MetaHumanos

Capítulo 1

 Capítulo 1:

                                                                                                                                  13  de septiembre de 2015

-         ¡Dylan! ¡¿Ya estás listo!?– Mi mamá me grita desde la parte de debajo de la casa.

-         Ya casi, dame 10 minutos!– le contesto, la verdad es que llevo listo desde hace más de 1 hora, ya había empacado  y guardado todas mis cosas más preciadas pero…. No me quería ir, no estaba realmente listo para partir, solo estaba sentando en mi cama viendo el poster de The Amazing Spider-Man 2 pegado a la pared de mi habitación.

Me habían llamado para formar parte del programa de jóvenes promesas de Harverton, la universidad más importante de todo el país, este programa se encargaba de buscar a jóvenes sumamente talentosos en las áreas intelectuales, en las atléticas o en ambas, para brindarles la “oportunidad” de ir a la universidad unos años más temprano de lo normal, dándoles una beca en sus instalaciones. A mis padres esta noticia los emociono bastante, a mí por otro lado no me gustó tanto pero como mi familia nunca fue de muchos recursos y temía que no pudiera ir a la universidad algún día, no tuve otro remedio más que aceptar.

Pero no me gusto para nada, no me quería ir de este pueblo; aquí estaban mis mejores amigos (a decir verdad, mis únicos amigos) e incluso hace poco había conseguido novia…. Dios, mi novia; en cuanto se enteró de que me iba, me cortó al instante.

-         ¡Dylan! Baja ya, ¡tu papá se está impacientando!– Me grita mi madre, creo que está ligeramente molesta, la verdad es que me ha tratado muy bien con esto ya que sabe lo duro que es para mí marcharme. A pesar de todo; quito la mirada del poster, recojo mis maletas, mi viejo IPod, me pongo una gorra para que el sol no me pegue tan de lleno en el rostro y bajo hacia la puerta, mis padres me esperan en el patio justo al lado de la camioneta de mi papá.

-         ¡Allí estas! ¡Mi pequeño gran universitario!- Me dice alegremente mi padre, creo que a él más que nadie le emociona esto, nunca pudo ir a la universidad y el que yo fuera a una edad temprana le alegro increíblemente.

-         ¿Qué onda?- Digo yo, sonriendo fingiendo alegría y me subo a la camioneta antes de que él diga otra cosa.

Ellos se suben, mientras arrancamos noto como mi padre me mira desde el retrovisor reprimiendo una gran sonrisa, lo cual no le salía muy bien; parecía una versión humana, rubia y algo vieja del gato rizón de Alicia en el país de las maravillas.

-         ¿Qué sucede?- le pregunto de manera casi indiferente.

-         Nada, nada… solo es que esto están emocionante! Wow, la universidad más importante del país le da una beca a mi hijo… wow!- Dice mientras noto como le brillan los ojos. Demonios, cada vez que trato de zafarme de esto, el me ve de esa misma manera y me dice algo así, tipo “Hijo, estoy tan orgulloso de ti!”. Era imposible decirle que no quería hacer esto.

-         Ehh… Sí, no es la gran cosa, recuerda que no me han dado la beca como tal, solo me llamaron para participar en su programa de jóvenes candidatos; tengo que pasar por periodos de pruebas y un montón de exámenes antes de que me confirmen que estaré en la universidad definitivamente, no sé si entre– Digo de manera modesta, casi indiferente.

-         Pff… que dices? Claro que entraras! Eres la persona más inteligente que conozco, nunca has sacado un examen con menos de 20- Me dice mientras dejamos atrás lo que fue mi hogar por más de 10 años.

 Sé que volveré pero esto de la universidad parece ser eterno, porque la verdad es que mi padre tiene razón, nunca he sacado menos de la nota máxima en un examen, lo cual no tenía sentido; nunca en mi vida estudie para ningún examen, simplemente las respuestas llegaban a mí por alguna razón, no podía evitarlo, incluso me pasaba con temas históricos y matemáticos de los que ni había escuchado antes, ni yo mismo lo entendía pero nunca se lo dije a nadie. Ya de por si era un marginado, no quería que me trataran como un bicho raro o algo así.

 Noto que mi papá me sigue mirando en silencio, no le digo nada; no sabía que decirle, hasta que él dice algo tratando de romper el hielo de la situación…

-         Vamos, anímate… En la universidad podrás hacer buenos amigos- Dice, tratando de animarme.

-         Si, supongo que si- La verdad es que ni yo me lo creo, nunca fui bueno haciendo amigos, tarde años en unirme al pequeño grupo en donde estaba y aun así; debo admitir que no me sentía realmente cómodo con ellos, a ninguno les gustaban realmente las mismas cosas que a mí pero supongo que eran mis únicos amigos así que siempre volvía con ellos.

-         Puedes dormirte un rato si quieres, serán varias horas de viaje- Dice mi madre, quien había permanecido callada desde que salimos.

Yo asiento, la verdad es que tenía algo de sueño, los autos tenían ese efecto en mí; siempre que me montaba en uno, me daba sueño. Así que desenrolle los audífonos de mi IPod, puse a reproducir mi lista de reproducción favorita que sabía que me iba a durar para casi todo el viaje y en cuanto empieza a sonar “I Bet My Life” de Imagine Dragons, cierro los ojos y me quedo dormido en el acto.