Capítulo 10: "La oveja".

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Mi circulación se congeló, mi vista se nubló y mi aliento jadeo sin cesar.

Joder, esto es mas oscuro de lo que pensaba.

—P-pero tú eres la bestia, yo te vi de ese modo en la ventana. Protesté basándome en hechos anteriores a lo cual sus reacciones tan tristes pero tranquilas me sorprendieron en lo absoluto. Quizá su vida ha sido tan de ese modo, que hay veces que simplemente no hará una lucha por justificarse si al final le criticarán.

—No, no soy la bestia, solo soy alguien como ese maldito monstruo, soy un alma desolada que aceptó esta maldición con un solo propósito.

El se apartó para reposar a orilla del puente dejando sus pies a la deriva, con la cabeza baja, dibujando una silueta triste bajo la luna brillante.

—¿Qué propósito? Dije temerosa de su respuesta.

El exhaló, miró al cielo para después voltear hacia mi.

—Tú, Patt Beckman, tú eres el motivo por el cual yo decidí vagar por las noches dependiendo de la sangre y de la carne.

Sentí como el mundo me daba vueltas y que ese lugar tan pacífico poco a poco se volvía en un lugar de dolorosas confusiones.

—¿Quien eres?. Pregunté desesperada.

—Aquí lo importante no es quien soy yo, es quien eres tú.

Eso me confundió, me sentía impotente quería que dejara las respuestas que generaban mas preguntas, y me diera las que eliminaban dudas.

A lo que sin preámbulos me dio la respuesta mas extraña de todas, al menos la que no esperaba.

—Tú, eres el amor de mi vida y de todas las vidas en las que vuelva a verte.

Tan pronto culminó "verte" la calma se volvió tempestad, la tormenta de mi pesadilla se volvía aparecer tan fuerte y tan luminosa  como en esa noche.David se acercó  cuando la lluvia comenzó a golpearnos, me dijo que era hora de marcharnos a lo cual debía negarme, tenia tanto por preguntar.

Mi insistencia se alejó por completo cuando un rayo atravesó las aguas del río y una figura expectral emergía de ahí, dejando luz a su paso para postrarse en el puente y tomar forma humana. Era un hombre al cual no distinguí bien antes de que David tomará mi mano y desaparecieramos.

*

*

*
SUEÑO.
Aparecí en el jardín de mi infancia, llevaba puesto el vestido purpura de Roxanne, todo estaba como antes, mi columpio de una cuerda, la casa del árbol y ese hoyo en la cerca que hacia que pudiese pasar a la casa de a lado que estaba abandonada, solía jugar ahí.
Entonces la vi, vi a la niña que yo solía ser jugando en el columpio de repente, traía los pantalones rosa que adoraba el cabello suelto como de costumbre, era la Pattie greñuda desde siempre con las muñecas abandonadas y las blusas manchadas de tinta.
La pequeña niña, se mecía en el columpio divertida, me encantaba esa escena de mi, como la de una fotografía.
Entonces el apareció, al otro lado de la cerca, llevaba un libro en la mano muy grande de los hermanos Grimm, David me llamaba con familiaridad y yo le decía Hechicero.
Aprecié esa escena con lágrimas en los ojos, el jugaba conmigo, el me acompañaba toda la infancia, mi madre lo llamaba "amigo imaginario".
Me senté a escuchar "Blanca nieves" admirada e impresionada con mi amigo el hechicero, el cual levantó la mirada y logró observarme observándonos.
Me sonrió.
El sueño dio un giro muy precipitado, ahora me encontraba sobre un lago congelado, en el invierno crudo del 84 busqué a David y a mi en algún lado y no nos encontré, observé el muelle y había una partidura con una oveja de felpa flotando en el agua terriblemente fría, entonces comprendí y recordé, corrí en cuanto pude al asimilar la escena, asustada y desesperada.
En efecto ahí estaba, ahogándome en el agua sofocada de hipotermia congelando poco a poco mi organismo, intenté salvarme o salvar a la pequeña Pattie queriendo tomar su mano, pero fue Todo en vano mi piel era la de un fantasma que atravezaba todo y por lo tanto no podía sostenerla.
Las escenas vinieron a mi mente, la oveja de felpa cayó al agua e inocentemente mientras jugaba con ella quise salvarla sin pensar las consecuencias cayendo en el proceso de rescate. Después, el fue,  el apareció, siempre fue el quien me cuidó. Se lanzó al agua y me salvó de una muerte agónica, como si la oveja de felpa fuese yo  y la salvase el pastor de una predecible perdición.
*
*

Desperté de mi sueño, estaba más confundida que unas plásticas en álgebra.

Estaba segura que lo de David fue real, la aparición, el puente, el amor de su vida y la tormenta.

Ahora, a mi sueño gracias, podía entender el "Te he protegido desde siempre".

David me salvó de toda situación de peligro y soledad para terminar por guardarle en el baúl de mi mente como mi antiguo amigo imaginario. Valla cosa, todo ha sido tan extraño, un perfecto desconocido es mi conocido de toda la vida.

Guardé la calma y observé que estaba de nuevo en el hospital, asimilé que era navidad y que el reloj marcaba las 8:31 am.

Observé como mi abuelo yacía plácidamente y me dolió el daño que le hice, me acerqué a el con la esperanza de que abriera sus ojos y pedirle una disculpa, comprendía que si yo corría peligro debía alejarme de ellos por mas que me doliera en el alma.

Josh y el, juntos a mi lado corrían el riesgo mas terrible al que yo misma les exponía.

El y mi hermanito eran quien menos quería que salieran lastimados, y a los que mas les afectaría ver como me consumía poco a poco la tristeza y la oscuridad;  así  decidí que apenas se recuperara huiría de estados unidos y los alejaría de esa situación a lo que mi cercanía les mantenía expuestos. lastima que lo comprendí demasiado tarde.

Mi abuelo estaba muerto.

"La bestia que me amó".Donde viven las historias. Descúbrelo ahora