Pov. (T/N) de 8 años:
Lentamente abrí los ojos (cómo desee no volver a abrirlos nunca más), mire a mi alrededor con una mirada perdida, tenía un dolor de cabeza tan agudo como si mil agujas hubieran sido clavadas en mi cerebro. Por instinto me sujete la cabeza, como si eso fuera a aliviar el dolor por alguna razón. Y pude observar un liquido peculiar de color rojo embarrado en mis manos. Y cuando miré hacia abajo me di cuenta que me encontraba sobre mi padre, mi cara perdió todo color, creí que iba a volver a caer en la inconsciencia.
Estaba pálido y no había color en sus ojos, después de todo, el hombre que tanto admiraba, aquel que juro protegerme toda mi vida, se encontraba sin vida. Y yo, por acto cruel de estas personas que me la arrebataron todo, fui llevada a un sitio de lo más repugnante, sobre su frío cadáver. Mis manos estaban manchadas de sangre. Sangre que jamás en mi vida podría limpiar.
Fin del Pov.
Nos habían traído a mí y a mi madre a un viejo laboratorio, para hacer experimentos con nuestra sangre, pero al parecer se llevaron una gran decepción cuando se dieron cuenta que a menos que el usuario no quisiese, no podrían obtener nada. Así que amenazaron a mi madre, diciéndole que me matarían si no cooperaba. Entonces mi madre tuvo que dar de su parte, a cambio de mi bienestar. Pero cuando quisieron crear algo que potencie su veneno, se dieron cuenta que el cuerpo de mi madre rechazaba todos los experimentos, ya que sus defensas eran muy fuertes. Así que no tuvieron mejor idea que experimentar conmigo. A mi madre la encerraron, según ellos, con sus demás experimentos. Y durante 3 años mi vida fue un infierno, una vez a la semana, sacaban grandes cantidades de sangre de mi cuerpo. Y todas las noches los guardias se burlaban de mí y hasta a veces me golpeaban, por mera diversión. En mi celda había una pequeña rejilla y por ella la luz de la luna iluminaba mi celda por las noches. El observarla todas las noches traía paz a mi alma en ruego, lloraba y le rogaba a la bella luna que mañana fuera mi último día. Una vez un guardia estaba tomando mientras era su turno de vigilarme, él dejó una botella de vidrio al lado de mi celda y luego se quedo dormido. Lo primero que vino a mi mente fue matarlo y escapar, pero luego me di cuenta que si lo hacía ellos probablemente matarían a mamá. Entonces otra idea vino a mi cabeza, una que acabaría con todo el dolor; entonces rompí la botella y cuando estuve dispuesta a acabar con mi vida; escuche una suave voz que me susurró que no lo hiciera. Me dijo que era mi amiga y que ella me ayudaría a escapar, pero que ahora no era el momento. Decidí escucharla pues no quería dejar a mi madre sola. Y después de eso paso un año más, desde aquel día todas las mañanas encontraba un dulce, desde chocolates a caramelos. Ese año comenzaron a dejar de sacarme sangre e inyectarme líquidos. Decían que la siguiente fase era la de activación. Así que comenzaron a darme entrenamientos especiales, para convertirme en un arma. Obviamente no iban a entrenarme, sin ninguna medida de precaución por si me revelaba. Así que me dijeron que al más mínimo intento de intentar escapar o indicie de rebeldía, asesinarían a mi madre. Mas aún con todos los entrenamientos, no lograba desatar todo el potencial de los experimentos. Hasta que un día uno de los científicos sugirió algo, que cambio todo el juego. Necesita un impacto psicológico.
Así que tomaron a mi desdichada madre y jugaron con su mente, y le arrebataron la poca cordura que le quedaba.
Un día vinieron diciendo que me dejarían ver a mi madre, que ingenua fui al creer que ellos estaban teniendo compasión de mi miserable alma.
Mi madre intento asesinarme, me dijo que por mi culpa papá había muerto, que solo traía a desgracia a la familia y que todo aquello que tocara estaría destinado a la desgracia. Me convencí sobre que esa no era mi madre, ella nunca diría eso. Mas, aun así, sus palabras entraron a mi corazón e infectaron mi alma, como si de verdadero veneno se tratase. Y ese día mi alma fragmentada, en mil pedazos se rompió y no sé si algo de ella quedo. Desde aquel día en mi mente se planto la idea de que era un monstruo y pronto esa idea se volvió mi realidad. Desde ese día todo lo que tocaba se marchitaba y moría. Paso un año después de eso, no volví a escuchar a la voz amable, hasta que una noche me dijo que mañana iba por fin salir de este lugar. Al día siguiente vinieron los héroes y arrestaron a todos los implicados. Y nosotros...los experimentos fuimos llevados finalmente a casa. O al menos los demás, a mi madre la tuvieron que llevar a un hospital de salud mental, pues bien fue liberada intento acabar con mi vida, siendo sincera ni siquiera me defendí ella era lo único que me quedaba, sin ella yo me encontraba completamente sola, pero fue cuando a mi mente vino un pequeño recuerdo.
Flashback//
Midoriya: Bien (T/N) Ya no tendrás que estar sola. ¿Sabes por qué?
(T/N): Por qué??
Midoriya: ¡Porque yo estoy aquí!
Fin del Flashback//
Midoriya... me pregunto que habrá sido de su vida, dijo que quería ser un héroe. Y yo... quiero vivir para verlo. Así que evité su ataque lo más rápido que pude. Los héroes se la llevaron y yo me mude a casa de mi abuela materna. Quien estaba destrozada por la situación en la que se encontraba su hija, de cierta manera me dolía verla pues sentía que era mi culpa que ella estuviera en esta situación. Así que decidí no acercarme mucho a ella y así no sufriera más por mi culpa. Al día siguiente salió en las noticias que había ocurrido un gran incendio en el laboratorio. De cierta manera saber eso le trajo paz a mi atormentado ser. Pues aquellas pruebas habían desaparecido para siempre en medio del incendio, para que así nunca mas alguien pudiera adueñarse de tan peligrosa información. Sobre la amigable voz, nunca supe de quien se trataba o que fue de aquella persona. Pero cada noche que contemplo la bella y clara luna, no puedo dejar de recordar aquella dulce voz que me ayudo, y siempre pido un deseo desde el fondo de mi corazón. Ojalá que aquella persona también pueda ver esta preciosa luna, a salvo en donde quiera que este y quien quiera que sea.
Mi quebrantada alma ruega por la tuya y pide que este a salvo.
Fin del cap.
Bueno, ¿qué les pareció? ¿La música es un pequeño detalle, para darle más emoción? No sé xd. Créditos a quien quiera que sea el autor de la música :D. No olvides dejar tus opiniones y sugerencias en la caja de comentarios, y votar por la historia. Bye :3
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Palabras tóxicas Izuku y tu
FanfictionLas palabras pueden doler más que los golpes, más aún cuando son directas del corazón, pero no son pensadas por el cerebro. Las palabras pueden envenenar a una persona y matarla lentamente por dentro, como si en verdad se tratase de veneno. Pero las...