Ella, Mi Primer Amor (Maybe I Am In Love )(Completa)

Capítulo 6

Hay algo dentro de mi cabeza, que se repite una y otra vez, al principio pensé que con el tiempo esto dejaría de suceder, pero nada parece cambiar, y comienzo a creer que siempre tendré esa escena marcada en mi cabeza.

El problema es que siento la necesidad de redimirme y no logro hacerlo, porque no importa lo que haga, la culpa sigue apareciendo y no es de ayuda la situación actual en la que me encuentro, todo comenzó hace un par de días.

Yo estaba saliendo de mi clase de Matemáticas, cuando escuché el sonido seco de un casillero siendo golpeado, al principio pensé que solo fue un accidente, pero cuando el sonido se repitió, supe de inmediato que se trataba de una de las víctimas de Lexa y por supuesto no estaba equivocada. Mientras me acercaba vi que Blue estaba junto al casillero donde mi amiga estaba siendo intimidada, no parecía ni inmutarse, y verla tan insensible alejo por completo la imagen que tenía de ella consolándome.

Cuando Blue vio que me acercaba le dijo a Lexa que parara y ella le hizo caso, no sin antes enojarse y reclamarle por meterse cada vez que yo estaba presente, fue una mezcla de celos e impotencia. Su pelea fue corta, pero intensa y termino con Lexa empujando con su hombro a Blue mientras pasaba por su lado, yo ignore lo más que pude esa escena y me enfoque en ver como estaba mi amiga y ahí fue cuando las cosas se fueron al carajo.

—¿Siempre tienes que intervenir en los problemas de otros? —me pregunto Blue aparentemente molesta—: ¿Tan difícil es ver hacia otro lado?, ¿no te das cuenta que Lexa puede golpearte en cualquier momento y yo no podré defenderte?

—Nunca te pedí que me defendieras.

—¿Y que se supone que haga? —me respondió, acercándose más a mi—: ¿Acaso debo quedarme viendo como Lexa te parte la cara?

—¿No es eso lo que siempre haces?

—Es diferente.

—¿Es diferente?, no te das cuenta que es la misma mierda. —le respondí frustrada—: ¿Como es que puedes estar cerca de alguien como ella?

—Lexa actúa así porque tiene problemas —me dijo escusándose, pero no era suficiente ni para convencerse a ella misma.

—Vamos, puedes inventar una excusa mejor —le respondí acercándome, para poder sacar a mi amiga de la escena en caso de que Lexa decidiera regresar—: No puedes ser tan estúpida como para seguir justificándola, todos tenemos problemas y no por eso agredimos a los demás. —Sus ojos detonaban lo acorralada que se sentía—: Estar con ella es lo más toxico que puedes hacer y lo sabes.

—¿Y tú excesiva sed por ayudar a otros no es también algo tóxico? —me pregunto recuperando el control.

—Solo trato de ayudar y...

—Cass, tu esfuerzo por ser una buena persona es demasiado antinatural como para ser creíble, es muy obvio que no es más que tu culpa y arrepentimiento haciendo de las suyas, y es que no es difícil darse cuenta que estas huyendo, o dime, ¿por qué todas tus redes están recién creadas?, ¿por qué no hay nadie de tu pasado agregado?, ¿no será acaso que no siempre fuiste la defensora de los necesitados que ahora tratas de aparentar?

—Púdrete —le dije dándome la vuelta para alejarme de ella y de las verdades que su boca emanaba, pero me tomo del brazo para que no huyera.

—Es eso, ¿no? —me dijo acercándose para poner su boca cerca de mi oído y disfrutar su inminente victoria—: Pues déjame decirte, que nada cambiara tu pasado así que deja de comportarte como una idiota y acepta la realidad en la que vives.

—¿Aceptar mi realidad?, porque no aceptas la tuya—le respondí empujándola para que me soltara—: La única razón por la que me proteges es porque te gusto, pero para que quede en claro a mí no me gustan las personas como tú, y eso va mucho más allá del hecho de que no me gustan las chicas—le respondí lista para dar el ultimátum—: Blue, es halagador tener a una lesbiana de closet encaprichada conmigo, pero se vuelve frustrante cuando tomas en cuenta que no eres más que una persona toxica y codependiente.

—¡Cierra la boca! —me grito histérica—: Y si repites eso una vez más, tu menor problema será Lexa.

Se alejo de mí no sin antes asegurarse de empujarme lo suficientemente fuerte como para dejarme en claro que hablaba enserio, al más puro estilo de su novia, y aunque sentía que Blue se merecía todo lo que le dije, sentía que, de alguna forma, las dos habíamos perdido.