Conflicto de Amor (Jikook)

Capítulo 31

-Vete de aquí-. Escupió Shana con rabia.

-Lo siento, pero no. Vine aquí con Jimin y me iré con él, deberías agradecerme, de no ser por mi él no habría venido-

-Jimin-

-Shana-

-Jimin-

Hablaron los tres al mismo tiempo. Jungkook suspiro y le mostró una sonrisa.

-Te esperaré en la sala-. Informo comenzando a hacer su camino fuera de la habitación.

-No. Quédate aquí-

-¡Jimin!-

-Es mi pareja Shana, entiéndelo. Es mi pareja, quien lleva a mi hijo-

-¡Yo también llevo a tu hija!-. Grito.

Los tres permanecieron callados hasta que Jungkook murmuró:

-Ya lo veremos-

Venus le dio una mala mirada y suspiro. Rodó los ojos y se acomodó el cabello.

-Bien. Puede quedarse-. Murmuró rendida.

Jungkook agradeció con la mirada y se sentó en una de las orillas de la cama. Jimin se acercó y se sentó en la otra orilla. Se quedaron callados sin saber qué decir. Shana había recogido sus piernas y las había cruzado, al igual que sus brazos y miraba distraída a cualquier lugar. Jimin miraba fijamente a Jungkook y este último miraba hacia el vientre ya visible de la chica.

-¿C-como esta?-. Pregunto Jungkook desviando la mirada. Ella le miro con duda y cuando Kook volvió a verla suspiro. -Ella. El bebé como esta-

Shana se lo pensó bien antes de contestar. -Bien... Ella está bien-. Contestó insegura de lo que Jungkook tramaba, Jimin solo los observaba interactuar. -¿C-cómo está él?-. Al igual que Jungkook, Shana desvió la mirada.

-Bien, él está bien-. Contestó imitando la respuesta.

Volvieron al silencio, pero a diferencia de hace un momento, este silencio era más cálido. Jimin sonrió cortamente y sin que Jungkook o Shana se dieran cuenta salió de la habitación.

-¿Ya tienes una fecha?-. Shana habló rompiendo el silencio.

-¿Ah?-

-Para la llegada-

-Ah. Sí. Sí, así es, será para la segunda o tercera semana de Diciembre-

-Falta muy poco-. Murmuró. -Solo un mes. Arien llegará en Febrero-

-Lo sé, falta muy poco. ¿Ya tienes un nombre?-

-Así es-. Contestó tímida, obteniendo un leve rubor en sus mejillas, y Jungkook se sorprendió por aquello.

Volvieron a permanecer en silencio de nueva cuenta, ella tenía la mirada en sus manos, Jungkook la miraba fijamente, pero desvió un poco la mirada para buscar a Jimin, estaba demasiado callado. Al notar que él no estaba giró la cabeza en varias direcciones aun buscándolo, y cuando. Shana le vio buscando a alguien levantó un poco más el rostro.

-¿A dónde se fue?-. Murmuró ella.

Jungkook la miró fijamente de nuevo, era ahora o nunca. -Escucha-. Shana se giró para verlo. -Quiero dejarte algo muy en claro, y ese algo es que Jimin es mío, lo fue desde un principio y lo seguirá siendo hasta que él quiera, es el padre de mi bebé y no voy a permitir que se vaya de mi lado. Aceptaré el hecho de que probablemente Arin sea de Jimin, pero mientras ella no nazca y no lo verifique con mis propios ojos seguiré sin creerte, aunque lo esté aceptando momentáneamente, también aceptaré el hecho de que Jimin tenga que venir a verte, pero no vendré más con él, solo lo acompañe por esta ocasión porque necesitaba dejarte en claro ese punto. No más rencores, seamos solo dos personas que se han visto en pocas ocasiones-

-¿Qué quieres decir?-

-Te perdono, de mi parte no hay más rencores, por el bien de mi bebé, del tuyo y de ambos-. La chica abrió la boca para hablar, pero Jungkook la interrumpió poniéndose de pie. -No me contestes, solo tenía que decirlo, no es como si estuviera esperando tu respuesta de cualquier manera. Fue bueno verte, y fue bueno tener una charla normal contigo al menos por una vez, enviaré a Jimin aquí adentro para que puedan charlar a gusto-

Y sin decir nada más salió. Llamó a Jimin y lo obligó a entrar en la habitación. Él esperó pacientemente sentado en uno de los sofás de la sala hasta que Jimin volvió a salir, este tenía un rostro un poco más relajado y le sonrió a Jungkook antes de besarlo en la mejilla. Se despidieron de los dos guardias y salieron para tomar un taxi. No hablaron en todo el camino hasta llegar al apartamento de Jungkook.

