El amor es como un juego.

52 9 0
                                    

*editado*

Me detuve frente a su puerta con los brazos cruzados, a pesar de ser las cuatro de la tarde, hace un frío inmenso, gracias al tiempo de lluvia que ha estado formándose hace más de una hora. Luego de lo que paso, estuve deambulando por todos lado, incluso fui a mi cafetería favorita, pero mis pensamientos solo se centraban en Logan.

¿Entonces prefieres ser una rompe corazones antes que estar conmigo?

No supe que responderle en ese momento, ni siquiera sabía que él estaba atrás de mí escuchándome. ¿Por qué esto de darle una nueva oportunidad al amor tiene que ser tan difícil? Todo era mejor cuando solo era la rompe corazones, pero él tuvo que acercarse a mí, y confundirme por completo.

¿Pero si estas dispuesta a perderme a mí?

No.

Por alguna razón no quiero perderlo, pero tampoco quiero dejar de ser la rompe corazones, ese escudo me ha protegido durante tantos años para no ser lastimada, no sé si estoy lista para dejarlo atrás tan rápido.

Toque la puerta tímidamente, unos segundos después, esta se abrió dejándome ver a aquel chico de cabello rubio y ojos cafés, ese que ha estado conmigo desde el primer día que llegue acá, y el mismo que me confeso que me amaba.

No hizo falta que dijera nada, que hiciera algún gesto o le diera alguna señal. Él ya sabía que estaba triste ¿Qué cómo lo sé? Pues porque me sonrió tiernamente y sin pedir permiso me abrazo. Haciendo que de cierta forma me sienta mejor, le correspondí el abrazo hundiendo mi cabeza en el espacio entre su hombro y su cuello. No estoy llorando, pero si me siento mal, la indecisión de no saber qué hacer me hace sentirme así.

_ ¿Qué paso Riley? —pregunto con calma, sin dejar de abrazarme.

_No sé qué hacer Ángel. —respondí en un susurro.

_Ven, hablemos adentro, mi compañero no está —me informo, agarro mi mano con gentileza mientras se separaba de mi para llevarme adentro, después de que yo entrara cerró la puerta y me llevo a su cama. Ambos nos sentamos en la orilla de esta, mientras nos mirábamos a los ojos. — ahora sí, dime que pasa.

Me tome mi tiempo para responder, no estoy segura si está bien que hable de esto con él, pero es la única persona en quien confió, así que es él o nada.

_Logan, él quiere que deje de ser la rompe corazones, pero no quiero dejar de serlo. Tú sabes porque decidí ser eso, no estoy segura si estoy lista para dejarlo atrás —mi vista esta puesta en mis manos, miraba mis uñas y mis dedos como si fuesen lo más interesante del mundo.

_Lo de Evan fue hace mucho tiempo, Riley. Dudo que cupido busque hacerte daño —dijo pero yo seguía sin mirarlo, la mención de ese nombre hizo que se me pusieran los pelos de punta— voy a preguntarte algo —asentí— ¿Prefieres ser una rompe corazones y quedarte sola por el resto de tu vida, pero con el corazón intacto, o preferirías dejar eso atrás, volver a intentarlo y crear lindos recuerdos?

_ ¿Y si vuelve a ocurrir?

_ ¿Y qué tal si no? —no dije nada, me quede callada hasta que el volvió a hablar— El amor es  como un juego, a veces ganas y a veces pierdes —su sonrisa hizo que me calmara un poco, pareció dudarlo pero luego de unos segundos se decidió en tomar mi mano.

En el pasado él nunca había hecho algo como esto, hacia un gran trabajo ocultándolos, pero ahora ya no lo hace, en sus ojos hay un pequeño brillo de ilusión, pero no se atreve a hacer nada más que eso, tomar mi mano.

_No te digo que no saldrás lastimada, solo te digo que nunca lo sabrás si no lo intentas —llevo su mano libre a mi cabello y lo revolvió, causando que yo también hiciera lo mismo, su risa es contagiosa, él siempre ha sabido cómo hacerme reír.

