Chase.
Llegó al fin a mi apartamento, tomó el ascensor y me dirijo a mi piso. Hoy fue un día largo, deseo descansar y quitarme estos pensamientos, tomar una ducha como dijo Ahila y claro comer algo, muero de hambre, hace rato había perdido el apetito, pero volvió con más fuerza. Entro y dejo las llaves en la mesa de entrada.
Me dirijo al cuarto mientras enciendo todas las luces, no porque le tema a la oscuridad, sino porque así no me siento tan solo, ya que desde hace unos cuantos años vivo solo. Enciendo el aire acondicionado del departamento y me desvisto por completo en mi habitación; me dispongo a tomar una baño cuando el celular suena, enseguida camino a cogerlo y antes de contestar observo quien llama.
—Dime Ahila ¿todo bien? — pregunto angustiado.
—Sí todo bien, es sólo que… —Suspira— quería saber si habías llegado bien— esto es raro, cualquiera diría que siempre hacemos estás llamadas, pero no.
—Si llegue bien, pero dime ¿De verdad está todo bien? — vuelvo a preguntar algo preocupado, ya que no es común que me llame luego de dejarla.
—Si descuida, todo está bien, es que estaba preocupada por ti, deberías descansar y si necesitas algo llámame— Puedo notar su preocupación y angustia en su voz.
—Así lo haré y tú también descansa, gracias por llamar, deberíamos hacer esto más seguido… Digo somos amigos y nos conocemos desde hace años… me refiero a que…— Vacilo un poco para tranquilizarla mientras me paseo por la habitación.
—Tranquilo —ríe un poco— entiendo, entiendo, si deberíamos hacer esto más seguido. Bueno ahora sí puedo ir a dormir, ya sabiendo que estás mejor y que llegaste bien—.
—Vale— río suave — buenas noches, Ahila. Ahora iré a tomar mi baño—, le digo mientras siento la brisa del aire acondicionado enfriando mi cuerpo.
— ¿Espera eso quiere decir que estas?… digo… en toalla, que pena— Se escucha realmente apenada y aguantando la risa, me la imagino cubriendo su boca con la mano.
—No —Suelto una carcajada— no me dio tiempo ni de tomar la toalla, estoy desnudo, si es lo que querías saber— digo con picardía y algo burlón.
—Estas… estas… Ay Dios —escucho unos ruidos raros antes de soltar una fuerte carcajada—, disculpa en serio —vuelve a tener una voz suave y pensativa— tengo todo este rato hablando contigo y tú ¿estabas así?… ay… perdón, debes tener frío… mejor me despido— si antes no estaba sonrojada, puedo asegurar con ese tono de voz que ahora sí lo está.
—Tranquila —le digo para calmar la situación— no debes ponerte tan nerviosa, tampoco me estás viendo ¿o sí? —Río—, Ahila, gracias por alegrar mi noche— realmente me sacó de mis pensamientos —Bueno, ahora seguiré mi camino a la ducha, descansa y nos vemos en un rato—.
—No te preocupes, estaba preocupada, me alegra haberte llamado y siento… Ya sabes… haber interrumpido tu baño —ríe un poco y siento como se mueve por su apartamento— hablamos luego y duerme bien Chase— Ella cuelga la llamada y me dispongo a regresar a mi baño. Está noche no terminó tan mal y pensar en lo que vi, prefiero dejar eso para mañana, hoy solo disfrutaré de un buen baño.
…
Me muevo por toda la cama, solo viene a mi mente como entro a una habitación y allí está ella, colgada en el medio de la sala, veo sombras por todos lados moverse, escucho las sirenas que se acercan al lugar, sé que todo es un sueño, pero también sé que son recuerdos.
— ¿Por qué? Esto no es posible—, escucho que alguien dice en el lugar y el ruido de las sirenas de ambulancias o policías siguen.
