Acto 16

11 3 0
                                    

¿Qué día es hoy?

Mmm al parecer he perdido la noción del tiempo.....¡¡¡este lugar es aburrido!!!

Suelto varios bufidos tirandome en la cama.

Por lo menos la cama es cómoda, ¿por qué tiene que dejarme aquí encerrada? Eso es privarme contra mi libertad, pero bien que me lo dijeron, "ten cuidado con quien te juntas". Mmm, él sujeto que es mi, "guardaespaldas", me da miedo.

Si no estoy mal hace dos días vi a David....mmm si tan siquiera hubiera aceptado.
Tocan la puerta haciendo que saliera de mis pensamientos.

—Alejandra me iré al trabajo —aparece aquel tipo, ¿cuál es el punto de tenerme en este lugar?.

—Mmm si

—Despidete bien —se acerca bruscamente a mi.

Me aparto de él quedando más lejos de lo que estaba

—¿Puedes retirar al guardaespalda? —lo miro seriamente.

—Corres peligro si lo alejó de ti —menciona burlón levantándose de la cama.

Algún día dejarás de sonreír, y ahí diré "el que rie al último rie mejor".

—Todo el día me la pasó encerrada —suspiro con pesadez—. ¿Por qué simplemente no cambias al guardaespalda? Me incomoda tener a ese tipo

—Mmm —me mira fijamente—. Tal vez hoy lo consiga, bueno me voy —responde con simpleza y sale de la recámara—. Por cierto, no te separes del teléfono, le dire a mi amigo, y hoy tendrás guardaespalda nuevo —cierra la puerta.

—si.... —me tiro nuevamente en la cama.

Este lugar es completamente aburrido con decir que ni a las señoritas de limpieza y cocina no las veo.
Este lugar es extraño.....

Y después de un tiempo caí en los brazos de morfeo.

                  ~~~~~~~~~~~~~

Sentía que me movían de un lado a otro.
Doy bufidos, gruñidos y manotazos para que me dejarán dormir..... pero no funcionó...

—Señorita Alejandra —se escuchaba una voz angelical y muy hermosa.

—¡¡Dejen dormir!! —gruño hundiendo mi cabeza en la almohada.

—Lo siento señorita, pero él señor quiere hablar con usted, está abajo con unas personas —me mueve un poco más hasta el punto de levantarme.

—suelto un suspiro con pesadez y por fin me incorporo un poco en la cama— Está bien, ahora voy

Me paro de la cama a regañadientes y me cubro con la bata para dormir, con una dona amarro un poco mi cabello y me coloco mis pantuflas que están a un lado de la cama

—¡Listo! —me acerco a la puerta al lado de la chica que llevaba puesto un traje de mucama.

Ahora que lo pienso, no la había visto desde hace ¿dos días?

Al fin llegamos a la parte baja del lugar. Ahí se encontraba Miguel y cuatro chicos más, dos chicas y dos chicos.

—¡Vaya! Imaginaba que tardarias más y que te mmm te verías más ¿decente? —me mira con diversión.

—¿Qué es lo que quieres? —cuestiono de mala manera mirándolo fijamente.

—Decirte que ya conseguí a tus nuevos guardaespalda —me mira fijamente y voltea a ver a los chicos que estaban a su lado.

—Mi nombre es Hiroshi, tengo 20 años, espero y mis servicios sirvan para usted —hace una reverencia.

Un chico de cabello blanco con ojos ¿purpuras? Es algo inusual al igual que el siguiente chico.

Estaremos juntos de nuevo ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora