IX. Engaño juguetón

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—No pueden venir aquí cada vez que les apetezca y menos para interrumpirme cuando estoy trabajando.

— ¡¿Trabajando?! ¡Yo no veo que hagas nada! Mi hijo está aún fuera, secuestrado por un loco y usted no está haciendo nada.

Taehyung queda con esa expresión de que, en cualquier momento, va a golpear a la persona frente a él o bien, pasarlo de largo por el desinterés –u odio-, tan inmenso que tiene por su existencia. No necesita a sus suegros molestándolo. Ya tiene suficientes problemas tratando de localizar a su pareja y a su secuestrador como para agregar las discusiones inútiles que el padre de Jimin tiene maña por iniciar.

Le fascinan. Son un placer para él. Está seguro de ello. Se hace el cabello atrás cuando finalmente acaba de hablar. No prestó la más mínima atención, pero vale, tampoco saldrá nada especialmente útil de hacerlo.

—Este criminal, como bien le dije, tiene más de veinte años operando—habla con la mayor paciencia posible—. Gente incluso más capaz que yo no ha podido hacer nada y si usted viene cada minuto a reclamarme cosas que están a duras penas, en mi alcance, no voy a poder hacer nada por Jimin.

— ¡haz más! ¡Tienes que hacer más! ¡Es...!

— ¡Seguridad por favor no los vuelva a dejar pasar! —pide dando la vuelta y yendo de regreso a su oficina, no puede perder el tiempo en esto.

— ¡NO TE ATREVAS A DARME LA ESPALDA NIÑO! —reclama el padre, siendo llevado de la forma más amable posible por los guardias del lugar—. ¡POR TU CULPA ESTÁ PASANDO ESTO! ¡POR TU CULPA...!

—Que sí, que sí—quejumbra y cierra la puerta de su oficina. Queda frente a la enorme pared llena de papeles, hilos, fotos, etc. Tamborilea los dedos en su brazo—. Aun lo tiene vivo, seguramente para curar su herida a falta de posibilidad de ir a un hospital—Empieza a morderse un dedo—. Dentro de poco se cumple el plazo de la segunda amenaza...

Mira a una esquina, donde están las fotos que han sido envidiadas diariamente de Jimin. En todas está atado. Lo sorprende que ya tuviera una pierna herida desde el segundo envío. A saber por qué. Toma la que más repulsión le genera, Jimin no es alguien que resista golpes. En general, es una persona sensible y aunque no lo detuvo de aprender defensa personal y más, siendo un saco de boxeo al principio, pudo hacerlo.

No obstante, recibir una paliza así es otro tema. Aquí fue hecho con saña. Los ojos morados, la nariz y el labio roto. Espera que no tenga ningún daño permanente por eso. Exhala y se rasca la cabeza, dejando la foto a un lado.

—No puede estar tan lejos, aun si tiene auto ¿Cómo llevas un cuerpo a cuestas sin que nadie te vea? —medita en voz alta—. Por lo que sería esta zona... Tal vez alguien que lo ayudara, pero ¿Quién lo ayudaría a hacer algo como esto? Incluso puede ser alguien amenazado.

~ * * * ~

—No te muevas tanto, no voy a poder curarte si lo haces.

— ¿Y tú de dónde saliste?

Si bien no logra ver por su ojo izquierdo –la desgracia persigue ese ojo-. Por el derecho si y está sobradamente seguro de que había dos personas hasta hace nada. Jungkook trajo a este muchacho a curarle la cara. El contrario se muerde el labio, gira los ojos y continúa con lo suyo.

— ¿Quién...?

—Soy Hoseok. No te muevas, no hables y déjame curarte o...

— ¿Va a venir a hacerte algo? Te va a matar de todos modos—informa y Hoseok se queda quieto—. No importa si te da esta opción y si promete no hacerlo, va a matarte, como también es probable que me mate a mí—Casi se ahoga, aun no puede respirar bien a pesar de que le enderezaron la nariz—. Dame un celular, dime donde estamos y te ayudo a salvarte a ti-

No-Face || VMinKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora