Aquí no hay secretos.

capitulo 6

Al llegar al auto, prendo la calefacción, hoy hace más frío que ayer. Llego al edificio y recuerdo que más tarde debo llamar a mamá. Estando en mi oficina, son las 8:40 a.m. y Matteo debe llegar a las 9:00 estoy de los nervios. Después de esperar por 2 horas, Matteo no llega, así que decido comenzar a diseñar algunas prendas para pasar el rato. Pase mucho tiempo diseñando, así que decido tomar mi celular, aunque sigo muy extrañada, Matteo no llego mi oficina.
Tengo un mensaje de Lexi, y uno de mi madre, abro el de Lexi para saber si estará en casa cuando llegue. Salió  a buscar su ordenador y unos papeles a su casa, pero ya regreso a mi apartamento. Eso le alegra, estará ahí cuando vuelva.

Marco el teléfono de la recepción, para preguntar por Matteo, será inapropiado? No lo sé, de igual forma es mi compañero de trabajo.

-Karla, buen día, soy Sofía Herce. Quería preguntarte por el joven Matteo, quedó en qué llegaría a mi oficina hoy a las 9a.m. pero no llegó, ¿Sabes si vino a trabajar?

-Srita. Sofía, el Sr. Matteo no se presentó a la oficina, o al menos no ha llegado, si llega, yo le notifico que pase con usted.

-Muy amable, gracias Karla.

Cuelgo. Me parece algo extraño, tenemos trabajo que hacer. No había pasado por mi mente, pero... Y si tiene novia? Obvio que tiene novia! Un chico tan atractivo como él, porque habría de estar solo? Debí pensar eso desde un principio.

Intento no pensar en él, me distrae mucho y no puedo concluir nisiquiera una falda, no entiendo porque causa un efecto tan raro en mi. Cuando al fin termino el diseño de una falda, son las 3:30p.m. ya casi es mi hora de salida, Matteo no llego nunca, por alguna razón me desanima la idea de haberlo visto hoy, pase 2 horas de la madrugada pensando en el, y lo que sucedería hoy que lo viera, no puedo creer que un desconocido al que conocí el día de ayer logra desequilibrar mis pensamientos así.
Son las 4:00 p.m. es hora de irme a casa. Quisiera quedarme en la oficina por si llega en cualquier momento, pero que me pasa? Es alguien a quien conocí ayer, debe descartar esas ideas. Comienzo a recoger mis cosas, me siento tan idiota, no pude completar más de 1 diseño en 8 horas, debí hacer mínimo 3, son cosas sencillas, no estoy diseñando un vestido, o algo tan complicado, eran pequeñeces. Salgo de la oficina pensando que mañana Matteo tal vez no se presente nuevamente. En el ascensor recuerdo la conversación del día anterior, y si me preguntaba si tenía auto para llevarme a casa? Quizá solo fue por amabilidad, pero y si no? Necesito descartar esos pensamientos de mi mente, únicamente me estoy ilusionando con cosas que no tienen futuro, o sentido. Al llegar al estacionamiento, me dirijo a mi auto, busco mis llaves entre la bolsa, y cuando las tengo entro al auto, y oh sorpresa! No arranca, ¿podría irme peor? ¿A quien llamo? Nunca me había pasado algo así, solo una vez y quién me ayudó fue el ex novio de Lexi, no sabemos nada de él, y aunque supiéramos, no le hablaría. Bajo del auto, y me dirijo al ascensor para regresar a la recepción y pedir el número de algún mecánico, al llegar al ascensor oigo mi nombre.

-SOFÍA!!! Espera. Subiré contigo.

Es Matteo, ¿llegó a las 4p.m.?  Oh dios, que extraño, ¿y si le pido ayuda a él? ¿Sería apropiado? Cómo el dijo ayer, le puede pasar a cualquiera.

-Matteo! Hola... Oye, tienes algún asunto importante arriba?

-Pues no es tan urgente, dime qué pasa.

-me da un poco de pena, pero no tengo a quien pedirle ayuda. No sé nada de mecánica y mi auto no enciende, ¿podrías ayudarme? Con el número de un mecánico o algo.

-Claro, puedo revisarlo si quieres.

-No, no es necesario, solo necesito el número de un mecánico.

No quiero parecer oportunista, únicamente quiero el número de alguien que pueda ayudarme, espero que Matteo no insista.

-Como quieras, pero el mecánico tardará. Puedo llevarte a casa, si gustas...

Ok, esto es diferente a lo que pensé que pasaría, no se que hacer.

-Pero, mi auto no puede quedarse aquí, aparte, ¿Cómo vendré mañana al trabajo?

-Es fácil de resolver. Podemos hablarle a algún mecánico, y tu auto claro que puede quedarse aquí, eres trabajadora de la empresa, no veo problema. Y mañana... Podría pasar por ti a tu casa, por mi no hay problema.

Esto me dejó boquiabierta. Necesito aire, ¿En serio está diciendo esto?  Quizá estoy alucinando por el pánico de no saber que hacer. Matteo me regresa a la realidad cuando pregunta nuevamente

-¿Entonces?

Oh dios, no estoy alucinando, esto realmente está pasando.

-Esta bien, de acuerdo

No pensé antes de abrir la boca, que hice? Si quiero, pero me da miedo, debí pensarlo,
Soy una estúpida. Sin darme cuenta, el está hablando por teléfono, quizá con un mecánico? Cuando termina se acerca a mi, y me pide las llaves mi auto.

-Las entregaré a la recepción, vendrá un mecánico a verlo, y así podremos irnos sin ningún problema.

Le entrego las llaves y no contesto, esto es tan confuso. Lo veo tomar el ascensor, y lo único que puedo pensar es, ¿Realmente esto está sucediendo? Es increíble. Cuando regresa, me dice que dejó las lleves en recepción y podemos irnos.