Mis manos tiemblan, siento como lágrimas brotan de mis ojos y caen lentamente por mis mejillas, es el recuerdo más doloroso que tengo en mi vida. — ¡Esto no es real, es solo un mal sueño! —, le gritó a mi subconsciente para poder despertar, pero una voz sobrepasa mi grito.
—Esto no es posible ¡No! Esto no es posible, ella no haría algo así ¡No! —, la voz se va quebrando más a medida que va hablando –Yo no puedo creerlo ¿Por qué? ¡Dios! ¡No! Esto no es posible– Reconozco la voz y sé que es la voz de mi padre y recuerdo ese día, es el día en que ella nos dejó.
Me agito en la cama de manera que lucho por salir de esta pesadilla, abro de golpe los ojos y veo solo oscuridad salvo por las leves luces del aire y de la televisión que me acompaña, estoy sudado, agitado y me falta el aire. Me incorporo en la cama, sentándome y mirando fijamente a la pared, por más que a veces logro dormir bien, hay días como hoy, dónde esta pesadilla me acompaña y lo hará tal vez por el resto de mi vida, lo doloroso es que no soy el único que carga con esta cruz, no combato solo con este mal recuerdo.
Cuando intento volver a dormir suena la alarma, la observo 7:00AM y sé que es hora de prepararme, estoy cansado, siento que no he dormido nada, pero es un nuevo día y es hora de poner cartas en el asunto — ¿Qué quiere este asesino realmente de nosotros? — es lo primero que me pregunto, me levanto y paso la mano por mi rostro, fue una larga noche, pero como dijo nuestro asesino es “Hora de empezar a jugar” y el ya movió su pieza, ahora toca descubrir ¿Por qué ese mensaje?
Me pongo de pie y camino por la habitación, me dispongo a recorrer la sala para ir a la cocina, a preparar café, cuando escucho el timbre, es muy temprano para que alguien este tocando y más aún, como alguien evitaría al portero y llegaría hasta acá arriba sin antes avisar. Me dirijo directamente a la puerta cuando veo una carta que parece fue deslizada por debajo de mi puerta, me asomo por el ojillo de la puerta y no veo a nadie.
No soy tan nuevo en esto, algo he aprendido en los años colaborando con la policía, cojo un pañuelo de la mesita que tengo al lado de la puerta y levanto el sobre, manipulo todo con tal cuidado, para no dejar ninguna huella y mucho menos borrar las que ya tenga. Abro el sobre y empiezo a leer la carta.
—Claro que se dónde vives…— empezaba narrando como si leyera mi mente y las incógnitas que se estaban produciendo—en realidad sé todo de ustedes, pero sería muy sencillo hacerte algo, por eso puedo decirte que puedes dormir tranquilo, tu compañera no tiene tampoco nada que preocuparse.
Chase quiero que sufras, quiero verte llorar y gritar, como el día que viste por última vez a tu madre. Búscame… deja que empiece la cacería, vamos a ver ¿Quién es el cazador y quien es la presa?—.
.............
Y fin... jajajaxd seamos sinceros ¿Quien no tendria miedo, intriga y curiosidad si te dejan una carta así?Aparté.... ¿Y ese bobeito entre Chase y Ahila?
¿Bonita amistad no?
A mi me parece que son grandes amigos y que ahora están metidos en un gran lío.
Les dije poco a poco vamos divirtiendonos, conociendo a los personajes de esta historia y explorando la mente de ellos... para luego volver a dar intriga con este asesino astuto.Puedes seguirme en mis redes sociales @henrynews2 y mi podcast de @entre_manos2 dónde subiré un podcast hablando de esta grandiosa aplicación con mi mejor amiga.
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Rastros de sangre
Mystery / ThrillerDos reporteros del "New York Times" que son colaboradores en los casos de homicidio en el estado. Pronto ellos mismos se verán implicados en el caso que investigan, envolviendo a sus familiares y amigos... Mientras tratan de descubrir y capturar al...