Al entrar Jimin le dio un largo y hambriento beso, lo abrazo con fuerza y murmuró un "gracias". No hicieron falta más palabras, Kook lo abrazó con fuerza también y acarició su nuca.

-Tenía que hablar de esto con ella, creí que era necesario-. Le contestó aún abrazándolo.

-Lo era, ella lo tomó demasiado bien-

-¿Así fue? Eso es bueno, creí que se molestaría, está embarazada, las hormonas alteran tu cuerpo... Yo habría explotado-. Río.

-Porque eres Jeon Jungkook-

Jungkook rió con más fuerza y se separó un poco del abrazo para besar a Jimin en los labios. El beso comenzó siendo lento y tierno, pero poco a poco se tornó húmedo, lenguas bailaban y dientes chocaban. Jimin mordió suavemente ella bio inferior de Jungkook y este lamió con su lengua el labio superior de Jimin.

Caminaron hasta la habitación de Jungkook entre besos y risas, Jimin se sentó en la cama y él se sentó ahorcadas en sus piernas frotando intencionalmente sus entrepiernas por un leve momento. Ambos comenzaron un excitante juego con sus lenguas, donde solo ellas bailaban, pero sus labios no se tocaban, ni se rozaban.

En menos de un minuto lograron deshacerse de los molestos abrigos y las manos de Jungkook ya hacían su camino dentro de la camiseta de Jimin y cuando este vio el camino de las cosas detuvo sus manos.

-No podemos Kookie-. Murmuró sobre sus labios.

-Sí podemos-

-Podría lastimarte-

-No lo harás-

-Jugkookie-

-Park Jimin... Te necesito-

Y eso fue todo.

Jungkook se abalanzó sobre Jimin devorando sus labios, este lo recibió de buena gana, chupando y lamiendo sus labios, mordiéndolos y jadeando sobre ellos. Se deshicieron de sus ropas entre besos, recorrieron el cuerpo del otro con besos y caricias. Tomaron un mejor lugar al centro de la cama. Jimin fue lento y suave con Jungkook, cuidando de no lastimarlo y aunque tardaron en llegar, el orgasmo los abrazo fuertemente a ambos.

Tan pronto como acabaron el sueño los arropo, durmieron abrazados, cara a cara y con una sonrisa en sus rostros. La mañana los recibió con una fina capa de nieve en las calles, el cielo estaba poco nublado y había poca gente fuera.

Se ducharon juntos y desayunaron viendo TV, pasaron todo el día juntos, salieron a comprar los últimos detalles para Yeonjun, visitaron cortamente a Youngjae y Jaejum, Jimin se divirtió jugando con el pequeño Bae quien ya sabía decir unas cuantas palabras, todos rieron mucho cuando los deditos de Bae se introdujeron accidentalmente en los ojos de Park, y quien más río fue, por supuesto, el pequeño Bae, con una sonora carcajada y sus ojitos achinados mientras aplaudía su travesura.

Jungkook se enterneció con aquella imagen, y nuevamente no podía esperar a verse a ellos mismos jugar con Yeonjun.

Después de la visita volvieron cada quien a sus respectivos hogares. Jimin prometió regresar a la mañana siguiente, y también le había prometido arrastrar a Jihyun y a su madre con él. Jungkook no podía esperar por aquello, había visitado muchísimas veces a la familia Park, pero en esos tiempos ellos no sabían de su relación, y finalmente después de tanto tiempo podía ver a la familia Park como su familia.

Durante la noche Jungkook permaneció hablando con su pequeño, diciéndole cosas hermosas, arrullándolo, cantándole, pidiéndole que llegará pronto. Pero más importante que nada, diciéndole que tanto él como Jimin lo amaban más a que a su vida propia, y que no importaba que, ellos darían todo por él.

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