Solo Amigos, Nada Mas (justin&tu)

Parte 15

Llegué a casa y no había nadie. Abrí el frigorífico y cogí una lata de cocacola, me senté y el móvil comenzó a vibrar. Lo desbloqueé y pude ver que era un mensaje de ___, lo abrí y lo leí.

-''¿Estás mejor?''

Sonreí y comencé a escribir.

-''Sí, gracias. ¿Qué estás haciendo?''

Al minuto me contestó, esta chica era rápida.

-''Nada, ¿y tú?''

-''Nada tampoco, estoy solo en casa .''

-''Siempre estás solo en casa, he pensado mal con el guiño jajajaja.''

-''Siempre no, eres una mal pensada, tampoco te hagas ilusiones cariño.''

-''Eso debería de decirlo yo, no tú  ''.

-''Jajajaja, ¿quieres ir a cenar luego conmigo? Como amigos.''

-''Está bien, ¿a qué hora?''

-''A las 8 te paso a buscar, se puntual.''

-''Vale, adiós .''

-''Adiós  ''.

Apagué el teléfono y terminé mi cocacola acompañado con una bolsa de patatas.

                                                                   Narra ____.

Cogí unos jeans ajustados y una blusa blanca, acompañada de una cazadora. Comencé a vestirme, una vez que terminé, me alisé el pelo y me eché un poco de maquillaje. Me miré en el espejo y salí del baño. Me puse unas sabrinas, cogí la cazadora, me despedí de mis padres y salí a la calle. Justin aún no estaba. Hacía bastante frío asique me puse la cazadora. Los minutos pasaban y Justin no aparecía, ¿y si era una broma? Comencé  a desesperarme cuando un coche paró enfrente mía, era Justin.

-Llegas tarde,- dije.

-Son las 8 en punto, ¿llevas más tiempo esperando?,- dijo él.

-Cállate.

Subí al coche y Justin siguió conduciendo.

-No sé porque vas tan arreglada.

-Si voy a cenar tendré que arreglarme, ¿no?

Justin comenzó a reír. ¿Qué demonios le pasaba ahora?

-Dime, ¿a qué restaurante piensas que irémos?

-No sé, ¿a uno italiano?,-dije.

Justin rió más cuando escuchó mi comentario.

-____, te has equivocado. Irémos a un McDonald's.

 ¿A un McDonald's? ¿Enserio Justin?

-¿Me estás haciendo una broma pesada?

-No, ¿por qué piensas eso?

-Creí que me llevarías a un restaurante lujoso.

Justin volvió a reír. A lo lejos pude ver el cartel del McDonald's, era cierto. Aparcó en el parking y ambos salimos del coche. Entramos y lo único que me llamó la atención fueron niños corriendo alrededor nuestra. No pude contener la risa, al igual que Justin. Busqué sitio para sentarnos mientras Justin pedía la cena. Encontré un  sitio libre y no dude en sentarme, miré para mis alrededores y pude reconocer a algunas caras, Danielle y unas chicas más. Resoplé e hice como si no estuvieran. A los 15 minutos, Justin apareció con una gran bandeja con nuestra cena, se sentó y me sonrió.

-Que aproveche,- dijo.

-Igualmente.

Cogimos nuestra comida y comenzamos a comer. La verdad, es que la comida estaba excelente.

-Justin, mira a tu derecha, pero sé disimulado.

Él giró la cabeza rápidamente hacia la derecha, parecía la niña de la exorcista, llevé mi mano hacia mi frente y negué.

-¿Danielle?,- dijo.

-¡Shhhhhh!

El quitó la mirada de la mesa donde estaban aquellas chicas y seguímos comiendo.

-¿Te gusta?,- dijo con la boca llena.

Asentí y reí.

-Está delicioso y Justin... Tienes la boca llena de ketchup.

Justin avergonzado, buscaba desesperado una servilleta. Cogí un pañuelo de mi pantalón, me acerqué a él y le limpié la boca con cuidado, sabiendo que tenía las heridas.

-Gracias,- dijo con una de sus mejores sonrisas.

-De nada,- dije.

Cuando terminamos de cenar, Justin me llevó a casa.

-Hasta mañana,- dije.

-Adiós.

Entré en mi casa con una de mis mejores sonrisas, lo había pasado genial.