Capítulo 10

14 0 0
                                    

Una ola de sentimientos arrasó en el corazón de Jungkook cuando escucho a Jimin hablándole a su bebé, el pequeño dentro se movió un poco más, provocando una leve incomodidad.

-Debes dejar de moverte demasiado, molestas a tu Padre y lo haces sentir mal-. Jimin volvió a hablarle a la barriga de Jungkook cuando noto la cara de incomodidad. Y sorprendentemente segundos después el bebé dejó de moverse.

Jungkook lo miró sorprendido.

-¿Cómo hiciste eso?-  Le pregunta.

-¿Cómo hice qué?-

-Hacer que dejara de moverse-

-Solo le dije que dejara de moverse-. Contestó Park sonriendo.

Jungkook le dedicó una sonrisa suave y acarició su estómago cuando volvió a sentir a su pequeño moviéndose dentro.

-¿Cómo se llamará?-  Le pregunta Jimin mientras toma las cartas y le ofrece una a Jungkook.

-¿Ah? Oh, aún no tengo nombres pensados, me gusta Jungmin, pero quisiera un nombre que tuviera más  significado-

-Jungmin me gusta, pero después puedes escoger otro-

Jungkook volvió a sonreír por millonésima vez ese día. El mesero llego a tomar su orden y este se sorprendió de ver a uno de sus compañeros de trabajo tomando la comida con un chico pues este creía que tenía algo con Shana. Ordenaron algo y cuando su comida estuvo lista comieron y hablaron un poco sobre lo que habían estado haciendo las últimas semanas. Jimin le contó del nuevo empleo, sobre su banda con Jin y los demás chicos y que extrañaría estar por la escuela, puesto que él se había graduado ya. Jungkook en cambio le contó sobre sus últimas citas con el obstetra, sobre lo que había comprado y le faltaba por comprar para la llegada del niño, y que había comenzado con la decoración de su habitación hace dos días.

El tiempo pasó demasiado rápido y cuando menos lo vieron ya era hora de que Jimin volviera a trabajar. Park se despidió de Jeon en la entrada del local, con un corto y casto beso en los labios que ninguno se atrevía a dar, pero a fin de cuentas y con un leve sonrojo en las mejillas lo dieron.

Jungkook volvió a casa caminando, debía hacer ejercicio si quería seguir manteniendo su figura después de dar a luz al bebé. Además su doctor se lo había recomendado si quería mantenerse saludable durante el embarazo. En el camino se cruzó con una tienda pequeña que llamó su atención, había varía ropa para bebé en los aparadores y un par de zapatitos azules llamaron su atención. Tenía que comprarlos, le era inevitable, veía algo lindo y tenía el impulso de comprarlo.

Entró en la tienda y encontró a una anciana sentada delante de la caja. Miró a sus alrededores y vio a varias parejas, entre ellas logró divisar una figura conocida. Era el chico de hace unas semanas, aquel al que veía siempre que iba a una cita con su obstetra, hace un mes que había dejado de ir y el bebé en sus brazos se lo decía: había tenido ya a su bebé y no tenía que ir más al obstetra.

Se acercó un poco y lo llamó. Este volteo y sonrió cuando lo reconoció.

-Eres tú, el chico del hospital de maternidad ¿No es así?-. Le pregunta Jungkook. El chico asiente.

-Así es, cuanto tiempo. Creo que antes no hemos podido presentarnos debidamente, mi nombre es Choi Youngjae-. Le dice extendiéndole la mano libre.

-Jeon Jungkook, y este lindo bebé de aquí debe ser tuyo ¿No?-

-Así es, su nombre es Bae-

-Cariño, encontré este par de zapatitos que quizá...-. Un chico de cabello oscuro se puso al lado de Youngjae. -Young, nunca mencionaste que tuvieras un hermano-. Se quejó infantilmente. Jungkook y Youngjae mostraron una sonrisa y se rieron en voz baja.

Conflicto de Amor (Jikook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora