𝑆𝑖𝑙𝑒𝑛𝑐𝑒 | 𝐵𝑖𝑙𝑙𝑖𝑒 𝐸𝑖𝑙𝑖𝑠ℎ.

15• Epílogo.

Con el pasar de los días la energía de Lillie había vuelto por completo. Llevaba ese brillo único que la caracterizaba, pero notaba también su nerviosismo. No había hablado del tema hasta que convocó una reunión familiar importante, así lo llamó ella.

Danielle y Noah también deberían asistir a esta esperada cena, creíamos que se trataba de oficializar su relación, pero ya todos lo sabíamos así que habían pocas probabilidades de que se trate de eso.

Escucho el sonido de los platos indicando que la cena ya estaría lista, obra de Lillie.
Todos nos sentamos en nuestros respectivos lugares en silencio, expectantes a cada movimiento de mi hermana, pero nadie hablaba.

—Nerviosos, ¿eh?.— bromea Lillie, queriendo hacer más llevadera la situación.

—Sufrimos con tu silencio.— dramatiza Noah haciéndonos reír.

—Yo ya sé.— alardea Ariana meneando su cabello.

Mis ojos estaban clavados en mi hermana, no emetia palabra alguna y eso era bastante frustrante.

—Hablaré. Sólo porque me incómoda la mirada de Billie.— me da una sonrisa tranquilizadora, la cual respondo de la misma manera. Me remuevo en mi asiento buscando más comodidad.
La mano de Lillie busca la de Ariana por debajo de la mesa, esta la aprieta y acaricia tomando valor,—ya no quiero ser la hermana oculta. Creo que llegó el momento.— con su mirada busca nuestra aprobación.

Mamá es la primera en felicitarla seguido de Finneas y nuestro padre. Noah, Danielle y yo vamos a abrazarla.
Todos nos unimos en un abrazo para finalmente disfrutar la cena.

Luego de pensar unos buenos minutos cómo hacer para presentarla al mundo y no crear críticas por ocultarla, aún que fuera su decisión decidimos pedir ayuda a Kelsey.
Tenía una gran habilidad como periodista, muy destacable. Podría darnos una mano en esto y sacar una nota, también beneficiaria para ella.

Kelsey para mi suerte acepta. Su voz estaba teñida con algo que no podía descifrar. Luego de varios intentos confiesa:

—Ya no tienes la obligación de estar conmigo. Tu hermana es libre.— carraspea incómoda del otro lado del teléfono.

—Por lo tanto, también soy libre.— bromeo, llevándome por sorpresa su respuesta.

—Haré la nota— responde decidida,—. Después de esto nos alejaremos, nunca pasó nada.

Corta la llamada dejándome con miles de dudas, tampoco respondía mis mensajes. Le daría su tiempo de procesar las cosas, no me había dejado decirle que no quería alejarme de ella, por muy tonto que suene.
Juntas la pasábamos bien y realmente quería estar con ella, nunca lo había pensando de esa manera hasta este momento en el que temo perderla. Quizás a ella le pase lo mismo.

Habíamos invertido roles con Lillie, ahora era yo la que estaba triste con un kilo de helado para mi sola, desahogandome con mis amigas.

—Creo tener la solución para tu... tristeza.— Ariana busca las palabras para reconfortarme.

—No creo.— niego haciendo zapping, para colmo no había nada bueno en la televisión, ya recuerdo porque no suelo mirarla.

—Créeme que sí— me alienta confiada en su idea,—. Mañana tenemos un evento, ¿recuerdas?,— asiento sin hablar, sólo mirándola pero mis pensamientos no estaban con ella— Justin Bieber está fascinada contigo y quiere que cantes en su presentación.

Me atoro con el helado, Lillie a mi lado ríe a carcajadas. No sabía cómo reaccionar a tal noticia, sólo mis ojos se llenan de lágrimas.
Le agradezco tantas veces me sea posible, mis emociones se habían roto por completo, pero aún no podía estar totalmente feliz.

LILLIE.

—Paso uno, concretado.— susurro cerca de Ariana, esta me choca los cinco entusiasmada.

Habíamos estado planeando luego de estar horas y horas socorriendo a mi hermana. Si algo teníamos en claro, eran los sentimientos de ella hacía Kelsey.

○○○

BILLIE.

A primeras horas de la mañana la nota estaba publicada. Kelsey había hecho un trabajo admirable, tocando cada punto importante de la mejor manera.
Para nuestra sorpresa, habían demasiados  comentarios positivos, incentivando querer conocerla, y en un futuro colaboraciones. Ese era otro paso que dejaríamos para más adelante.

Todas nos encontrábamos en la mansión de Ariana, alistandonos para el evento. A penas pude pegar un ojo con todo el nerviosismo que cargaba.

—Estas preciosa.— me halaga Danielle.

—¿Crees?.— pregunto no muy confiada mirándome al espejo frente a mí.

—¿Cuándo no lo estás?.— rueda los ojos divertida.

—¡La limusina está abajo!.— exclama Ariana rociando colonia a todas.

Jugueteo con mis dedos mientras miro hacia la ventana, también era la primera vez que no íbamos iguales con Lillie. Podía haber una manada de paparazzis al salir de este lugar.
Inhalo y exhalo repetidas veces, Lillie hace lo mismo mientras su mano sube y baja por mi espalda.
Al cabo de media hora llegamos, mi show era el último, era un evento beneficiario en el que varios cantantes nos presentábamos.

Había un gran contador de dinero en la pantalla tras el escenario de los fondos recaudados. Aplaudimos luego de cada presentación exitosa.
Una presentadora hace presencia de Justin Bieber, yo entraría de sorpresa al público por detrás.
El show se me pasa volando, la gente totalmente exaltada, con mucha energía al igual que nosotros.
Iba a despedirme cuando de pronto Justin me toma por los hombros.

—Espera aquí.— me ordena y se va, volteandome en vista al público.

El contador para, dando por finalizado el evento. La gente aplaude eufórica, yo seguía estática en mi lugar.
Una canción resuena por el lugar cuando las cámaras se apagan, toda la atención iba hacia algo detrás mía, al voltear cruzo miradas con Kelsey entrando sonriente con un micrófono.

—Hola.— habla llevándose el micrófono a la boca, la gente al igual que yo estábamos confundidos.

—Hola...— alargo riendo nerviosa.

—Quería declararme ante todos. Presentarme, soy Kelsey— hace una reverencia—. Quiero dejar en claro todo lo que siento por ti, además de oficializar lo nuestro.

—¡Es ella!.— se repite entre el público, al fin habían descubierto a mi chica.

—¡Responde!.— Lillie grita a una esquina del escenario.

—¿Lo nuestro?.— mi saliva pasa con dificultad.

—Nosotras. Si lo aceptas claro.— hace un puchero.

Sólo respondo con un beso. Todo se llena de papeles y chispas saliendo a los lados del escenario. La gente asombrada de lo que acaba de presenciar, y mis amigas orgullosas.

—Ya no quiero nada por mi silencio. Sólo a ti.— susurra en mi oído mientras nos damos un abrazo.