Creo que después de todo si tuve un amigo todo este tiempo, solo que nunca quise aceptarlo.

Luego de reír juntos volví a retomar la charla— pero... ¿Cómo sabré cual es la decisión correcta?

_Bueno, eso lo decides tú —se tomó un tiempo antes de seguir hablando— ¿Prefieres a Logan o ser la rompe corazones?

...

Luego de la charla con Ángel, salí rápidamente de allí, sin darme cuenta ya se había hecho de noche. Es ahora o nunca, espero que la decisión que acabo de tomar sea la correcta.

El camino hacia donde iba es corto, después de todo, la habitación de Ángel no queda tan alejada de la de Logan. Cuando llegue a su habitación solo toque su puerta, no me tome tiempo para pensarlo ni nada, simplemente lo hice antes de que tuviera tiempo para arrepentirme.

Logan abrió la puerta, pude notar un poco de asombro en su mirada, al parecer no esperaba que viniera. Di un largo suspiro para luego hablar— perdona, Logan. —Él parecía confuso así que continúe— perdón si te hice sentir mal con mi indecisión, es solo que he pasado tanto tiempo siendo una rompe corazones que ya no recuerdo como hacer las cosas bien. Incluso olvide cuales son mis prioridades —tímidamente me acerque a él, quien no se movió de su puesto permitiendo que me acercara todo lo que quisiera, envolví mis brazos en su cuello esta vez con más confianza— ahora mismo tú eres mi prioridad, no ser una rompe corazones. Si ellas quieren quedarse con ese puesto, entonces que se lo queden, yo te prefiero a ti —le brinde una de mis sonrisas más sinceras.

No sé de donde salió todo eso, solo quise decirlo y eso hice.

_Riley —una de sus manos se posó en mi cintura y la otra la llevo a mi rostro, haciendo círculos con su dedo pulgar sobre mi cachete, cerré mi ojos por un instante para disfrutar del pequeño tacto, pero los volví a abrir al escuchar su confesión— me gustas, me gustas mucho Riley. No tengo ni la más mínima idea de cuando empezó, solo sé que me gustas.

Y así fue como mirándonos a los ojos, frente a su habitación en los dormitorios de los chico, volvimos a besarnos, con la misma intensidad de la primera vez, pero con la diferencia de que ahora nuestros sentimientos estaban más claros.

Con este simple beso me di cuenta de varias cosas, como que besar a este chico es una de mis cosas favoritas... y que Logan enserio me gusta.

Al separarnos pude ver en sus ojos ese característico brillo de ilusión que se le es imposible de ocultar. Desde aquí puedo apreciar mejor sus pequeñas pecas, que aunque son pocas, lo hacen lucir más atractivo de lo que él ya es. Sus lindos ojos verdes examinan mi rostro, de la misma manera que yo lo hago.

_También... me gustas —confesé de pronto, cosa que ni él ni yo nos esperábamos. Me miro directo a los ojos en busca de alguna señal que le dijera si lo que dije era cierto o no.

_ ¿Y ahora qué? —Pregunto y ambos reímos— hermosa Riley ¿Te gustaría tener una cita conmigo, el chico más guapo de esta universidad?

_No lo sé, siendo yo la chica más guapa de esta universidad tengo una vida muy ocupada, déjame ver si tengo un espacio en mi agenda —dije utilizando el mismo tono de arrogancia que él.

_ ¿Te gusta que te rueguen verdad? —sonrió mostrando su hermosa dentadura.

_Puede que sí —le guiñe un ojo.

Sin muchos ánimos, me aleje de él— tengo que irme —me di la vuelta para alejarme dando pequeños pasos.

_Espera, no respondiste mi pregunta, Riley. — exclamo en un tono alto para asegurarse de que lo escuchara.

_Te veo mañana, cupido, para que podamos planear nuestra cita —dije en su mismo tono de voz, sin voltearme a verlo, pero aun sin hacerlo, sé que está sonriendo igual que yo.

El Cupido Y La Rompe Corazones.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora