ROPE [Segunda temporada consejero]

Fluir I

Me dolía el corazón.
Demonios.
Pensé en todo, en que decirle, en que hacer, estaba preparado para volver a verla. Con el estúpido pensamiento que cuando llegue nuestro encuentro nos abrazariamos y nos fundiriamos en un beso. Que iluso.
Jamás llegué a pensar como iba a reaccionar ella, como se sentía con todo, con volver a verme.
Dos veces se desmayó, esta más delgada. Realmente me preocupa lo que está pasando con ella.

La miré y suspire.
Dormida, con sus ojeras por el piso, y aún que esté más grande y sus facciones se encuentren un poco cambiadas, la niña de la que me había enamorado estaba ahí.
¿Todavía me quiere? ¿Conoció a alguien más? ¿Me odia?
Trague saliva, ojalá que de todas las preguntas, se responda una.
Todavía me quiere.
Prometo que no la suelto nunca más. Vine a apostar por ella, algo que tendría que haber echo hace años, y todo ahora está echo añicos. Ni siquiera sé que le voy a decir cuando ella despierte. Mierda, me tiemblan las manos, la amo tanto.
La semana que no estuvo en la escuela no pude dormir. Cuando la enfermera me llamó, ella ya se había ido, estaba huyendo de mi. Lo entiendo. Pero todo se volvió una mierda después cuando la directora no me quiso pasar su dirección. Que ella iba a volver y le iba a pedir los apuntes a sus compañeros. Maldita universidad. Llore las tardes pensando que se había ido con su madre a otra ciudad. Y me quedaba dormido a la noche pensando que estaba vez no me rendiría. Pero para ser sincero, ni siquiera sabia como iba a actuar. Todo mis planes se cambiaron.
Y hoy cuando la vi acercarse pensé que por fin iba a pasar, pero en vez de eso, me atacó y ni siquiera tuve el tiempo para responder. Solo se desvaneció.

¿Qué mierda es lo que voy hacer?

-Pobre niña, el otro día le dije que era estrés, pero ya no creo que sea eso.
Me dijo la enfermera mientras le tomaba las pulsaciones a la pequeña Destiny.
-¿De que hablas?.- Fruncí el ceño, es obvio que es estrés. Soy un hijo de puta.
-Bueno, es evidente que esta niña no come, pero aparte de eso, estoy empezando a dudar sobre si no esta consumiendo algún tipo de droga.
¿Qué?
Eso era imposible, Des estaba en contra de todas esas cosas.
-¿Cómo puede usted saberlo?
-Bueno-. La enfermera carraspea -Ella no duerme, está sola, no come, casi siempre la veo con los ojos dilatados. Tiene un olor particular. Pero no se, quizás sean solo ideas mías, ojalá que no, es una chica muy hermosa y llena de juventud para que este arruinándose la vida así.

Le iba a decir que dejara de decir pavadas, que ella no era así.
Pero una Destiny muy exaltada sentándose en la cama me interrumpió. Ella miro por toda la habitación hasta que sus ojos me encontraron. Enseguida el semblante de asombro se convirtió en uno de angustia.
-Bueno, wow, veo que ya te despertaste. ¿Cómo te sentís?
-Bien.- Dijo sentándose al borde de la cama. -Pero me tengo que ir, tengo clases atrasadas.
La enfermera la agarró de los hombros mientras se reía.
-No me hagas reír, quédate acá-. La empujó para que se volviera a acostar. -No te vas a ir de acá hasta al menos una hora de observación conmigo. Lo que si, voy a ir a buscarte algo para que comas. Quédate con el señor Bommer, yo ya vuelvo.

Los ojos se le abrieron como platos y negaba muy sutilmente la cabeza mientras veía a la enfermera irse.
Agarro una almohada mientras se daba vuelta y se la ponía en la cabeza. Grito despacio con frustración.
Me apoyé sobre mi puño.
No se que hacer.
-Des… yo necesito hablar de algo, pero también quiero asegurarme de que te encuentras bien.
-No hace falta que me digas nada. No quiero saber nada de ti, ni te tu estúpida familia. Solo déjame en paz.

-¿Qué?.- ¿QUÉ? -¿Familia, de que estas hablando?
Ella se sacó la almohada de la cabeza y se dio vuelta para mirarme.

-¿Que estas haciendo aquí Matt?

-Vine a buscarte.