Twelve Songs [TaeKook/KookTae]

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Pasaron dos semanas de aquello y aún ninguno de los dos se dirigía la palabra.

Jungkook tenía que soportar que en premiaciones o entrevistas Taehyung tuviese que mostrar su relación o contestar preguntas sobre ella.

Necesitaba alguna explicación así que un día en el que la empresa les otorgó un fin de semana para descansar, Jungkook esperó a que se hiciese de noche para entrar en la habitación de Taehyung.

Para sorpresa del pelinegro, no había rastro del mayor, la cama estaba ordenada, su pijama en el armario y todo apuntaba en que el rubio había salido. Debido a esto Jungkook volvió a su habitación para acostarse pero cuando estuvo a punto de cerrar los ojos, escuchó el ruido de la puerta abrirse encontrándose con un Taehyung despeinado, con las ropas desordenadas y las mejillas enrojecidas.

-Kookie...-Taehyung se dirigió hacia la cama tirándose encima de Jungkook para abrazarlo.

-Taehyung apártate.-El menor molesto empujó el cuerpo de su hyung con fuerza hasta quitarlo de encima y levantarse con rapidez antes de que el castaño lo atrapase de nuevo.

Dime mentiras agradables, mirame a la cara, dime que me amas incluso si es mentira porque no me importa nada en absoluto.

-Jungkookie...te amo.-El chico que estaba tirado entre aquellas blancas sábanas balbuceba cosas sin sentido.

-Bonita mentira.

-Tae ama mucho a Kookie...

-No me importa, además tu no me amas...tu quieres a Rosé.-Jungkook sintió un pinchazo en su corazón con sus propias palabras.

-Es todo mentira.-Taehyung tenía sus ojos cerrados y frotaba su mejilla contra la almohada para percibir el olor masculino de Jungkook.

Has estado fuera toda la noche, no sé dónde estabas.

-No me importa nada en absoluto, además ¿dónde has estado? No sabía dónde estabas.

-Estabas preocupado por mi ¿verdad Kookie?-En ese instante la voz del castaño se volvió más grave y por primera vez en ese momento abrió los ojos para mirar con profundidad a Jungkook causando un escalofrío en éste.

-E-estás arrastrando tus palabras sin que se te entienda nada.-El pelinegro se cruzó de brazos y desvió su mirada nervioso.

-Jeon, tengo muchos sentimientos por ti.

Taehyung JAMÁS había llamado a Jungkook por su apellido cosa que hizo que el pelinegro prestase atención al castaño porque sabía que a pesar de su estado de embriaguez éste hablaba en serio.

-Estoy actuando como si no me importara, como si esos sentimientos no estuvieran ahí.

-Taehyung cállate, no quiero escucharte.

-Jungkook estoy jodidamente asustado.-Taehyung se levantó con algo de dificultad y se acercó a Jeon. Éste retrocedió hasta que su espalda chocó con la pared y en su cuello sentía la respiración del mayor que apoyó su frente en el hombro del pelinegro.

-Tae por favor ve a darte una ducha, apestas a alcohol.-Jungkook intentó empujar el cuerpo del castaño pero todo esfuerzo fue en vano.

-Es todo una farsa, me obligaron ha hacerlo.-Taehyung se aferró a la camiseta de Jungkook en un desesperado intento de que éste lo escuchara.

-No pienso hablar contigo en tu estado.-Jungkook consiguió llevar a Tae hasta el baño que había en su habitación procediendo a quitarle la ropa, tarea que fue complicada debido a que el rubio intentó en varias ocasiones besar a Jungkook.

Aquella noche Taehyung cayó rendido por el sueño en la blanca cama del pelinegro mientras que Jeon observaba el cuerpo al lado suyo y se preguntaba a que se refería el mayor sobre que "todo era una farsa".