La ciudad de los Santos

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Horacio

Luego de ir a la playa y divertimos con los chicos, se nos acerco un tipo que vendía droga , nosotros le dijimos que no, que no queríamos y que no consumimos ese tipo de sustancias, pero el hombre estaba insistente. Se ve que alguien llamó a la policía, porque esta vino y para mi sorpresa era los dos comisarios.

El vendedor al verlo se asusto y tomo a Gustabo como Rehén, mientras le apuntaba con un arma en la cabeza. Los agentes le apuntaron y le dijeron que baje el arma, este se negaba. Se escucho un disparo y noto como me comenzó a doler la pierna, caí al suelo. Comencé a ver mi pierna, estaba perdiendo mucha sangre, mis amigos se acercaron a ver todo , mientras uno de los comisarios esposaba al vendedor, el otro me tomo en brazos y me subió al patrulla con el otro comisario y el vendedor. Lo único que recuerdo era que uno me decía "aguanta Horacio, aguanta" y me desmayo por la pérdida de sangre.

Cuando desperté, la luz me daba en la cara, pero cuando logre aclararme , pude notar a un ángel a mi lado.

H- es usted un ángel?- fue lo único que llegue a decir.

Dr- depende, mis manos son de Ángel - dijo riendo.

Diosss!!!! Que guapo era , tenía los ojos de un color celeste clarito, casi que grises, era moreno y tenía un tatuaje en la cara , pero ni dejaba de ser lindo.

Este me terminó de vender la herida y me ayudo a incorporarme sobre la camilla.

Dr- como te sientes?- pregunto posicionandose frente mia.

H- pues, bastante bien-dije riendo.

Dr- muy bien , Me puedes dar tu DNI?-

H- claro- caso mi billetera y le entregó mi documento- tome- este lo agarra.

Dr- Horacio?- pregunto viendome sorprendido- te acuerdas de mi? Soy Claudio-

H- Claudio? El de la escuela?-

Cl- ese! Ese mismo- dijo riendo- cuanto tiempo sin verte eh!-

H- si la verdad que si-

Cl- Me enteré de que te habías ido, nunca supe el porque, pero es bueno volver a verte- dijo separándose de mi.

H- lo mismo digo y que sorpresa que seas doctor-

Cl- si, la verdad que si, pero bueno- dijo extendiendo una paleta de corazón que saco de su bolsillo- toma te la ganaste- dijo con una sonrisa.

Yo también sonreí hasta que la voz de Volkov se hizo presente.

V- como se encuentra Horacio?- dijo desde la puerta.

H- pues , bien, gracias a este ángel- dije mientras tomaba la paleta.

V- ya veo , bueno , tus amigos te están esperando afuera-

H- ok ya voy- dije parA ponerme de pie pero Claudio me detuvo.

Cl- espera, vas a tener que usar unas muletas por al menos 1 semana , por su lado dudas, para no hacer demasiada fuerza ni nada- dijo para salir de la habitación unos minutos.

Nos quedamos en silencio , yo miraba al piso, pero podía sentir como Volkov me miraba fijamente y decidí hacer lo mismo y cruzamos miradas.

H- pasa algo?-

V- no , no pasa nada- dijo frío.

En eso volvió Claudio con las muletas. Le pregunte si era necesario y me dijo que si , asique no me quedaba más remedio, me dio unas pastillas para que tome cada 8 horas y que si tenía algún dolor o incomodidad que venga al hospital, estaba apunto de salir pero Claudio me detuvo.