¿Han...Tae?

siete;

Kim Taehyung podría describir ese sueño como uno de los más extraños que había tenido. Quería convencerse de que sus memorias se estaban combinando con las de su alterego.

La cabeza le dolía un poco, no sabía si fue por la posición en la que durmió o simplemente por el sueño tan extraño que había tenido. Pero tampoco sentía que debía preocuparse.

Se levantó un poco apoyándose de sus codos, despertando todos sus sentidos poco a poco, su mirada estaba un poco borrosa aún pero con el pasar de los segundos empezó a enfocar de mejor manera, dándose cuenta que no estaba en su "lugar para dormir", no, estaba en lo alto.

Observó un poco confundido a su alrededor y se topó con la figura de YeoWool durmiendo pacíficamente, eran apenas las cuatro de la mañana, recordó que había empezado a dormir con el chico desde aquel día, dónde se vio reflejado en el espejo, no podía olvidar la voz de aquella mujer que le llamaba y esa misma se había presentado en su sueño. Había una persona más, alguien que dedujo era un conocido o familiar de HanSung por la forma en la que hablaba, simplemente recordaba algo de "puro" y "poder", palabras dichas por un anciano que allí aparecía, mientras Taehyung no era más que un espectador y aquella mujer también lo era.

Decidió recostarse nuevamente, pudo sentir como la persona junto a él se acomodaba un poco en la pequeña cama. Taehyung agradecía que le dejara dormir con él y ya no encadenado, era un jodido alivio para él.

Cayó dormido nuevamente, intentando soñar con caras conocidas esta vez, fallando en el proceso logrando que, aquel sueño se repitiera nuevamente hasta que los rayos de luz le molestaron anunciando la llegada de las primeras hora del día. Despertó siendo abrazado por Yeowool que se le había hecho costumbre el abrazarle y realmente no le molestaba en absoluto. Una parte de él se sentía en paz.

«🌸»

HanSung estaba en medio de aquel salón, observando a aquellos chicos moverse con verdadera sincronía al ritmo de la música, estaban bailando su próxima canción que saldría en unos días. Pudo observar como su cabello azul brillaba aún más, ahora que lo habían vuelto a pintar cómo le habían explicado. Él sólo se limitaba a asentir.

Se preguntaba si realmente sería capaz de fingir que podía hacer todo eso, cómo aquellas personas frente a él que eran dignas de admirar.

Los demás miembros ya estaban al tanto de la situación de Taehyung, siendo el mismo Jungkook quien se culpara cada cinco segundos por lo que hizo, le ayudaba en todo lo que podía, además de que solía encubrirle cuando personas ajenas a ellos siete, preguntaban por él; inventaba excusas baratas pero efectivas.

Las horas pasaron y en ese tiempo intentaron que Taehyung, pudiera coordinar un paso, solamente uno.

Pero HanSung supo, que aunque fuera en otro cuerpo, el tendría la misma habilidad en el baile que un grillo congelado. Podría memorizar constelaciones, pero no pasos de baile.

La práctica concluyó con un mal sabor de boca para todos, y el chico de pelo azul sabía que era por él, se sentía un tanto deprimido por ello, pero no podía hacer nada más que quedarse en silencio e inclusive encerrarse en cualquier lugar para estar sólo e intentar recordar; sin embargo sus memorias a cada día estaban más distorsionadas.

Se encogió en su lugar cuando todos se quedaron en silencio y uno de ellos, pálido y con facciones un tanto gatunas, salió de allí irritado con todo eso, seguido de otro un poco más llenito y moreno, así fueron saliendo uno a uno, estaban hartos y él lo sabía.