Cada Bala Por Ti

The Passing

Durante el viaje no dejaba de pensar en mis cosas y viendo por la ventana del carro, este trayecto fue largo, turnando quien conduce y quien vigila, Ellis trataba de animar al equipo que estaba decaído, eso debido al silencio sepulcral que existía entre nosotros. Pero, ni el mejor sentido del humor podía alegrarme, no puedo dejar de pensar como pude dejar atrás a Ellis, por mi culpa ahora el está privado de su vista.

—Hey trajesitos, hay un problema. — habló Rochelle desde el asiento del copiloto.

—Mierda, vamos bajen, Ellis quédate aquí. — hablé de forma recia, como el líder que ahora ellos necesitan.

Al bajar me acerqué al puente que estaba frente a nosotros, estaba subido y no había forma de bajarlo de este lado, estábamos frente a un gran contratiempo.

—Menuda mierda, debemos bajar ese puente a como de lugar. — diría Couch viendo el puente y el camino libre que había frente de este.

—Tranquilo Couch, debe haber un modo de bajarlo. — diría Ro tratando de ser positiva como siempre.

Sin embargo, algo me daba mala espina, así que con mi AK-47 levanté la mirada y ahí estaba una mujer espiando desde la mirilla del puente.

—¡Hey, acá arriba! — gritó para llamar nuestra atención, aunque, a mi me daba igual si es que no podía bajar el puente.

—Gracias a dios, pensé que era la última mujer viva. — habló Rochelle con ese tono de suspiro y alivio, no la culpo, además del de la tienda de armas, no habíamos interactuado con otro ser humano.

Use la mirilla del rifle de caza para ver que más había con ella, si estaba sola o si había alguien que le hacía compañía. No obstante, no logré divisar algo que me diera un indicio de algún otro superviviente, al menos hasta que alguien de chaleco llego a un lado de la fémina.

—Hey, ¿Ese es el carro de Jimmy?, joder que suerte tienen al conducirlo. — diría aquel hombre algo relajado, aunque, a mi esta situación no me gustaba en lo más mínimo.

—Si lo es, es una pasada... Te dajaré conducirlo si bajas el puente. — hablé tratando de ser lo más firme que podía, aún me preocupa que Ellis este ahí dentro y con esas cosas rondando.

—Lo siento, no podemos bajar el puente, no volveremos ahí abajo después de la última vez. — diría la chica de chamarra roja, aún así, creo que ella sólo está ahí para molestar.

—Los adultos están hablando niña, regresa con tus muñecas.— dije sin pensarlo demasiado, esa mujer es irritante.

—Oye, me gustaría conducir esa belleza, pero, no bajaré después de lo que vivimos, casi perdemos a uno allá y no pienso arriesgarme. — diría el motociclista algo nervioso y apenado, en verdad está gente no sabe lo que es ayudar al prójimo.

No obstante, un hombre algo mayor se asomó del otro lado del puente, tenía cara de pocos amigos, genial, ahora un vejete me va a hablar de su vida, en fin, así son las cosas.

—Escuchen, no bajaremos este puente, sin embargo, todos queremos lo mismo, si logran llegar a este lado y utilizan el motor para bajarlo, nosotros les cubriremos desde arriba. — diría aquel señor sin titubeos y con esa gallardía de líder.

Los tres nos vimos mutuamente, no teníamos nada más que hacer que aceptar aquella propuesta, solo asentí y procedí a sacar a Ellis del coche, aún tenía la venda, pero, debíamos cambiarse la por cualquier posible infección.

—Ellis, no te separes de mi, vamos agarrame la mano. — dije ayudándole a salir, pero, esa miradita de Rochelle lo decía todo.

Tsk, aveces odio a este equipo....