Capítulo 14

630 72 2
                                    

Llegó la noche y me fui a dormir. Como el señor tenía varias habitaciones podía estar separada de los chicos.

-Por fin un momento de tranquilid...-Justo cuando iba a acabar la frase, la puerta sonó.

Me levanté y fui rápidamente a abrirla.

-Hola, ¿puedo pasar...?-Era Tanjiro. Este se veía triste y llevaba en la mano algo envuelto.

-C-claro, pasa.-dije apartándome para que entrara a la habitación. Cerré la puerta detrás mía y me acomodé en el suelo frente a él. Poco se hablaba de que estábamos solos en la misma habitación, de noche.

-Toma, como estabas tan roja antes de ir al río creía que estabas enferma, así que te traje esto.-me entregó una planta medicinal. ¿E-en serio había venido solo para esto? ¿Cómo podía ser tan inocente y no darse cuenta de que me puse roja por otra cosa? Continuó hablando-¡Bueno, voy a descansar! Mañana prometí ayudar al abuelo.

-¡E-espera!-dije agarrándolo del brazo mientras se levantaba. Este se quedó mirándome con cara de duda. La situación con Tanjiro no avanzaba... y él realmente me gustaba. Debía hacer algo, pero no sabía el qué.-Y si...¿Voy con vosotros? Luego podríamos dar un paseo juntos.

-¡Claro! Estaría bien.-respondió con una sonrisa.-Bueno, ¡Mañana nos vemos!

Esto es tan difícil...

Al día siguiente comenzamos la marcha hacia el pueblo. Parecía que teníamos que entregar unos cultivos, ya que era a lo que se dedicaba el anciano. Mientras avanzábamos se escuchaban gritos y el ambiente se volvía más tenso.

-¿Qué ocurre?-Tanjiro de repente se volvió más serio que de costumbre. Se fue corriendo hacia las voces. Asustada fui detrás de él, ya que no sabía que hacer.

-E-esperad...-dijo el anciano, que intentaba alcanzarnos.


-¿¡QUE HACEMOS!? ¿¡QUE HACEMOS!?-No dejaba de gritar una señora, corriendo hacia todos lados desesperada. Toda la gente estaba agrupada en un sitio por lo que nos acercamos a mirar.
Allí pude ver un cadáver de un hombre joven, en mitad del camino. Solo fue un segundo, pero rápidamente quité mi mirada apoyando mi cara en el hombro de Tanjiro. Este cubrió mi cabeza con su mano, para que no me despegara. Su expresión cambió, pero tampoco estaba muy alarmado. Parecía acostumbrado a ver este tipo de cosas. Pidió que todos los que estaban allí volvieran a casa, ya que podría tratarse de un demonio. Alguna gente no le creyó, pero otra no podía hacer nada más.
Volvimos a casa y Tanjiro le contó la situación a Inosuke y Zenitsu. Yo por fin pude relajarme, ya que estuve unos minutos sin poder dejar de temblar. Esperamos a la noche para que fueran a la acción.

-N-No puedo hacerlo.-dijo Zenitsu con la voz rota, alejándose de los demás. Ante esto decidí acercarme.

-Oye... tranquilo, sois profesionales, además vas acompañado.-puse mi mano en su hombro. Este me miró con cara de espanto, no podía dejar de temblar.-Y-yo confío en ti.-De repente sus ojos brillaron y me abrazó con fuerza.

-Gracias _____-chan... eres lo que me da fuerzas para luchar.-No pude evitar sonrojarme. Zenitsu solía estar de broma, pero lo dijo tan serio que me llegó al corazón. Se separó de mi y me dedicó una última sonrisa, para luego irse con los demás.

-¡Mucha suerte!-dije despidiéndome de ellos. Tenía un poco de miedo, pero era a lo que se dedicaban, no podía impedirlo. Además, debía confiar en ellos.

||Respiración de fuego || [TankiroxTu] || Kimetsu no yaibaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora