Mᴇ Lɪᴋᴇ Yᴏᴜ ❀ [CʜᴀɴBᴀᴇᴋ ♡]

5. Presentation 🍒



ChanYeol iba mirando su celular. Hace mucho que no entraba a Instagram y mucho menos había visto las publicaciones que habían. No había tenido el tiempo suficiente.

Bueno, al menos se enteró de que Eminem iba a sacar un nuevo álbum y una de las colaboraciones era con Juice WRLD. Eso prometía ser una gran canción; así que luego escucharía el adelanto.

Kai venía con una pequeña toalla al hombro. El moreno era de los que más solía sudar en las prácticas, y aunque él también sudaba, no lo hacía como su mejor amigo.

Llegaron a una mesa y todos se sentaron. Los menores dejaron su cabeza caer sobre la mesa, agotados de la práctica.

—El entrenador me va a matar; pero quiero comer pizza otra vez. –. Kai habló.

—El entrenamiento me está matando, me ha hecho mal no ir a las últimas prácticas. –. SeHun se quejó.

—No estuvo tan mal; pero sí estoy cansado. –. Fue ChanYeol el que intervino ahora.

—Te dijimos que fueras a las prácticas, Hunnie. –. El de piel tostada le recordó.

—Lo sé; pero no podía. Esa sesión era importante y tenía que ir.

SeHun tenía un ingreso de dinero gracias a una pequeña agencia. Su carrera de modelo estaba recién empezando despegar, por lo que modelaba para pequeños negocios y sacaba algo de dinero de aquello. Muchas veces llegaba a ganar más de lo que ganaría un chico de su edad con un trabajo normal.

Aunque claro, había algo gracioso en todo eso.

SeHun al principio no había querido ser modelo ni nada de eso, sólo quería jugar básquetbol con sus amigos y luego ir a la universidad; pero sus planes cambiaron cuando alguien se acercó a hablarle. Una pequeña agencia estaba buscando a un chico joven que modelara algunos trajes y para el captador de modelos, SeHun era el modelo perfecto.

El castaño había sido perseguido por media hora. Había rechazado la oferta; pero el tipo seguía insistiendo y por eso le seguía por las calles de Seúl. Tuvo que aceptar para que finalmente le dejaran en paz y luego del primer pago, decidió que no era mala idea modelar.

—Sesión importante, vas por el dinero maldito bastardo. –. Kai miró mal al menor.

SeHun hizo un pequeño puchero. Sus amigos hicieron una mueca de asco.

—Que seas el menor no significa que tengas que hacer esas mierdas. –. Kris llegó a la mesa y le golpeó levemente la cabeza a SeHun.

—Idiota.

—Más respeto, maknae. –. El rubio habló serio.

—Ya, ya, lo siento hyung.

ChanYeol rio y sus amigos empezaron a hablar. Se levantó y fue a hacer la fila para comprar algo de comida, moría de hambre. Entró a Instagram otra vez y siguió revisando los adelantos del nuevo álbum de Eminem.

No había notado que BaekHyun estaba al frente; pero el peliazul si lo había notado a él. Había ojeado por pura curiosidad el teléfono del alto y se encontró con que miraba los adelantos del álbum de Eminem.

No iba a mentir, a él también le gustaba Eminem.

Sonrió mirando al chico pelinegro que también parecía estar un poco emocionado. Su turno en la fila llegó y entonces se decidió a comprar un pedazo pastel de chocolate.

—Son tres con cincuenta. –. Avisó la señora que atendía.

—Uh... YangMi, solo tengo tres. ¿Podría darte el resto mañana? –. Preguntó.

—Lo siento BaekHyun, sabes la política de la preparatoria.

ChanYeol levantó la vista al oír el nombre y efectivamente, frente a él se hallaba BaekHyun. El lindo chico peliazul estaba allí.

—Entonces creo que lo devo--

—Yo lo pago. –. ChanYeol interrumpió y BaekHyun se giró a verle, formando una expresión de asombro por lo dicho. —Yo pagaré todo, puedes llevarlo.

—No, no, no quiero ser molestia para tu billetera; pero gracias, en serio. –. BaekHyun hizo una pequeña reverencia y le entregó el pastel a la señora.

—Insisto, no es problema comprártelo. –. Avisó ChanYeol con una sonrisa y pago el pastel para luego dárselo al pequeño.

BaekHyun miro el pastel y luego sonrió para ChanYeol. —Muchas gracias, chico vendita.

—No es nada. –. El pelinegro terminó comprando una manzana y luego se alejó de la fila junto a BaekHyun. —Soy Park ChanYeol. –. Le extendió la mano y el pequeño se la estrechó.

—Byun BaekHyun. Fue un gusto, chico vendita. Ah, y de nuevo gracias por el pastel. –. El peliazul sonrió encantador y ChanYeol sintió su corazón derretirse.

¿Estaba muy flechado? Tal vez; pero no le importaba.

Ya le gustaba estar así por BaekHyun.

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