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Me encontraba con aquellos Inspectores, los cuales me llevaron sin mi consentimiento hasta una tienda de ropa, estos querían que nos vistamos iguales.

—¿Qué color nos quedaría bien a los tres?. —preguntó Dan

—Ya les he dicho que yo no me voy a vestir igual que ustedes.

—¿Qué tal de naranja?. —preguntó Fred.

—Estais mal si piensan que voy a vestirme de naranja.

—No sea amargada comisaría, es solo por hoy.

—Vamos hombre, sugiera un color comisaría.

Suspire pesadamente.
¿Porque coño deje que me trajeran aquí?.
Y para ser peor, Volkov estaba en la misma tienda, al vernos se acercó.

—Priviet.

Rodé los ojos.

—¿Qué les parece el morado?, unos pantalones morados y una camisa blanca.

—No voy a usar un pantalón morado.

—Que si lo va ser hombre. —el de máscara blanca me empujó hasta los vestidores y me extendió el pantalón morado y la camisa blanca.

—Vamos comisaría, me hace mucha ilusión que los tres vistamos iguales.

—Agh, esta bien.

Luego de un rato los tres salimos de los probadores.
El ruso seguía ahí, no me quitaba la mirada de encima, joder.

—¿Y usted que mira?.

—Le falta abotonarse un botón. —dijo y se fue.

—Sii, ahora si, vamos a patrullar juntos.

—No, no, no, suficiente con esto.

—Pero tienen que vernos, tenemos que lucir nuestros atuendos.

—Mira Dan, suficiente tengo con aceptar vestirme así.

—Ostia, el abuelo dice que quiere hablar con nosotros tres.

...

Al entrar al despacho de Conway este nos miró, al igual que Volkov.

—¿Me podeis explicar porque coño estais vestidos así?.

—Pregúnteselo a ellos que me han obligado.

—Nuestra ropa ya olía un poquito mal y bueno.. Decidimos que era una buena idea ir vestidos igual.

—Joder.. —Nos miró con asco.

—¿Necesita algo?. —pregunte.

—Si, haber.. ¿Se han reunido con la mafia?.

—Si, es más nos hicieron una prueba.

Asentí.
Estos le contaron la prueba, aunque Gustabo omitió la parte en donde pedía un cargador pero rápidamente Horacio le dijo a Conway.

—Que lo hice para protegerte Horacio, si yo no me mostraba así íbamos a terminar los dos muertos.

—No, no mientas Gustabo, siento que Samantha me protege más que tu.

—Joder.. ¿Cuantas veces te he defendido Horacio? ¿Cuantas veces te he dicho que dejes de ser un blando? Te lo he dicho muchas veces pero tu pareces no entender y tu mismo te buscaste esto, ¿qué Samantha te protege? No lo dudo pero yo también lo hago, siempre lo he echo.

—Pero con la mafia parece que no lo hicieras.

Sabía que Horacio se sentía mal, se le podía ver en sus ojos, estos estaban agudos y su voz se notaba quebrada.

—Horacio, venga conmigo. —dije moviéndome de mi lugar, dirigiéndome hacia la puerta.

—Claroo.. Ahora irá, te dará un abrazo y te dirá que todo está bien y que ella va protegerte ¿o me equivoco?.

Me gire y mire al de máscara blanca.

—Haber.. Dejemos esto atrás, esperemos a que la mafia les llame y les diga que es lo que pasará con Horacio, por favor, os estais portando como unos putos críos.

—De echo.. Hemos tenido una reunión y quedaron en echar a Horacio de la mafia, ¿no es así Samantha que estabas al lado del chino? Que por cierto, estas siempre al lado de el.

Que hijo de puta, estaba metiendo mierda.

—Claro, de echo así ha dicho Nadando.

Respondí omitiendo el tema.

—Hasta el tema omite.. Joder.. Cuidado Samantha no te vayas enamorar de el.

—Deje de meter mierda Gustabo. —esta vez hablo el ruso.

—Pero si es cierto, ¿o no Horacio?.

—¿Qué tiene de malo que este al lado del Chino? ¿Acaso le molesta?. —pregunte retandolo con la mirada.

—Basta ya de tonterías, parecen putos críos peleando en el patio, joder.

...

Me encontraba fuera de las oficinas del CNI.
Michelle me dijo que tenía que presentarme a alguien y que tenia una misión para mi y para Volkov.
Al acercarme al ascensor vi a Freddy, ¿qué coño hace aquí?.

—¿Trucazo?.

—ostia, Samantha, neno ¿que haces aquí?.

—Lo mismo me pregunto yo, ¿que haces aquí?.

—Pues que me enviaron un mensaje diciéndome que me iban a presentar alguien importante, oíste, ¿no serás tu?.

Nos adentramos al edificio.

—Tanto tiempo sin verte Trucazo.

—Lo mismo digo neno, por cierto, ¿como supiste que Gines es mi hijo?.

—Vi los papeles de adopción.

Fuimos a la oficina de Michelle.
Ahí estaba ella junto a Volkov.

—Por lo visto no hace falta que los presente.

—Pues no.

—¿Desde cuando se conocen?.

—Trucazo y su hermano me recibieron a mi y a Ivanov en la ciudad, por cierto.. ¿Y José Maria? Hace mucho que no lo veo.

—Otro día te cuento sobre el Samantha, han pasado muchas cosas.

—Bien, Trucazo, espérame en la armería. —le ordenó Michelle.

Este asintió y se fue de la oficina.

—Como sabréis, os he llamado para que realicen una misión.

—¿Aún debo hacer misiones? ¿No crees que es suficiente con que este infiltrada en la mafia y sea parte del CNP?

—Ay cariño, ahora entiendo el porqué tu y Conway se llevan bien.

—Bueno, Conway y yo no somos tan diferentes después de todo. —respondí.

—Será la última misión que te pediré, además, os va servir, tanto como a ti y a Volkov, tengan —abrió un cajón de su escritorio y tomó dos sobres, nos lo extendió.

Tome el sobre.

—¿Puedo abrirlo?.

—Claro, hay están sus pasajes junto a lo que tienen que investigar, buena suerte.

—No le voy hacer un informe.

—No empieces Samantha.

Holis.
Aquí ya hay un dato sobre el pasado de Samantha y empezaré a dejar más.
Atentos..

vendetta (Viktor Volkov) SpainRpDonde viven las historias. Descúbrelo ahora