La realidad

239 15 30
                                    


En aquel instante Johan pudo ver más de cerca a Judai, hacía mucho tiempo que no podía interactuar con él, todo lo que recordaba y vivió sólo reposaba en su memoria, había noches en que incluso Johan no podía recordar muy bien el rostro ni la voz de Judai, mas lo único que perseveraba en su mente eran los sentimientos que vivieron juntos, los duelos, las idas a dormir, todas esas cosas se mantenían aún en su corazón.

- Aster, ¿Hacía dónde te diriges con este duelista de tercera?, Sartorius te estuvo buscando como loco el día de ayer y nadie sabía en donde te encontrabas, ahora vamos, que esto que ocurre no es nada normal – Dijo Judai agarrando del codo a Aster en dirección opuesta hacia donde estos se dirigían.

- Suéltame de una vez falsificador de mazos, tengo otros asuntos que resolver ahora – Dijo Aster en un tono desafiante.

- Oh, te atreves a ofenderme, ese tipo de insurgencia no la permito – Dijo Judai en tono amenazante.

- Suficiente, sólo vámonos de aquí – Dijo Johan sacando el brazo de Judai del brazo de Aster y tomando del pecho a Judai para alejarlo empujándolo contra la pared.

- Ya verán ustedes dos, no se quedará así, recuérdenlo – Dijo Judai desde la distancia mientras Aster y Johan corrían.

Ambos comenzaron a correr en direcciones erráticas a través de la academia, mientras el comenzaba a pensar como comenzó todo, recordando los duelos con energía, hasta que recordó al hijo de Bonaparte, quién había sido poseído por Yubel en ese momento

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ambos comenzaron a correr en direcciones erráticas a través de la academia, mientras el comenzaba a pensar como comenzó todo, recordando los duelos con energía, hasta que recordó al hijo de Bonaparte, quién había sido poseído por Yubel en ese momento. Es así como ellos buscaron a todos los Ra para encontrar finalmente al susodicho, quien pareciere que estaba escondido, dado que lo encontraron finalmente en rincones profundos de la misma academia.

- Esto se acabó Yubel, sabemos que estás de todo esto, sin la energía de los duelos y la oscuridad de las personas no puedes hacer nada, así que deja los juegos y preséntate, porque como ya te dije, Judai está en peligro – Dijo Johan en un tono amenazante en contra del hijo de Bonaparte.

- Veo que eres un muchacho muy insistente, pero para que estés claro, no dejaré que nada le pase a Judai, así que aléjate antes de que me moleste – Dijo Yubel con un visible enojo.

- ¿De quién se supone que estoy en peligro? – Dijo una voz a lo lejos.

- ¡¿Judai?! – Dijeron todos sorprendidos de manera sincronizada.

Allí se encontraba Judai quien sigilosamente había seguido a ambos duelistas, este comenzó a caminar calmadamente en dirección a estos 3, tenía una cara de enojo bastante evidente. Aster no lo podía creer el inexpresivo Judai estaba enojado, usualmente no mostraba ningún tipo de emoción, mas ahora pareciese que algo más allá de las convicciones conjuntas de la sociedad de la luz lo movía.

- Y bien, ¿no me dirán nada? – Dijo Judai a metros de estos jóvenes.

Había silencio, todo esto se encontraba fuera de los planes de Johan, lo que le mantenía sentimientos encontrados respecto a reencontrarse con Judai, todo parecía tan torcido, que no sabía que pensar. Del mismo modo Yubel no estaba preparada para un encuentro tan temprano con Judai, lo que le dificultaba su plan de carcomer a sus amigos para ganar fuerzas. Y por otro lado Aster se encontraba expectante respecto a los sucesos que iban a acontecer, había preparado un nuevo mazo para pelear contra Judai, pero le faltaba ponerlo en práctica para ver la manera de jugarlo fluidamente.

Un futuro que nunca ocurrióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora