La ciudad de los Santos

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Gustabo

El sujeto me estiró la mano para ayudarme, la tomé y me levanté.

¿?- disculpa amigo, no te vi-

G- no pasa nada, tranquilo-

¿?- bueno, mi nombre es Raul, Raul Rubier-

G- Rubier?-

R- si, soy Rubier-

G-  ah, vale, vale- dije tratando de no reirme.

R- no me digas que me vas a odiar por ser Rubier, adelante, estas en todo tu derecho, habla a mis espaldas- este se va la vuelta y me da la espalda.

G- no, no tranquilo, no te odio por ser Rubier- dije riendo.

R- a bueno, mejor-

G- no querés ir a tomar algo?- pregunté tímido.

R- dale, de una papa-

G- veo que sos de Argentina,¿ o me equivoco?-

R- no, estas en todo lo correcto, VIVA ARGENTINA, EL ASADO, MESSI Y MARADONA- dijo riendo.

Yo sólo reí, fuimos a un local de comidas rápidas, pedimos hamburguesas con papás fritas y unas sodas.

Raúl me dijo que habia venido hace copo, que la economía de Argentina no era muy buena, asique vino a buscar trabajo.

R- si, igual tan bien no estoy, onda trabajo de basurero, es una mierda pero algo se gana- dijo riendo.

G- yo también trabajo de basurero-

R- uh disculpa, no lo dije con mala intención-

G- no,no, tranquilo, en realidad si es una puta mierda-

Raúl me contó un poco de su vida, no tenia hermanos, sus padres vivían en Argentina.
Yo le comenté que no tenía padres, mi única familia era Horacio, el me pregunto si era el chico que aparecía todos los días en las notícias, le dije que si, que lamentablemente no sabíamos en donde estaba. El se quedó callado, normal, no sabía que decirme.

Solo se acercó y me dio un abrazo, yo se lo devolví, lo necesitaba. Sinceramente me sentía mal, antes de su secuestró, con Rogelio y Segismundo lo obligamos a atracar y tuvimos una pelea.
Pero lo extrañado demasiado y necesitó que este conmigo otra vez.

Terminamos de comer, me pido mi número de  teléfono, obviamente se lo di, a la mañana siguiente, nos veríamos en el trabajo.

Volví a mi casa, bueno en realidad la casa que era de Segis y Rogelio. Les pedí permiso para quedarme con ellos hasta que Horacio vuelva.  Ellos aceptaron.

Entre y ellos ya estaban durmiendo, asique solo pase a mi habitación y me tiré a dormir.

Horacio

Me desperté al sentir un peso en el pecho, pense que era John.

H- John, es muy temprano para hacerlo, tengo sueño- dije medio dormido.

X- puto malicon- al escuchar a Xiaomi, me senté rápidamente como pude.

H- que paso?-

X- bueno, tenemos una joyelia que lobal- dijo riendo.

H- joder... ya voy-

X- vale, te tlaje algo de lopa- dijo apuntado la ropa que habia a un costado.

Cu- Xiaomi te dije que no fueras tan brusco- dijo entrando a la habitación.

X- que lo despelte como a una plincesa- dijo riendo.

Cu- mmmm bueno, como digas- volteó a mirarme- espero que mi ropa te quedé, es la más pequeña que tengo-

H- vale, gracias- dije riendo- bueno me voy a cambiar- dije para que salgan, pero ninguno de los dos lo hicieron.

J- se pueden ir a la mierda- dijo saliendo del baño- se tiene que cambiar y puede solo- dijo molestó.

X- vamos Culebla- dijo empujandolo.

Me senté en la cama y me saqué mi ropa, para luego ponerme la de Culebra.

J- no es necesario que te pongas la de el, puede ponerte la mia-

H- tranquilo, solo es su ropa, además es más de mi talle-

J- vale...-

Me terminé de cambiar y me fui al baño para hacer mis necesidades, lavarme la cara y los dientes. Cuando salí , John ya estaba cambiado, asique bajamos con los demás.

Abajo estaban Xiaomi, Nadando, Culebra y Evo repasando el plan. Evo estaría de tirador, Nadando haría de rehén, para ver cuantos policías estarán afuera, cosa de estar atentos si quedan o no.

Cebralin nos trajo un coche robado, para que no tengan nuestra matrícula, el que negociará es Xiaomi, yo estaría en la parte de atrás con culebra y Gringo estaría cubriendo a Xiaomi.

N- no se preocupen que si algo sale mal, tengo a un chico que quiere entrar en la mafia que nos ayudará. Es bastante bueno con las armas, asique también se va a colocar como tirador-

J- es de confianza?-

N- lleva vendiendo droga para nosotros desde hace unos meses-

X- y nosotlos no sabíamos nada-

N- acá el jefe soy yo, si les quiero decir a quien meto, lo hago, pero no estoy obligado-

J- bueno, como sea, ya tendríamos que ir saliendo-

N- venga, hasta ahora- dijo saliendo de la casa con Xiaomi y Evo.

Cu- Horacio, espera -dijo extendiendo su mano, en esta había una máscara de Taco- la vi ayer en la tienda y pensé  que te gustaría- dijo riendo tímido.

H- me encanta - dije agarrandola- gracias-

J- Horacio, tienes que ponerte un nombre para que no te reconozcan- dijo poniéndose entre Culebra y de mi, dándole la espalda a el otro.

H- tienes razón...- dije pensando en que nombre usaría.

Cu- puedes poner Taco, pero con K-

J- es horrible-

H- me encanta - dije al mismo tiempo que Gringo, este me miro enojado y salió de la casa.

Cu- por la máscara, combina- dijo riendo.

Ambos salimos de la casa y nos montamos en el auto, en este íbamos los 4 que atracariamos.

Nadando nos dijo que el otro sujeto, el cual no sabemos su nombre, llevaría los rehenes a joyería.
Al llegar, vimos a un hombre con la máscara de diablo y con este hacían 4 rehenes, 1 de estos, era Nadando.

Todo el plan iba a la perfección, asique solo teníamos que empezar a robar y listo.
Entramos Xiaomi y Culebra fueron a la parte de atrás, yo me quedé con Gringo a esperar a la policía.  Note que este estaba un poco distante.

H- estas bien?- pregunté agarrandolo de la mano.

J- si- dijo soltandose de mi agarré.

H- te enojaste otra vez?- dije algo molestó.

J-.....- lo mire enojado y me fui a la parte de atrás.

A decir verdad, era molestó que se enojé por cualquier cosa. Creo que para evitarlo, tendría que volver a estar encerrado.
Culebra era un chico lindo y agradable, pero no me gustaba. A decir verdad, podria tener algo con el para que Gringo se enojé con éste, pero me daba pena por Culebra, el pagaría los trapos rotos.

Escuchamos unas sirenas, la policía había llegado, los deje solos y volví con Gringo, este se notaba molesto, mire a la puerta y supuse porque era.

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