Creating You 𖥸 Minchan

𖥸 : Doce

Siendo solo una semana de haber compartido besos, Chan y Minho habían creado un vínculo un tanto más amplio. Aunque el rubio siempre estaría avergonzado de hacer algunas cosas con Minho, eso no le quitaba lo mucho que le gustaban.

Como prueba de ello, pidió que Minho durmiera con él, así en las noches ambos podrían estar juntos y Minho podía hablar de cosas que se le ocurrieran durante los besos que compartían.

Incluso el científico le enseñó que de acariciar con las manos, también podía acariciar con sus labios.

Y eso nunca faltó una vez que lo aprendió. Cuando Chan preparaba el desayuno, Minho venía detrás de él y besaba su cuello, diciendo que solo "Quería ver las reacciones de Bangchan".

Se acostumbró a la cercanía de dar abrazos. Siempre en la cintura del científico cuando dormían y otras veces solo quería acariciar o ser acariciado.

Esta vez de noche ya estaban listos para ir a la cama. Los dos estaban de frente al otro, la única diferencia de las otras noches era que Chan no tenía nada puesto para tapar su pecho y Minho no se escapaba de tener el torso descubierto.

-¿Es tu cuerpo más sensible en este costado del lado derecho?- la voz de Minho no era tan automatizada a medida que pasaban los días, pero ciertamente su vocabulario era singular del robot que vivía dentro de él.

-Lo es cuando tú lo tocas...- Chan estaba más acostumbrado a las manos del medio robot, pero jamás lo estaría completamente, su cuerpo tenía una chispa cuando él se acercaba. Pero no habían pasado a más de eso y el rubio sentía cierta lástima por no dejar que Minho hiciera lo que quisiera.

-Siento lo mismo cuando Bangchan toca mi cuello- Minho miró a un punto de la habitación pensando.

A Chan le agradaba saber eso, tanto que se acercó a darle un beso en el cuello, cosa que Minho analizó y decidió copiar, el rubio sintió el pegar de sus labios y eso solo causó que ambos compartieran algo más cercano a un beso entre los dos. Al tener ya practica en eso, ir a un beso abierto fue inevitable.

Minho tenía mucha fuerza en sus pulmones desde aquella primera vez.

Duraron un buen tiempo en juntar sus lenguas, saboreandose el uno al otro, dando a que ambos se acercaran más a sus cuerpos. El rubio no quería parar si era sincero, la luz y el ambiente estaban simplemente acogedores, excepto su corazón y cuerpo.

Estaban en completo agite.

-¿Podemos comenzar nuestro encuentro? Hoy... puedo sentir que mi cuerpo está en un 100%...

Chan paró de respirar, su cuerpo también le pedía más y aunque muchas cosas le hacían dudar de si esto saldría bien, su confianza le dio a decidir que esto era ahora o nunca.

-Y puedo sentir que tu cuerpo también lo está. No creo que en este estado mis sentidos me fallen al leer a Bangchan...

-No te han fallado...

-¿Eso es un... sí?- Minho le miró buscando señas de confirmación. Estaba tan emocionado que Chan creyó haber visto una nueva cara en él.

-Sí, Minho...- Chan en un acto de vergüenza, acaricio también los lados de Minho, muy cerca de donde estaba su ropa interior y Minho abrió los ojos. Eso era ya otro lugar a experimentar-. P-puedes hacer lo que quieras...

Automáticamente el pelinegro hizo lo que se le concedía y eso fue levantarse y quitar las sábanas de encima de Chan y levantarle con firmeza fuerza, todo para succionar en besos húmedos su cuello, y sus manos tomaron un agarre totalmente distinto, como si supiera lo que hacía.