Chamo, ya tenía abandonadísima la idea de pasar por aquí a echar cuentos, ¿me extrañaron? Porque yo sí, y si dicen que no les caigo a palos.
Aquí les voy a contar el beta de lo que me ha pasado últimamente...
Primero, me gradué de la escuela, en la mejor etapa posible y con la mejor preparación para una fiesta de graduación, sí, mikiti. Podría describir mi promo en dos simples palabras, caos y pasadera de pena, allí nadie se ponía de acuerdo en nada, todo era coñazo y más coñazo, y cuando creímos que nada podría ser peor, poom, llega una pandemia.
Yo estaba así :D
Internamente colapsando, externamente colapsando.
¿No pude nacer antes para por lo menos haber ido a mi caravana? Porque eso era lo que yo más ansiaba, de pana. Recorrer toda Valencia con los faranduleros de mis amigos arrebataos dando vuelta en la jeepeta. Por cierto, extraño a esos coños de madre, odio todo.
Bueno ajá, segundo, los casos aumentan y aumentan marico, cada día estoy más cagada de salir así sea a comprar un kilo e' queso. Aunque admito que subí el cerro con mis panas hace tiempo y vinieron a visitarme en estos días, pero eso es otra vaina porque ahí si no me da miedo nada jaja. Con decirles que iba a ir a una reunión en casa de una amiga (con miedo por cierto, pero igualito iba a ir porque yo soy pajua) y mi mamá al final me dijo que no inventara por el covid, aunque por un lado se lo agradecí. Menos mal que fue antes de dar las 5 lechugas para dos litros de anís y chinotto porque sino me hubiese pegado un tiro.
Tercero, ¿ya les había dicho cuanto odio mi wifi? Porque le tengo la misma arrechera que al gobierno, una vaina así. Esa verga ahora agarró la maña de irse y venir a cada ratico, y tiene esa wachafita desde hace días, es que provoca meterlo en la lavadora, microondas, horno, tosti arepa, parrillera, de toa verga pues, pero luego me acuerdo que no tendré wifi definitivamente y se me pasa.
Lo único bueno que me ha pasado en estos días han sido mis chinitos bellos y preciosos que amo más que a las empanadas. Desde Dynamite, pasando por in the soop, las entrevistas con hermosos mensajes que me hacen llorar a moco tendío, hasta la película y el concierto que harán pronto. No chamo, estos bichos vienen con todo, nadie mete coba cuando dice que bts world domination menor.
Y hablando de reyes, la arrechera que pasamos con youtube otra vez fue bella, es que yo estaba que me llegaba a la oficina con diez litros de gasolina y un paquete de fósforos si no nos daban esos millones que nos chorearon. Pero luego la dieron horrible publicando que en realidad habíamos pasado los 100 millones de reproducciones en un día, qué bella es la vida vale, por fin dejaron la pasadera e' pena.
Hoy estaba en mi ranchito, y como cosa rara, acostada en mi cama viendo el techo sin nada qué hacer. Tenía flojera de toa verga, hasta de echarme un peo pa' serles clara. El wifi se había ido desde hace media hora y yo ya estaba colapsando, no Netflix, no Youtube, Whatsapp, Wattpad, Kakaotalk, Instagram, un coño e' madre nada. Y ni siquiera tenía un jueguito en el celular pa' entretenerme porque los había borrado todos, nojoda.
—Pero ponte a hacer algo, barre la casa, pasa coleto, friega los platos —miré a mi mamá con la más trifásica cara de culo registrada en la historia cuando entró al cuarto. Ella juró horrible.
—La señora vino hace dos días, no vengas tú que todo eso ta limpio. Lo único sería el fregadero pero qué ladilla, dile a mi hermana, esa floja no hace nada.
—Creo que todavía está guindada.
—Ah bueno, yo no sé —revisé mi celular pa' ver si ya había llegado el malpario cabeza e' ñame Internet y todavía nada, que webo pana.
Vi que mi mamá salió del cuarto y de safrica la seguí hasta la cocina, tenía harina, huevos, azúcar y cacao montao en la mesa y lo primero que vino a mi mente fue: voy a comer sabroso hoy.
A mi mamá como le encantaba hacer postres, y todos le quedaban mundiales, me acuerdo que hubo una época donde la ayudaba a vender ponquesitos en el liceo, todos me decían que estaban burde buenos y pa' cuándo traía más, cuando aún vivía en una Venezuela con patria, no mentira tampoco, pero a comparación de ahora tal vez un poquito.
Hoy iba a hacer lo que más me gustaba, brownie. Nawebona, que ricura mano.
—Pasame ese poquito de cacao que queda ahí —señaló con su mano y le pasé la bolsita —Voy a picar la torta en pedazos y se van a comer uno por día, porque la otra vez que hice se la jartaron en dos, ustedes son arrechas —me eché a reír con malicia, recordando también que me daba coñazos con mi hermana por el último pedazo.
Había quedado un poquito de cacao en una cucharilla y yo de pajua fui a meterle la mano para probarlo olvidando por un momento su sabor, cuando voy a ver, vi al diablo en pantaletas y sostén con Chávez de compañero. Nawebona, que vaina pa' mala marico, no me gusta lo amargo, de pana que wakatela, y ya me imaginaba la cara de gafa que tenía ahorita. Tuve que ir a la nevera a beber de pico el poquito de pepsi que quedaba porque sino me daba algo.
—¿Quién te manda e' lambucia?
Mi mamá como siempre siendo la más cariñosa del mundo, la amo.
—Conchale má, ojalá se te queme esa vaina —sí, la amo mucho y le deseo lo mejor.
—Anda pa allá antes de que entre a coñazos, que bien caros salieron los ingredientes y casi bato el celular porque no me cargaba el video con la receta. Después no te quiero ver comiendo, se lo voy a dar todo a tu hermana y a tu papá.
—Mikiti.
—¡LLEGÓ EL WIFI! —gritó mi hermana desde arriba como la propia loca y nojoda eché la carrera pa' mi cuarto.
—Coño por fin, ahora podré escuchar la versión poolside de Dynamite, falta la cumbia, tambor, joropo, salsa, vallenato y hasta merengue.
Estaba burde emocionada escribiendo el título de la canción cuando sentí como todo se silenció y mi hermana y mi mamá gritaron arrechas casi al mismo tiempo. Coño e' su madre se había ido la malparia luz ahora.
Esto es lo que vive una veneca día a día, pero tenemos el Salto Ángel 😍
🇻🇪🇻🇪
ola balee
tiempito no parándole bolas a esto y haciéndome la loca, pero de pana quisiera escribir más aquí porque tragedias abundan mis panas

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Mis Siete Pajuos
FanfictionUna venezolana frustrada que encuentra consuelo en sus siete chinitos y a su mamá le parecen maricos. Historia corta con capítulos cortos. Situaciones de mi vida pero agregándole más detalles pa' que tenga más sazón. 100% lenguaje venezolano, mar...