño.-

- Sí...-

Sintió un malestar en su estómago, y sintió como todo le empezaba a dar vueltas.
Jungkook se volvió hacia él y vió a Jimin pálido, rápidamente se acercó y lo tomó en sus brazos.

-¿Amor, te sientes bien?-

Dicho eso vió como Jimin salía corriendo hacia el baño, donde también lo siguió, lo miró arrodillarse y vomitar. Últimamente Jimin había estado actuando extraño, desde los antojos en plena madrugada, hasta los vómitos. No podría ser lo que estaba pensando.

O tal vez sí...

Lo ayudó a ponerse de pie, mientras que se lavaba la boca, pensó en si preguntarle o no. Pero su mente parecía estar a favor.

-Jimin, ¿Hay algo de lo que no esté enterado?-

Jimin negó, no quería arruinar la sorpresa, pero al ver el rostro de Jungkook, sintió un nudo en su garganta.

-No, mientes, yo sé que hay algo, pero no me quieres decir, ¿Acaso ya no me tienes confianza?-

-Kook, no digas eso, sabes muy bien que confío en ti, solo comí algo que me hizo mal.-

Jungkook lo miró fríamente y sin decir nada salió. Siempre le decía lo mismo, ya estaba cansado de ello.

-¡Jungkook espera!, ¡no te enojes, p-por favor!-

Pero no pudo detenerlo, pues el nombrado cerró de un portazo sin escuchar los lamentos del menor. La farmacia quedaba cerca, compraría la prueba y volvería a casa, y le pediría a Jimin que se la hiciera frente a él.
Fue entrada por salida, cuando tuvo en sus manos lo que necesitaba, soltando un suspiro volvió a pasos lentos al departamento, abrió lentamente la puerta y escuchó los sollozos del menor, lo que más odiaba era verlo llorar, ahora se sentía realmente tonto por haberle tratado de esa forma.
Se dirigió al cuarto donde estaba Jimin, y lo vió sentado en la cama, con una cajita entre sus manos. Se acercó a él y se puso en cuclillas para levantar su mentón y mirarlo.

-Perdón, amor no quería hacerte llorar, soy un idiota. Solo quiero que me confirmes algo...-

Jimin le extendió la cajita, y él la tomó frunciendo el ceño, iba a preguntar pero la voz del más bajo lo interrumpió.

-Te lo iba a dar hoy en la cena, pero al ver que te habías enojado conmigo solo porque dices que no confío en ti, me rendí, básicamente me arruinaste la sorpresa. Ahora ábrelo.-

-Perdón...- el dedo índice de Jimin calló sus labios.

-Anda, ábrelo, ya no importa.-

Jeon asintió, y fue levantando la tapa de la cajita, tomó lo que había adentro y abrió sus ojos como platos, ¡Joder!, no lo podía creer. Miró a Jimin, quien lo veía con una sonrisa y lágrimas en sus ojos.

-A-amor e-esto es...- Jimin asintió

- Kookie, ¡vamos a ser papás! -

¡Era la noticia más hermosa, de toda su vida!

Tomó a Jimin entre sus brazos y lo alzó, tomando su rostro dejando besos en él, seguido de uno en los suaves labios del nombrado.

-Mi amor, ésta es la noticia más hermosa que me han dado, ¡Gracias cariño, por permitirme formar una familia a tu lado!-

-Y gracias a ti Kookie, por quedarte conmigo.-

Jungkook se puso en cuclillas y alzó la camisa de Jimin, para besar su vientre, levemente abultado.

-Hola, soy tu papi Kook, y quiero decirte hijo, que estoy muy feliz con tu llegada, no sabes lo felices que estamos papá Mimi y yo.-

Poniéndose de pie, besó de nuevo a Jimin, haciéndolo más profundo.
Más feliz no podía estar, ésta noticia había sido la mejor de todas.

-Te amo Jimin.-

-Te amo más Kook.-

- Ansío la noche, para hacerte mío.-

-Y yo quiero ser tuyo, por ahora podemos hacerlo, pero cumpliendo los tres meses, ya no.-

(Muchas dicen que sí se puede seguir manteniendo relaciones, pero es mi fic y todo aquí es ficción así que aquí, le puedo poner lo que yo guste y si no te gusta lo que escribo puedes retirarte) .

-Seré cuidadoso.-

-Siempre lo eres amor.-

- En algunos momentos te haré el amor, de la forma más romántica que haya.-

-Deseo que sea ya la hora, amor.-

-Yo también, ahora déjame mimarte y amarte más.-

-Con gusto.-

Jeon levantó a Jimin, y lo llevó hacia la sala, dejándolo reposar en el sofá.
Besó sus dos mejillas, haciendo sonrojar al nombrado, quien también besó su frente.

Y Jimin se dejó alimentar por Kook, al principio se había negado, pero al ver los ojos de cachorrito del mayor, simplemente se dejó llevar.
Si así se estaba comportando con él, ya se imaginaba cuando tuviese al bebé.

El bebé, ese pequeño que estaba creciendo dentro de él.
Jungkook insistió en que mañana fueran al doctor para checar que todo fuera en orden, y nada malo pudiese pasarle a él y su hijo.

Disfrutarían de cada mes, de gestación. Y esperaba con ansias la llegada de ese angelito.