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EN POCO TIEMPO HARRY, Hallie, papá y yo estábamos de pie detrás de los tres amigos, el chico tirado en el suelo de la cabina se veía mal se le notaba, después de asegurarnos de que ya estaba mejor Ron y Hermione le ayudaron a ponerse de pie.
—¿Te encuentras bien?—le pregunto el pelirrojo.
—Si—Harry inspeccionó el compartimento buscando a la criatura—¿Que paso?¿A dónde fue esa cosa?¿Quien gritaba?
—Nadie gritó Harry—habló su melliza.
El mayor partió una tableta de chocolate y se la extendió a Harry.
—Toma, te ayudará.
—¿Que era esa cosa?
—Un dementor—respondió mi padre repartiendo chocolate para los demás pero no alcanzó para mí Hermione al notarlo partió su parte y me la dio—Uno de Azkaban, si me disculpan iré a ver al maquinista—salió del compartimento y se fue.
.....
Al llegar a Hogwarts todos nos sentamos en nuestras respectivas casas, mi padre se sentó junto a los profesores se podía ver en su mirada que el lugar le trae viejos recuerdos, recuerdos con sus amigos y mi madre.
—Sean bienvenidos a otro año en Hogwarts—comenzó a hablar el director—quisiera decir unas palabras antes de que nuestro excelente banquete los deje aturdidos, primero me alegra recibir al profesor R.J Lupin quien ha accedido a ser el profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, suerte profesor—El nombrado se paró de su asiento y los aplausos junto con murmullos se empezaron a oír, yo me uní con mi alegre aplauso— Y nuestro profesor de Cuidado de Criaturas Mágicas a decidido retirarse para pasar más tiempo con el brazo que le queda, por fortuna me alegra decirles que la materia será impartida por nuestro querido y gran amigo Rubeus Hagrid—y los aplausos volvieron a sonar— finalmente un aviso menos agradable,por orden del ministerio de magia Hogwarts será custodiada por los dementores de Azkaban hasta nueva orden notificacion que me disgusta tengo que dejar muy claro que mientras estén aquí nadie saldrá del colegio sin permiso. A los dementores no se les puede engañar con trucos o disfraces, ni siquiera con capas invisibles—añadió como quien no quiere la cosa, y Harry y Ron se miraron—. No está en la naturaleza de un dementor comprender ruegos o excusas. Por lo tanto, les advierto a todos y cada uno de ustedes que no debéis darles ningún motivo para que les hagan daño. Confío en los prefectos y en los últimos ganadores de los Premios Anuales para que se aseguren de que ningún alumno intenta burlarse de los dementores.
Después de terminar el banquete todos los alumnos nos dirigimos con ayuda de los prefectos y Premios Anuales a las respectivas salas comunes, al entrar con Atria al parecer a todos se les olvido que hay dementores custodiando las instalaciones o al "asesino" suelto por ahí ya que todas las personas del lugar me miraban con una sonrisa y curiosidad.
