OBEY ME! ~ONE-SHOT~

👾Game Over👾

Leviathan.

Cuando conoció a ese humano simple... Realmente no le importó.

No le parecía la gran cosa.

No le importaba en lo más mínimo.

No le interesaba.

Era un simple humano, un mortal cualquiera.

Si lo consideraba tan poca cosa...¿Por qué le hablo de TSL tan siquiera?.

¿Por qué le dejo entrar a su habitación?.

¿Por qué dejó que la emoción saliera y le hablara de todo lo que ama?.

Quizás era para sentirse menos solo, a sus hermanos parece poco importarles sus parloteos Otakus.

Pensó por un momento que sería lo mismo con ella. Grande fue su sorpresa al verla tan entusiasmada, tan emocionada y atenta a cada cosa que le contará.

Le interesaba. La mayoría piensa que escucharlo hablar es una perdida de tiempo, pero eso a MC no le parecía importar, pues lo escuchaba atentamente, con toda la atención posible.

Eso lo conmovió, aunque nunca lo admitiera.

Pero aún siendo orgulloso, grosero y hablador.

MC le pidió ser su amigo.

El no necesitaba amigos.

Mucho menos los quería.

¿Por qué aceptó entonces?.

Sabía que era una mala idea, encariñarse solo le traería problemas.

Pero se sentía tan bien el tener a alguien con quién hablar.

Tener a alguien con quién ver animes.

Con quien jugar.

Se sentía bien tener una amiga.

Y se hubiera seguido sintiendo bien.

Si no se hubiera adentrado más.

Si no hubiera dejado que MC se volviera cada vez más valiosa e importante para el.

No sabe porque ya no se siente igual cuando está con ella.

Los nervios y la ansiedad lo matan.

No importa si están jugando o viendo cualquier cosa.

Eso se vuelve lo menos importante.

Su atención siempre se centra en ella.

En sus gestos, su risa, la manera en la que mueve las manos cuando hablá de algo que le emociona.

No sabe porque siente que el corazón se sale de su pecho.

Está jugando en terrenos peligrosos.

No es tonto.

Sabe a dónde se puede estar metiendo.