PARTE 21 - TENTACIONES

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Fersen.- Mi vida, que tal si lo dejamos en empate y pasamos a la tercera parte.

Oscar.- Pues no es mala idea, pero estamos empatados, que tal solo un pedido simple y listo.

Fersen.- Jeje está bien mi vida, aunque la lucha cuerpo a cuerpo creo que no se puede dar.

Oscar.- ¿Porque?

Fersen.- Bueno, comprenderás que estar junto a ti, este.... No sé cómo explicarlo mi vida.

Oscar.- A ver, qué pasa si.

En ese momento Oscar tomó del brazo a Fersen haciéndole una llave, pero definitivamente él pesaba más que ella lo que provocó que cayera sobre él, mirándose uno al otro.

Se quedaron mirándose, Axel estaba sorprendido por la acción y Oscar que estaba sobre él, se acercó poniendo sus brazos a los costados de la cabeza, y lo besó dulcemente, siguieron así hasta que su compañero la volteó, dejaron de besarse

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Se quedaron mirándose, Axel estaba sorprendido por la acción y Oscar que estaba sobre él, se acercó poniendo sus brazos a los costados de la cabeza, y lo besó dulcemente, siguieron así hasta que su compañero la volteó, dejaron de besarse.

Fersen.- Ves mi amor, por esto no podemos hacer luchas.

Oscar iba a hablar, pero no pudo porque él empezó a besarla nuevamente, pero esta vez con más ganas, se acercó más su cuerpo al de ella, una sus manos estaban en su mentón, la otra se deslizó por su cadera, lo que provocó que abriera su boca, éste aprovechó para introducir su lengua, y así el beso se profundizó mucho más, era una lucha interna, pero él terminó el beso después de un rato estando así, y mirándola a los ojos.

Fersen.- Amor, este, vamos a la cabaña si

Oscar.- Eh si, Axel, sabes (toda roja), me gustó mucho lo último que hiciste (dijo esto tapándose el rostro)

Fersen.- Si, a mí también me gusta mucho. Entremos en la cabaña, comemos algo y allí pensamos en nuestros deseos.

Oscar.- Claro.

Lo que Oscar ni se había imaginado era de que Fersen se había excitado mucho estando sobre ella y felizmente la conversación con Oscar le hizo pensar en otra cosa, ya que casi se había decidido a estar con ella, pero se detuvo a tiempo. Había algo interior lo detenía, sabía que ella tampoco se opondría, pero eso había estado pensando él, que tiene que ser muy especial, y este no era ese momento.

Cuando estuvieron dentro ella se sentó, pero de paró de inmediato al ver a Fersen salir con cosas de la cocina.

Oscar.- Axel, te puedo ayudar en algo.

Fersen.- No mi vida, ya tengo solo, listo, lo que si, puedes ir arreglando la mesa y ah, vaya a lavarse la manos.

Oscar.- Si papá, me lavaré las manos, ah verdad, ya sé lo que pediré.

Fersen.- A ver hija dime, ah pero primero comemos algo qué dices.

Oscar.- Claro.

Comieron en silencio, unos panes rellenos de pollo, tomaron té, una sopa casera, nuevamente preparada por él, ella estaba encantada con la comida.

Fersen.- Y dime amor, qué es tú quieres.

Oscar.- (sonrojada) pues me gustó lo último que hicimos, quisiera hacerlo de nuevo.

Fersen.- Qué la lucha de espadas?

Oscar.- (mas roja), no lo que hicimos antes de entrar a la cabaña, esos besos.

Fersen.- (pensando, oh no ya me temía eso, tendré que ser más cuidadoso) Ah si mi vida, claro que te los daré.

Oscar.- Y qué es lo tú quieres.

Fersen.- Pues pasar todo un día contigo nadando en el lago.

Oscar.- Eso lo podemos hacer el domingo, igual no iré a palacio, ya he dedicado mucho tiempo ayudando.

Fersen.- Mi vida, no te preocupes, si no puedes el domingo, lo haremos el próximo. Y así hacemos todas las peticiones juntas. (guiñándole el ojo)

Oscar.- No, yo quiero eso ahora.

Fersen.- Está bien amor, si tú lo deseas, bueno dejemos todo limpio y lo haremos si.

Oscar.- Si claro.

Terminaron de limpiar, ella estaba muy nerviosa, al igual que él.

Oscar.- Ya está todo limpio y ordenado, algo más mi cielo.

Fersen.- Pues creo que no, aunque creo que es tarde, pero no hay problema o si?

Oscar.- No, ninguno.

Fersen.- Bueno amor, ven siéntate frente a mí.

Ella hizo lo que su pareja de dijo, él le tomó la mejilla y se acercaron lentamente comenzando un beso simple, el cual se convirtió en algo más cuando Fersen mordió suavemente los labios de ella, los cuales al hacerlo provocó que abriera la boca, lo cual él metió la lengua, y así empezaron una pequeña lucha entre los dos, las manos del sueco estaban con los dedos enredados en la cabellera de ella, mientras ésta pasaba las manos por la espalda. Ninguno de los dos se dio cuenta del tiempo transcurrido, pero Fersen se separó de ella. Estaba más tranquilo que la última vez.

Fersen.- Que tal mi amor, ¿te gustó?

Oscar.- Si, Axel, mucho, puede ser uno más.

Fersen.- Oh mi vida, eres especial. Ven acá

Volvieron a besarse, ella ya sin temor le tomaba las manos entrelazando sus dedos, siendo él que se separe.

Fersen.- Te quiero mucho Oscar.

Oscar.- Yo también te quiero Axel.

Fersen.- Ya es tarde ahora si regresemos a tu mansión.

Oscar.- Ahh no me hagas acordar, tengo que encontrarme con André. Ya no quiero ir, se me quitaron las ganas de ir. Prefiero quedarme aquí sola en medio del bosque, que ir allá.

Fersen.- Pero no te quedarías sola.

Oscar.- Así, te quedarías conmigo.

Fersen.- Si, aunque me refería a los animales del bosque.

Oscar.- Bueno, mejor me voy, ya me desquito el domingo de todo.

Fersen.- Si mi vida, y yo cobro mi pedido. (guiñándole el ojo).

Oscar.- Asi es mi vida.

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Y se dirigieron a la mansión de Oscar.

¿Qué pasará?

¿Qué hará Oscar a André?

Espero sus sugerencias y comentarios.

Muchas gracias por sus vistas y me gustaría ver sus comentarios

Nos vemos muy pronto, cuídense mucho .

Un gran abrazo virtual.

LA APUESTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora